robot de la enciclopedia para niños

Osteoporosis para niños

Enciclopedia para niños
Datos para niños
Osteoporosis
OsteoCutout.png
Mujer mayor que sufre de osteoporosis.
Especialidad endocrinología

La osteoporosis es una enfermedad esquelética caracterizada por un adelgazamiento del hueso (pérdida de masa ósea), acompañada de un deterioro de la microarquitectura del tejido óseo que compromete su resistencia, produciendo una mayor fragilidad de los huesos y un aumento del riesgo de fracturas. Los huesos más comprometidos son, especialmente, los de la columna vertebral y la cadera, aunque cualquier hueso puede verse afectado. Como principal factor de riesgo para sufrir fracturas por fragilidad ósea, lo cual aumenta con la edad, es un problema importante de salud pública que tiene repercusiones sociales, sanitarias y económicas indudables; pero sobre todo provoca dolor, limitación funcional y alteración severa en la calidad de vida de las personas.

La OMS la define en mujeres como una densidad mineral ósea (DMO) menor o igual de 2,5 desviaciones estándar por debajo de la masa ósea promedio de personas sanas de 20 años. La DMO se mide mediante una prueba médica que se llama densitometría ósea.

Dado que la pérdida ósea ocurre sin síntomas, la osteoporosis a menudo se considera una "enfermedad silenciosa" que puede presentarse en mujeres y varones y que aumenta con la edad. A medida que se deteriora el tejido óseo y se produce una alteración de la arquitectura ósea, el hueso se debilita tanto que un golpe o caída relativamente menor provocan una fractura o la rotura de una vértebra. Es decir, las manifestaciones clínicas de la osteoporosis aparecen como consecuencia de sus complicaciones: las fracturas. Sin embargo, existe el error extendido de considerar que la pérdida de masa ósea provoca dolores musculoesqueléticos. Las mujeres son más susceptibles de sufrir las consecuencias (fracturas) de esta enfermedad, debido a que ante la deficiencia de calcio en la alimentación, asociados a la deficiencia de vitamina D, durante el embarazo y la lactancia, el organismo acude a las reservas de calcio que hay en el hueso, lo cual es la causa de la pérdida gradual de masa ósea. Por eso su aparición es posterior y con más frecuencia en mujeres amenorreicas o posmenopáusicas, quienes además tienen una disminución de la producción de estrógenos por los ovarios y otras carencias hormonales que afectarían el metabolismo en el hueso.

Los factores que aumentan el riesgo de presentar osteoporosis son la deficiencia principalmente de calcio y vitamina D por malnutrición, la vida sedentaria o la falta de actividad física. Se han reportado otras causas secundarias como la enfermedad celíaca, la gammapatía monoclonal de significado incierto, la insuficiencia renal, la diabetes mellitus y la acidosis tubular renal.

La mejor estrategia para el tratamiento de la osteoporosis es la prevención. El hueso, o tejido óseo, es un tejido vivo muy dinámico a lo largo de toda la vida, que se forma (osificación), crece y se remodela (recambio óseo) constantemente. Para estos procesos (formación, crecimiento y remodelación), importantes para la integridad o fortaleza del hueso, intervienen actividades hormonales, ciertos nutrientes (calcio, fósforo, magnesio, vitamina D, vitamina K) y actividad física; por lo que se los reconoce como factores que juegan un papel importante en la prevención y el tratamiento de la osteoporosis. Hay que conseguir una buena DMO y mantenerla durante toda la vida. Para eso hay que lograr una formación óptima de los huesos en los más jóvenes y evitar después la pérdida de masa ósea en la edad adulta y la vejez. Para alcanzar estos objetivos, son necesarios:

  1. Una alimentación que provea los nutrientes imprescindibles para la formación, el crecimiento y mantenimiento de los huesos. Es importante garantizar el consumo de las necesidades o requerimientos mínimos diarios (Valores Diarios, VD, en paréntesis para adultos y niños mayores o iguales de 4 años) de calcio (1300 mg/día), fósforo (1250 mg/día), magnesio (420 mg/día) y vitamina D (20 mcg/día u 800 UI/día), por medio de la alimentación normal (consumir diariamente los alimentos que contienen estos nutrientes) o la suplementación.
  2. Ejercicio físico adecuado para cada edad.
  3. Actividad frecuente al aire libre, que asegure una exposición solar prudente para síntesis de vitamina D en la piel, pero evitando una sobre-exposición, por los riesgos que tiene sobre la salud de la piel.

Clasificación

Según su etiología

Atendiendo a las causas que la producen, la osteoporosis puede clasificarse en primaria o involutiva y secundaria.

Primaria o involutiva

Se trata del tipo más frecuente de osteoporosis. Este diagnóstico se establece cuando, tras evaluar al paciente, no se encuentra la causa que la provoca.

A su vez, la osteoporosis primaria puede categorizarse como juvenil, postmenopáusica, relacionada con la edad e idiopática.

Secundaria

Se diagnostica osteoporosis secundaria cuando la pérdida de masa ósea es causada por otra enfermedad o por el uso de fármacos en particular.

Las fracturas se dan con mayor frecuencia en los huesos de la cadera, las vértebras de la columna vertebral y los huesos de la muñeca. Las fracturas vertebrales pueden ocasionar pérdida de altura y deformidad de la caja torácica.

Según la pérdida de masa ósea

Dependiendo de los resultados que se obtengan en la densitometría ósea, puede realizarse la siguiente clasificación:

  • Normal. Cuando la densidad mineral ósea es superior a -1 desviación estándar en la escala T.
  • Osteopenia. Cuando la densidad mineral ósea se encuentra entre -1 y -2,5 desviaciones estándar en la escala T. La osteopenia no se incluye dentro de la osteoporosis y en general no precisa tratamiento con fármacos.
  • Osteoporosis. Si la densidad mineral ósea es inferior a -2,5 desviaciones estándar en la escala T.
  • Osteoporosis establecida. Cuando existe osteoporosis y ésta ha ocasionado una fractura.

La escala T hace referencia a la media de densidad ósea de la población sana del mismo sexo y 20 años de edad.

Epidemiología

La osteoporosis y sus complicaciones relacionadas son uno de los principales problemas de salud en todo el mundo. Se estima que la osteoporosis afecta a unos 200 millones de mujeres en todo el mundo y es una causa importante de morbilidad y mortalidad. El 54 % de las mujeres blancas posmenopáusicas son osteopénicas y el 30 % son osteoporóticas, y a la edad de 80 años, el 27 % de las mujeres son osteopénicas y el 70 % son osteoporóticas. Se informa que aproximadamente el 40 % de las mujeres blancas de EE. UU. Y el 13 % de los hombres blancos estadounidenses de 50 años experimental al menos una fractura por fragilidad en su vida. Se estima que 1 de cada 3 mujeres y 1 de cada 12 hombres de más de 50 años sufren de osteoporosis. Y es responsable de millones de fracturas anualmente, en muchas de las cuales se involucran las vértebras lumbares.

Etiología

Los huesos están sometidos a un remodelado continuo mediante procesos de formación y reabsorción, también sirven como reservorio de calcio del organismo. A partir de los 35 años se inicia la pérdida de masa ósea. Múltiples enfermedades o hábitos de vida sedentarios pueden incrementar la pérdida de hueso ocasionando osteoporosis a una edad más precoz.

Los tres principales mecanismos que provoca la osteoporosis son:

  • Falta de masa ósea suficiente durante el proceso de crecimiento.
  • Resorción (pérdida) excesiva de hueso mediada por los osteoclastos.
  • Formación inadecuada de hueso nuevo por los osteoblastos durante el proceso continuo de renovación ósea.

Las mujeres, especialmente las caucásicas y asiáticas, tienen una menor masa ósea que los hombres. La pérdida de hueso ocasiona una menor resistencia del mismo, lo que conduce fácilmente a fracturas de la muñeca, columna y cadera.

No obstante, hay un número considerable de causas de osteoporosis a cualquier edad que no suelen ser reconocidas ni valoradas, pero que se pueden identificar si se somete al paciente a una evaluación apropiada. Entre ellas, las más comunes son la enfermedad celíaca sin reconocer ni diagnosticar, debido a que cursa frecuentemente sin síntomas digestivos o asintomática y con pruebas analíticas de anticuerpos negativas; la sensibilidad al gluten no celíaca sin tratamiento; la gammapatía monoclonal de significado incierto; la insuficiencia renal; la diabetes mellitus; y la acidosis tubular renal. En las personas con enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten no celíaca sin diagnosticar ni tratar con la dieta sin gluten, las causas tanto de la osteoporosis como de la osteopenia no se limitan a posibles carencias nutricionales, sino que pueden ser debidas a procesos inflamatorios o autoinmunes, en los que el consumo de gluten provoca el desarrollo de autoanticuerpos que atacan a los huesos.

Cuadro clínico

La osteoporosis no provoca síntomas. Por este motivo se la ha denominado la “epidemia silenciosa”.

No obstante, está extendido el error de considerar que la pérdida de masa ósea provoca dolores musculoesqueléticos; con frecuencia, los pacientes son derivados al especialista por este motivo con la sospecha de osteoporosis, especialmente mujeres premenopáusicas o en los primeros años de la menopausia.

Las principales manifestaciones clínicas de la osteoporosis se deben a sus complicaciones: las fracturas, que se producen principalmente en columna vertebral, muñeca y cadera. Son causadas por un traumatismo menor, como una simple caída. Por ello se denominan fracturas por fragilidad. Suelen clasificarse de modo general como vertebrales y no vertebrales. Producen los mismos síntomas que el resto de fracturas en la misma localización: se acompañan de dolor, impotencia funcional y deformidad.

Diagnóstico

Archivo:DXA femoral neck with osteoporosis
Densitometría ósea mostrando una osteoporosis de cuello de fémur en una mujer de 70 años.

La osteoporosis se diagnostica mediante una prueba denominada densitometría ósea, que mide la cantidad de masa ósea del esqueleto.

Tratamiento

El primer paso antes de recomendar un tratamiento es evaluar al paciente para determinar si se trata de una osteoporosis primaria o secundaria, con el fin de detectar las enfermedades que la provocan, algunas de las cuales suelen pasar desapercibidas. Si se trata de manera adecuada la enfermedad causante y la baja densidad ósea para la edad persiste, el tratamiento dependerá de la dinámica de los huesos.

Las pautas generales se basan en recomendar una cantidad adecuada de calcio en la dieta, la práctica de ejercicio físico y el empleo de medicamentos que contribuyan al mantenimiento o aumento de la masa ósea.

Dieta, suplementos de calcio y vitamina D

El calcio es necesario para hacer posible el crecimiento óseo, la reparación ósea y mantener la fortaleza del hueso y es un aspecto del tratamiento de la osteoporosis. Las recomendaciones de ingesta de calcio varían dependiendo del país y de la edad.

Ejercicio físico

Múltiples estudios confirman que mantenerse en el peso ideal y realizar periódicamente ejercicio físico aeróbico o ejercicios de resistencia, pueden mantener o incrementar la densidad ósea (DO).

Pronóstico

Fracturas de cadera por 1000 pacientes-años
Categoría OMS 50-64 años > 64 años Total
Normal 5,3 9,4 6,6
Osteopenia 11,4 19,6 15,7
Osteoporosis 22,4 46,6 40,6

Los pacientes con osteoporosis tienen una tasa de mortalidad aumentada debido a la mayor probabilidad de que se produzcan fracturas.

Las fracturas osteoporóticas se asocian pues, en general, con una disminución de la calidad de vida.

Véase también

Kids robot.svg En inglés: Osteoporosis Facts for Kids

kids search engine
Osteoporosis para Niños. Enciclopedia Kiddle.