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Arqueología procesual para niños

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La arqueología procesual, también conocida como Nueva Arqueología, es una forma de estudiar el pasado que surgió en países de habla inglesa, como Estados Unidos y Gran Bretaña. Nació con la idea de hacer que la arqueología fuera más científica, inspirándose en otras ciencias como la antropología.

En 1958, los arqueólogos Gordon Willey y Philip Phillips publicaron un libro clave. En él, decían que la arqueología en América debía ser parte de la antropología o no sería nada. Esto significaba que, para ellos, el objetivo de la arqueología era entender las culturas humanas, igual que la antropología.

El verdadero impulso de esta corriente llegó unos diez años después, gracias a Lewis Binford de Estados Unidos y David L. Clarke de Gran Bretaña. También es importante mencionar a Sally Binford, quien fue esposa de Lewis Binford en los años 60 y es vista por algunos como una cofundadora de la Nueva Arqueología. Aunque la arqueología procesual se desarrolló principalmente en Estados Unidos en los años 60 y 70, tuvo una gran influencia en todo el mundo.

¿Por qué la Nueva Arqueología fue diferente en Europa?

El arqueólogo Matthew Johnson explica por qué la Nueva Arqueología tuvo menos seguidores en Europa.

Diferencias en la enseñanza

En las universidades de Estados Unidos, la arqueología a menudo se enseña junto con la antropología cultural. Allí, se valora mucho la teoría y cómo se llega al conocimiento. En cambio, en Europa, los arqueólogos suelen ser prehistoriadores que trabajan en departamentos de Historia. Muchos europeos ven la Historia y la Prehistoria como un proceso continuo, no como algo separado. Por eso, su forma de ver la arqueología es más histórica.

Conexión con el pasado

Los arqueólogos en Estados Unidos, muchos de ellos descendientes de europeos, suelen estudiar sitios arqueológicos de pueblos que no son los suyos. Por ejemplo, en el Museo de Historia Americana se cuenta la historia de los colonos, y en el Museo de Historia Natural se muestra la historia de los pueblos nativos americanos.

En Europa, la situación es diferente. El legado arqueológico es parte de su propio pasado. A menudo, se usa para destacar características locales o nacionales. Por ejemplo, un italiano ve el mausoleo de Teodorico como parte de su identidad, aunque lo construyeran pueblos que invadieron el Imperio Romano.

Tipos de hallazgos

Muchos métodos de la Nueva Arqueología funcionan bien en lugares como Arizona, donde es posible conectar restos antiguos con pueblos indígenas actuales. Sin embargo, estos métodos son más difíciles de aplicar en lugares como Salamanca, España, donde hay muchos hallazgos de diferentes épocas mezclados en el subsuelo.

Aun así, la Nueva Arqueología ha tenido cierta influencia en Europa, especialmente en sitios muy antiguos. Es más común encontrar seguidores de esta corriente en excavaciones del Paleolítico (como en Atapuerca) que en sitios romanos (como Itálica), donde el enfoque suele ser más histórico-artístico.

Desafíos de la Nueva Arqueología

A partir de los años 60 y principios de los 70, la Nueva Arqueología enfrentó el desafío de no tener una idea clara y única sobre su propósito. Algunos pensaban que al querer incluir la arqueología dentro de la antropología y las ciencias naturales, se limitaba su desarrollo. David Clarke, por ejemplo, se basó en ideas de la estadística, la geografía y las ciencias de la información.

Ian Hodder, otro arqueólogo, sugirió que la cultura material (los objetos que encontramos) tiene un significado importante. También creía que las personas individuales debían ser parte de las teorías sobre la cultura material y el cambio social. Para él, la arqueología está muy ligada a la historia.

Significado de los objetos y su contexto

Los cambios culturales afectan cómo se relacionan los objetos antiguos con el comportamiento de las personas que los hicieron. Michael B. Schiffer llamó a esto "transformaciones-c", mostrando la importancia de cómo la cultura cambia los objetos.

Cuando un sitio arqueológico fue ocupado por mucho tiempo, la forma en que se organizaban y movían los desechos (basura) también cambiaba. Los objetos que encontramos no son un reflejo directo de cómo se comportaban las personas, sino una transformación de ese comportamiento.

Se observó que la similitud entre objetos aumentaba cuando había más interacción entre diferentes grupos de personas. Sin embargo, en las fronteras entre grupos étnicos en Baringo, se vio que a mayor interacción, menor era la similitud en el estilo de los objetos. Esto llevó a la idea de que, a mayor competencia entre grupos, más se marcaban las diferencias en los objetos culturales.

Lewis R. Binford propuso que la complejidad de las ceremonias funerarias se relaciona con la complejidad de la organización social. Esto sugería que los objetos encontrados en los enterramientos reflejaban la sociedad. Sin embargo, Parker Pearson demostró que estas ideas no siempre consideraban cómo la cultura podía cambiar la relación entre los enterramientos y las personas. Por ejemplo, una sociedad con diferentes niveles sociales podría decidir enterrar a todos sus muertos de la misma manera.

El estatus social en las primeras etapas de una sociedad organizada pudo haberse exagerado en la muerte. En etapas posteriores, la forma de los enterramientos pudo haber ocultado las diferencias sociales.

En general, las ideas sobre las prácticas funerarias no siempre eran convincentes, y la cultura material se veía como un reflejo indirecto de la sociedad. Fue entonces cuando se empezó a pensar más en las ideas, creencias y significados que las personas daban a los objetos. Los enterramientos, como otras costumbres, reflejan las actitudes de una sociedad.

Características de la arqueología procesual

Archivo:Navajo sandpainting
Pintura de arena navajo.

La arqueología procesual busca reconstruir los "procesos culturales" del ser humano. Para lograrlo, usa el método científico de forma muy estricta y se apoya en ciencias auxiliares. A veces, se les criticaba por usar demasiada tecnología y por un lenguaje complicado.

Los arqueólogos procesuales tuvieron que empezar casi de cero para establecer pautas científicas. Se inspiraron en ideas filosóficas como el Positivismo lógico de Carl Hempel y la Filosofía analítica. También adoptaron muchas técnicas de la Antropología Cultural para entender cómo vivían las personas en el pasado. Según Lewis Binford, comparar culturas antiguas con pueblos actuales es esencial para entender los hallazgos arqueológicos.

Los arqueólogos procesuales creen que toda investigación debe empezar con una idea clara que guíe el estudio. A partir de ahí, se aplica el método científico: se propone una hipótesis, se busca información para probarla o refutarla.

Una crítica a esta forma de trabajar es que en una excavación arqueológica no se puede partir de una sola idea preconcebida. Cuando se excava, hay que estar preparado para encontrar cualquier cosa, no solo lo que se busca inicialmente. En lugar de solo probar hipótesis, también se hacen comparaciones con grupos humanos actuales o pasados para encontrar similitudes. Si se confirman, se puede decir que el fenómeno es más general. Siguiendo a Hempel, el objetivo era una comprensión científica general de la cultura, buscando leyes del comportamiento humano que, aunque no fueran rígidas, fueran probables.

A pesar de esto, los procesualistas a veces no se preocupaban tanto por la verificación de sus hipótesis. Querían que sus ideas tuvieran un significado claro, pero no siempre se sentían obligados a probarlas con hechos. Si la prueba se hacía, mejor, pero no era un paso obligatorio.

Lewis Binford combinó estas ideas con la Teoría del Nivel Medio, que ya había sido propuesta por el sociólogo Robert K. Merton. Esta teoría ayuda a estudiar fenómenos sociales cuando hay pocos datos.

Aplicadas a la arqueología, estas ideas parecían muy prometedoras. Permitirían dar funciones específicas a los objetos, estructuras y costumbres humanas. Se podían ver como leyes científicas sobre la cultura material. Y como los aspectos materiales son importantes para las estructuras sociales, se podrían entender hechos no observables a través de otros que sí lo son, y así reconstruir los procesos sociales del pasado. La Teoría del Nivel Medio permite aceptar hipótesis que, de otro modo, serían imposibles de probar por la falta de datos prehistóricos. Sin embargo, parte de la idea de que hay una conexión fuerte e invisible entre los objetos materiales y el resto de la cultura. Lewis Binford usó esta teoría para comparar sus observaciones de los esquimales Nunamiut en Alaska con los restos arqueológicos del Musteriense en Francia. Él asumía que había una conexión entre sociedades "equivalentes" o similares, sin importar el tiempo o el lugar. A pesar de lo prometedor, los resultados no siempre igualaban lo que otros arqueólogos europeos estaban logrando. Las teorías de Binford eran brillantes, pero a veces carecían de resultados prácticos sólidos.

Otras características de la arqueología procesual son:

  • Rechazo del Difusionismo: No creían que los descubrimientos o cambios culturales se extendieran desde un solo lugar. En cambio, defendían el Evolucionismo, es decir, que muchas innovaciones surgieron de forma independiente en varios lugares del mundo sin que hubiera contacto entre ellos. La explicación es cultural: la cultura material es clave para el comportamiento humano, y este evoluciona influido por el ambiente. Lewis Binford dijo: "la cultura es una forma extrasomática de adaptación al medio de los seres humanos". Esto significa que la necesidad o el estímulo del ambiente provoca los cambios culturales. Por eso, se ven fenómenos similares en diferentes lugares del mundo con condiciones ambientales parecidas.
  • Enfoque en procesos: Dejaban a un lado los aspectos de fechas y capas de tierra (cronología y estratigrafía) para enfocarse en una visión "sincrónica" de los problemas, es decir, estudiar las cosas en un momento dado. Esto no significa que ignoraran los cambios a lo largo del tiempo, pero se centraban en los procesos esenciales, no en los detalles anecdóticos. Estos procesos permiten entender el verdadero nivel de una cultura, compararla con otras y observar los cambios importantes a largo plazo. Así, un proceso se enfoca en la esencia, permite hacer generalizaciones y ve las culturas como "modelos de sistemas".
Archivo:Sistema ambiental (Clarke)
Sistema ambiental según Clarke.

Los arqueólogos procesuales confiaban mucho en los modelos matemáticos y en la teoría de sistemas. De hecho, Clarke dedicó capítulos de su libro a adaptar esta teoría, a veces de forma tan detallada que sus colegas la encontraban confusa. Por ejemplo, Clarke definió la cultura humana como un sistema de subsistemas:

  • El subsistema social (cómo se organiza la sociedad)
  • El subsistema religioso (creencias)
  • El subsistema psicológico (la mente)
  • El subsistema económico (cómo se obtienen los recursos)
  • El subsistema de cultura material (tecnología y herramientas)

Este "Sistema cultural humano" no está aislado; es afectado por otras culturas y, sobre todo, por el ambiente natural, con el que busca un equilibrio.

Binford, por su parte, dividió los sistemas culturales en solo tres subsistemas: el tecnológico, el sociológico y el ideológico. Estos ayudan a un grupo a adaptarse a su entorno y a organizarse. Binford propuso una idea audaz: aunque solo tengamos los objetos materiales de un sitio, es posible reconstruir todos los subsistemas. Esto se debe a que los objetos pueden tener diferentes funciones relacionadas con estos subsistemas:

  • Tecnómicos: Objetos puramente funcionales, como herramientas (ejemplo: hachas).
  • Sociotécnicos: Objetos que muestran prestigio o tienen una función comunitaria (ejemplo: corazas).
  • Ideotécnicos: Objetos ceremoniales, relacionados con creencias y la mente (ejemplo: el Cono de Avanton).
La cultura material de la Edad del Bronce ejemplificando las teorías de Binford

Si un arqueólogo puede identificar el papel de cada objeto, podrá reconstruir todos los subsistemas. Esta reconstrucción es una suposición que se basa en datos de la antropología y necesita ser verificada científicamente.

Además de la teoría de sistemas, la arqueología procesual usó otras teorías como la teoría de los juegos, la teoría de la información y la estadística. La informática también fue muy importante; la arqueología procesual fue pionera en el uso de computadoras para el estudio de la prehistoria.

Figuras importantes de la arqueología procesual

Las dos figuras principales son Lewis Binford y David L. Clarke. Pero hay otros arqueólogos que lograron avances importantes:

  • Lewis Roberts Binford (1930-2011): Arqueólogo estadounidense, más conocido por sus ideas teóricas que por su trabajo práctico. Fue maestro de muchos seguidores de esta escuela. Sus principales aportaciones fueron una estrategia para aplicar el método científico a la arqueología, la comparación con culturas actuales (traducibilidad) a través de la Teoría del Nivel Medio, la importancia del ambiente natural y una visión atemporal de los problemas. Binford era conocido por ser muy firme en sus ideas y por sus debates con otros arqueólogos.
  • Kent Flannery: Científico estadounidense y alumno de Binford, aunque luego se separaron. Se dedicó a aplicar la teoría de sistemas para resolver problemas en la arqueología, especialmente en Mesoamérica y la Polinesia. Se considera que sus objetivos eran muy ambiciosos y no siempre se cumplieron.
  • David Leonard Clarke (1937–1976): Arqueólogo británico que llevó la arqueología procesual a Europa. Su libro Arqueología Analítica tuvo un gran impacto y fue clave para renovar la arqueología europea. Fue un profesor muy respetado en la Universidad de Cambridge. Demostró la utilidad de la teoría de sistemas, los modelos matemáticos y la influencia de la ecología y la geografía en la evolución de las sociedades. A pesar de su lenguaje avanzado, nadie hizo más que él por difundir la arqueología procesual en Europa.
  • Colin Renfrew (1937-2024): Profesor de Arqueología en la Universidad de Cambridge y director del Instituto McDonald para la investigación arqueológica. A diferencia de Clarke, Renfrew fue un gran divulgador, explicando las ideas de la Nueva Arqueología británica de forma más sencilla. Él propuso cambiar el nombre a "Arqueología Procesual" en 1993, lo que le dio un nuevo impulso a esta corriente. Renfrew es un entusiasta de los modelos matemáticos y se enfoca en los procesos sociales y su relación con el ambiente natural. Su trabajo más conocido demostró que el megalitismo (grandes construcciones de piedra) no se extendió desde un solo lugar, sino que se inventó en varios sitios del Mediterráneo y Europa occidental casi al mismo tiempo. También aplicó con éxito la teoría de sistemas a la Edad del Bronce en las islas británicas y las civilizaciones del Egeo.
  • Stephen Shennan: Profesor de arqueología en la Universidad College de Londres. Fue pionero en usar análisis estadísticos complejos, modelos matemáticos y computadoras en la arqueología.
  • Clive Gamble: Profesor en la Universidad de Southampton. Es una autoridad en el desarrollo teórico de la arqueología y su aplicación al Paleolítico europeo, aunque también tiene experiencia en Australia y trabaja en Inglaterra y Grecia.

Véase también

Kids robot.svg En inglés: Processual Archaeology Facts for Kids

  • Historia y teoría de la Arqueología
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