Áreas silvestres protegidas de Itaipú para niños
Las áreas silvestres protegidas de Itaipú son un conjunto de siete zonas especiales que rodean la represa de Itaipú, una de las más grandes del mundo en producción de energía. Esta represa se encuentra entre Paraguay y Brasil. Cuando se formó el lago artificial en 1982, que es uno de los más grandes del mundo con 29 millones de metros cúbicos de agua, las comunidades cercanas comenzaron a desarrollar nuevas actividades económicas, especialmente el turismo. El lago tiene una extensión de 200 kilómetros en línea recta, pero si contamos todas sus bahías y curvas, ¡llega a 1400 kilómetros!
La creación de este lago no solo cambió el paisaje, sino también la economía de la región. La agricultura, que era la actividad principal, empezó a compartir su lugar con el turismo. Se crearon varias playas artificiales a lo largo del lago, donde la gente puede disfrutar de deportes acuáticos.
Contenido
Refugios Biológicos: Hogares de la Naturaleza
Estas áreas son importantes para proteger la vida silvestre. El clima en estos refugios es subtropical, lo que significa que hace calor y llueve mucho. La temperatura promedio anual es de 21 a 22 °C.
Tati Yupí: Un Bosque Lleno de Vida
Este refugio tiene 2245 hectáreas y está en Hernandarias, en el departamento Alto Paraná de Paraguay, cerca del río Paraná. Su terreno es bastante plano con algunas ondulaciones. Aquí hay arroyos importantes como el Tatî Yupi y el Pira Pytâ, que tienen pequeñas cascadas muy bonitas.
El refugio está cubierto principalmente por bosques altos y bajos, así como zonas de pastizales. En los bosques altos, puedes encontrar árboles que superan los 30 metros de altura, como el cedro y el lapacho. En los bosques más bajos, hay especies como el ñangapiry. El bosque también es hogar de muchas plantas que crecen sobre otras plantas (epífitas), helechos y una gran variedad de bromeliáceas y orquidáceas.
En Tati Yupí viven 39 especies de mamíferos, como el kuatî, el carpincho y el tatú (armadillo). También hay 247 especies de aves, como el tero tero, y 21 especies de reptiles, incluyendo la yarará y el yacaré.
Pikyry: Un Corredor Natural
Este refugio se encuentra en el Departamento de Alto Paraná, Paraguay, en la orilla derecha del río Paraná. Tiene una superficie de 1110 hectáreas. Su terreno es mayormente plano y sus suelos son ricos en materia orgánica.
Pikyry es parte de un "corredor biológico", una franja de tierra que conecta diferentes áreas protegidas, permitiendo que los animales se muevan libremente entre ellas. La vegetación aquí incluye árboles como el Tabebuia y el Cedrela fissilis. También hay muchas plantas más pequeñas como Bromeliaceae y Rubiaceae. Cerca del refugio, se encontró una especie de palmera, la Trithrinax brasiliensis, que es muy rara en la zona.
Aquí se han registrado varias especies de mamíferos, aves y reptiles, como el carpincho (Hydrochaeris hydrochaeris), el mono (Cebus apella) y el kuatí (Nasua nasua).
Carapá: Protección para Especies Amenazadas
El refugio biológico de Carapá está en el Departamento de Canindeyú, Paraguay, a 260 kilómetros al norte de Ciudad del Este. Fue creado en 1984 y tiene 3250 hectáreas. Está rodeado de montañas y terrenos con desniveles.
La vegetación de Carapá incluye bosques altos y bajos, así como zonas de humedales. Las especies de árboles más comunes son el Tabebuia y el Cedrela fissilis.
Muchas de las especies animales que viven aquí están en peligro de extinción, como el lobo de agua (Lontra longicaudis) y el cerdo del monte (Tayassu tajacu). También se ven felinos como el Felis que se desplazan por la zona. De todas las especies registradas en el área del embalse de Itaipú, el 61.4% se encuentran en la zona del río Carapâ.
En este refugio, profesionales y técnicos viven y trabajan para estudiar el ambiente, la fauna (mamíferos, aves, peces) y la flora, así como las condiciones del agua y el clima.
Mbaracayú: Recuperando la Naturaleza
Esta reserva fue creada en 1984 para ayudar a proteger el ambiente en la frontera entre Brasil y Paraguay. Se encuentra a 300 kilómetros al norte de Hernandarias y tiene 1356 hectáreas. Aquí hay valles con manantiales y arroyos, y zonas bajas con humedales.
Gran parte de esta área fue usada para la ganadería en el pasado, por lo que el 85% está cubierto de pastizales. El resto son humedales y pequeños bosques. Los suelos son arenosos y pueden erosionarse fácilmente.
En Mbaracayú viven animales como el mono (Cebus apella), el kuatí (Nasua nasua) y el zorro (Cerdocyon thous). En los humedales, se encuentran el carpincho (Hydrochoerus hydrochaeris) y el lobo de agua (Lutra). Es muy importante la presencia del ciervo de los pantanos (Blastocerus dichotomus), un animal en grave peligro de extinción, que se ve con frecuencia en esta área.
Se han identificado más de 250 especies de aves en este refugio, incluyendo algunas que son nuevos registros para Paraguay.
Reservas Biológicas: Grandes Espacios Protegidos
Las reservas biológicas Itabó y Limoy tienen suelos de color rojizo, buenos para la vegetación. El clima es subtropical, con lluvias abundantes y temperaturas medias de 21 a 22 °C.
Estas reservas tienen bosques altos y bajos. En los bosques altos, hay árboles como el lapacho y el cedro. En los estratos más bajos, se encuentran especies como el ñangapiry. También hay muchas bromeliáceas y helechos.
Se han clasificado 41 especies de mamíferos, 234 de aves y 20 de reptiles. Entre los mamíferos, destacan el taitetú (Tayassu tajacu), el guazú (Mazama americana) y el jaguareté (Felis). Entre las aves, se pueden ver el Cóndor Real (Sarcoramphus sp) y el guyrá campana (Procnias nudicollis). Los reptiles más comunes son la yarará (Bothrops), la mboi chiní (Crotalus) y el yacaré (Caiman latirostris).
Itabó: Un Río que Atraviesa la Reserva
Esta reserva está en Hernandarias, Departamento de Alto Paraná, Paraguay, a 80 kilómetros al norte de la ciudad. Tiene una superficie de 15 208 hectáreas y un terreno ondulado. El río Itabó la atraviesa con sus dos brazos, Itabó Sur e Itabó Norte.
Limoy: Santuarios de Vida Silvestre
La Reserva Biológica de Limoy se encuentra en Hernandarias, Departamento de Alto Paraná, Paraguay, a 160 kilómetros al norte de la ciudad, en el distrito de San Alberto. Fue creada en 1984 y tiene 14 828 hectáreas. Su nombre viene del río Limoy, que forma su límite sur. Los ríos Azul, Abanico y Santa Teresa, dentro de la reserva, crean lugares especiales para la vida silvestre.
Reserva Natural Yvyty Rokái: Tesoros Antiguos
Esta reserva está en el distrito de Mbaracayú, entre las reservas de Itabó y Limoy, en el departamento de Alto Paraná. Tiene una superficie de 3809 hectáreas, de las cuales 2202 son áreas secas y 1607 están inundadas.
En 2012, se encontraron aquí piezas de alfarería y cerámica que podrían tener más de 1000 años de antigüedad y pertenecer a la cultura tupí guaraní.
Zonificación: Cómo se Organizan las Áreas Protegidas
Para manejar estas áreas protegidas de la mejor manera, se dividen en diferentes zonas:
- Zonas de uso especial: Son áreas pequeñas para la administración, oficinas y alojamiento del personal.
- Zonas de uso extensivo: Lugares donde los visitantes pueden aprender y disfrutar, como senderos para caminar.
- Zonas de uso intensivo: Áreas con paisajes hermosos donde se pueden hacer actividades recreativas con más gente, como campamentos y miradores.
- Zonas de Recuperación y Amortiguación: Áreas que necesitan ser restauradas, a menudo cerca de las comunidades.
- Zona de Núcleo: Son las áreas más naturales, con la menor intervención humana.
Turismo y Educación Ambiental
Las reservas y refugios tienen miradores panorámicos desde donde se puede ver gran parte del bosque y el enorme lago. Desde aquí, también se pueden observar las impresionantes obras de la represa de Itaipú.
Se realizan muchas actividades educativas y recreativas, ofreciendo oportunidades para la educación ambiental a personas de todas las edades. Otra actividad importante es la recuperación de la flora, plantando árboles y enriqueciendo los bosques.
Constantemente se llevan a cabo investigaciones científicas sobre la fauna y flora locales, y cómo interactúan todos los elementos del ecosistema.
Para los visitantes, se ofrecen servicios como guías, charlas sobre educación ambiental, safaris fotográficos, áreas de recreación y alojamiento.