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Eosinófilo para niños

Enciclopedia para niños
Datos para niños
Eosinófilo leucocito tipo granulocito AVB3

Recreación artística de un eosinófilo. Obsérvese los gránulos citoplásmicos típicos de este tipo de granulocito.
Blausen 0352 Eosinophil.png
Representación 3D de un eosinófilo.
Nombre y clasificación
Latín Granulocytus acidophilus; Eosinophilus
TH H2.00.04.1.02017
TH H2.00.04.1.02017
Información anatómica
Sistema Inmune

Un eosinófilo es un tipo de glóbulo blanco (también llamado leucocito) que forma parte de nuestro sistema inmune. Se produce en la médula ósea, que es el centro de los huesos.

Estos glóbulos blancos viven poco tiempo en la sangre, entre 6 y 12 horas. Después, se mueven hacia los tejidos del cuerpo, donde pueden permanecer varios días.

Su desarrollo en la médula ósea es impulsado por ciertas proteínas llamadas interleucinas, como la IL-5 y la IL-3. Los eosinófilos representan una pequeña parte, entre el 1% y el 3%, del total de glóbulos blancos.

Son fáciles de reconocer por su núcleo con dos partes y por sus gránulos especiales en el citoplasma. Estas pequeñas "bolsitas" dentro del eosinófilo contienen proteínas que ayudan a combatir parásitos y participan en las reacciones alérgicas. Una de las sustancias importantes que tienen es la histaminasa, que ayuda a controlar las respuestas alérgicas.

¿Qué son los Eosinófilos?

Estas células fueron descubiertas por primera vez por un científico llamado Paul Ehrlich en 1879. Él les dio el nombre de eosinófilos porque notó que se teñían de un color rosa intenso con un colorante especial llamado eosina.

¿Cómo se ven los Eosinófilos?

Los eosinófilos son un tipo de leucocito con un núcleo que tiene formas variadas.

Si los miramos con un microscopio muy potente, vemos que su núcleo tiene dos partes unidas. También tienen muchos gránulos específicos que se tiñen de rojo. Estos gránulos son los que les dan su color característico cuando se observan en muestras de sangre.

Se forman a partir de células más jóvenes en la médula ósea y tardan unos cuatro días en madurar. Luego, pasan a la sangre y desde allí viajan a diferentes tejidos del cuerpo, como la piel y las mucosas. La maduración de los eosinófilos es controlada por sustancias como la IL-3, IL-5 y GM-CSF.

Normalmente, los eosinófilos son menos del 4% de los glóbulos blancos en la sangre. Esto se debe a que prefieren estar en los tejidos más que circulando. Son atraídos a los lugares donde se necesitan por sustancias químicas liberadas por otras células. En la sangre, su cantidad es de aproximadamente 150 células por microlitro.

Los eosinófilos pueden moverse como una ameba y tienen una capacidad limitada para "comer" o envolver partículas extrañas. Su tamaño es similar al de otro glóbulo blanco llamado neutrófilo, midiendo entre 10 y 12 micrómetros. Su citoplasma está lleno de unos 20 gránulos que se tiñen de naranja o marrón anaranjado.

Estos gránulos contienen cuatro tipos principales de proteínas: la proteína básica mayor (MBP), la proteína catiónica del eosinófilo (ECP), la peroxidasa del eosinófilo y la neurotoxina derivada del eosinófilo (EDN). Además, los eosinófilos pueden producir otras sustancias importantes, como mediadores lipídicos, citocinas (como IL-3, IL-5 y GM-CSF), y óxido nítrico.

¿Qué hacen los Eosinófilos en nuestro cuerpo?

Los eosinófilos se comunican con otras células gracias a unos "receptores" en su superficie. Son células que pueden "comer" o envolver partículas, y se sienten especialmente atraídas por combinaciones de antígenos y anticuerpos. También pueden ser atraídos por sustancias liberadas por otras células llamadas basófilos, como la histamina.

Los eosinófilos ayudan a controlar las reacciones alérgicas. Lo hacen neutralizando la histamina con una enzima llamada histaminasa. También pueden producir una sustancia que evita que otras células, como las células cebadas o los basófilos, liberen sustancias que causan reacciones alérgicas.

Los eosinófilos son importantes para defendernos de microorganismos que no pueden ser "comidos" fácilmente por otras células. Tienen una función que puede dañar a los invasores (gracias a sus proteínas granulares) y también regulan la respuesta inmune (liberando citocinas). Además, pueden participar en la reparación de los tejidos dañados.

Los eosinófilos son muy importantes en las alergias y en la defensa contra parásitos. Sus receptores para IgE (un tipo de anticuerpo) les permiten unirse a los parásitos que están cubiertos por esta inmunoglobulina. Así, pueden destruir las larvas de parásitos, como ocurre en enfermedades como la esquistosomiasis.

Galería de imágenes

Ver también

Véase también

Kids robot.svg En inglés: Eosinophil granulocyte Facts for Kids

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Eosinófilo para Niños. Enciclopedia Kiddle.