Monumento a Felipe IV para niños
Datos para niños Monumento a Felipe IV |
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![]() Lado oriental
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Tipo | Escultura y fuente | |
Localización | Madrid (España) | |
Coordenadas | 40°25′07″N 3°42′44″O / 40.418537815615, -3.7122401461787 | |
Construcción | 1640 | |
Inauguración | 17 de noviembre de 1843 | |
Autor | Pietro Tacca, Francisco Bellver y Collazos, Francisco Elías Vallejo, Rodolfo García-Pablos, Fernando Gutiérrez, Jaime Lois, Manuel Muñoz Monasterio, Juan de Ribera Piferrer, Ferdinando Tacca, Juan Merlo Fransoy y José Tomás | |
El monumento a Felipe IV, también conocido como fuente de Felipe IV, es un impresionante conjunto de esculturas y fuentes. Se encuentra en el centro de la plaza de Oriente en Madrid, España. Esta plaza es muy importante por su historia y arte.
La reina Isabel II ordenó construir este monumento en la primera mitad del siglo XIX. Sin embargo, la parte más importante, la estatua del rey Felipe IV a caballo, es mucho más antigua, del siglo XVII.
El escultor Pietro Tacca hizo la estatua en Italia. Para crearla, usó un diseño del famoso pintor Diego Velázquez. Además, el científico Galileo Galilei dio consejos para que la estatua se mantuviera de pie sin caerse. El escultor Juan Martínez Montañés también ayudó, haciendo un busto del rey que se envió a Florencia como modelo.
Esta estatua es una obra maestra de la escultura ecuestre (estatuas de personas a caballo). Es especial porque fue la primera en mostrar al caballo "en corveta". Esto significa que el caballo está levantando sus patas delanteras y se apoya solo en las traseras y un poco en su cola. El monumento también tiene un pedestal decorado con más esculturas y dos fuentes.
El monumento se inauguró oficialmente el 17 de noviembre de 1843. Un año después, Narciso Pascual y Colomer diseñó la forma final de la plaza de Oriente.
Contenido
La estatua de Felipe IV a caballo
¿Cómo se creó la estatua ecuestre de Felipe IV?

La idea de la estatua de Felipe IV vino del propio rey. Él quería una escultura a caballo que fuera aún mejor que la de su padre, el rey Felipe III, que está en la Plaza Mayor de Madrid.
Felipe IV deseaba que su estatua fuera más impresionante y original. Su consejero, el Conde Duque de Olivares, entendió su deseo. Por eso, encargó que el rey fuera representado sobre un caballo que se levantara en "corveta". Esta pose era muy difícil de lograr en una escultura y nunca se había hecho antes.
El trabajo se encargó al escultor italiano Pietro Tacca. Le enviaron desde Madrid dos dibujos de Velázquez: uno del rey a caballo y otro de medio cuerpo. Tacca trabajó en la escultura durante seis años, desde 1634 hasta 1640. Dos años después, la estatua de bronce fue llevada a Madrid desde Florencia.
Se dice que el famoso científico Galileo Galilei (1564-1642) ayudó a Tacca con la física y las matemáticas. Galileo sugirió que, para que el caballo se mantuviera solo sobre dos patas, la parte trasera de la escultura debía ser sólida y la delantera, hueca. Esta idea fue muy innovadora y cambió la forma de hacer estatuas a caballo durante los siglos XVII y XVIII.
Otro artista que participó fue el escultor Juan Martínez Montañés. Velázquez le pidió que modelara una cabeza del rey. Así, Tacca tendría una referencia en relieve de los rasgos de Felipe IV. Un retrato de Velázquez muestra a Martínez Montañés trabajando en esta cabeza.
Cuando Tacca envió el primer modelo de la estatua a España, al rey no le gustó la cabeza porque no se parecía a él. Finalmente, la cabeza fue hecha por Ferdinando Tacca, el hijo del escultor italiano.
¿Dónde ha estado la estatua de Felipe IV?

Hoy, la estatua mira hacia el este, hacia el Teatro Real, que es uno de los edificios importantes de la Plaza de Oriente.
Al principio, la estatua estuvo en el Jardín de la Reina, en el antiguo Palacio del Buen Retiro. Allí la llamaban "el caballo de bronce". Después, la movieron a la parte superior del Real Alcázar de Madrid, un edificio que se quemó en 1734.
Más tarde, en 1677, la estatua fue bajada del Alcázar y regresó a su lugar original en el Palacio del Buen Retiro. El "caballo de bronce" se quedó allí hasta 1843. En ese año, fue trasladado a su ubicación actual, en el centro de la plaza de Oriente, mientras se construía esta plaza.
El pedestal y las fuentes del monumento

La estatua de Felipe IV se alza sobre una base grande y decorada. Esta base tiene un pedestal alto y una plataforma con varias esculturas y dos fuentes. Los escultores de la corte Francisco Elías Vallejo y José Tomás terminaron esta parte en 1843.
El pedestal es rectangular y alto. En sus lados norte y sur, tiene dos bajorrelieves hechos por Tomás. Uno muestra al rey dando a Velázquez la insignia de la Orden de Santiago. El otro es una representación de cómo el rey apoyaba las artes y las letras.
En los lados este y oeste del pedestal, hay dos placas con inscripciones que recuerdan la inauguración del monumento, impulsada por la reina Isabel II.
La base, hecha de piedra de granito, está protegida por cuatro leones de bronce. Estos leones están en cada esquina, en posición de descanso. Fueron fundidos por Elías Vallejo.
En el lado este de la base, frente al Teatro Real, hay una escultura de un anciano, también hecha por Elías Vallejo. Esta figura representa al río Jarama. Debajo de ella, hay una fuente con dos pilas en forma de concha que recogen el agua en un estanque semicircular.
Lo mismo ocurre en el lado oeste del monumento, frente al Palacio Real. Allí, la figura de un anciano representa al río Manzanares. Este anciano se apoya en una vasija de la que sale un chorro de agua, que cae en las conchas y luego en el estanque.