Dimorfismo sexual para niños

El dimorfismo sexual se refiere a las diferencias en el aspecto físico, como la forma, el color o el tamaño, que existen entre los machos y las hembras de una misma especie. Estas diferencias se pueden ver en la mayoría de las especies, aunque en distintos grados. A menudo, en la pubertad, la aparición de estas características es impulsada por la producción de hormonas, lo cual está determinado por la información genética de cada individuo.
En muchas especies de insectos, arañas, anfibios, reptiles y aves rapaces, las hembras suelen ser más grandes que los machos. Sin embargo, en los mamíferos, el macho suele ser el de mayor tamaño, a veces de forma muy notable. También puede ocurrir que individuos del mismo sexo tengan apariencias diferentes, lo que se llama polimorfismo sexual. Es importante saber que no todas las especies de animales muestran dimorfismo sexual. Por ejemplo, muchos reptiles tienen sus órganos reproductores internos y no muestran grandes diferencias externas entre machos y hembras.
Contenido
El ser humano: ¿Cómo nos diferenciamos?
Además de los órganos reproductores, una de las principales diferencias físicas entre hombres y mujeres es cómo se distribuye la grasa en el cuerpo. Esto se puede medir con el índice cintura/cadera, que cambia con la edad y el sexo:
- En la primera infancia, las diferencias físicas entre niños y niñas son muy pequeñas.
- Es en la pubertad cuando las diferencias se hacen mucho más claras. Esto se debe principalmente a la acción de las hormonas. Durante este tiempo, la grasa en las mujeres tiende a acumularse más en los muslos, las caderas y los glúteos.
- Estas diferencias entre hombres y mujeres se mantienen bastante estables en la etapa adulta hasta la llegada de la menopausia en las mujeres. En esta etapa, la distribución de la grasa en las mujeres cambia y se acumula más en la cintura. En los hombres, los cambios en la distribución de la grasa son más graduales a lo largo de la vida.
- Después de la menopausia, la distribución de la grasa en hombres y mujeres tiende a ser similar, acumulándose más en la cintura.
La relación entre la edad, el sexo y la forma del cuerpo depende de procesos biológicos y del entorno.
Características físicas que nos distinguen
En los seres humanos, las características físicas más visibles que aparecen en la pubertad son el desarrollo de los senos en las mujeres, y el vello facial y el crecimiento de la nuez de Adán en los varones. El rápido aumento de estatura y peso durante esta etapa se conoce popularmente como «estirón».
La adolescencia se considera que empieza con la aparición de estas características físicas (en la fase puberal) y termina cuando el crecimiento se detiene. Los cambios que llevan al desarrollo de estas características no ocurren todos al mismo tiempo, sino que siguen un orden progresivo.
Las principales características físicas que distinguen a hombres y mujeres incluyen:
- En el hombre
El aumento de una hormona llamada testosterona durante la pubertad provoca la aparición de las características masculinas. En los hombres, la testosterona aumenta directamente el tamaño y la fuerza de los músculos, las cuerdas vocales y los huesos. Esto hace que la voz se vuelva más grave y que la forma de la cara y el esqueleto cambien. También acelera el crecimiento del vello en la cara y el cuerpo, pero puede hacer que el cabello de la cabeza crezca más lento o se caiga con el tiempo. La mayor estatura se debe en gran parte a que la pubertad masculina suele ser un poco más tardía y el crecimiento óseo se detiene más lentamente. Las características masculinas incluyen:
- Musculatura más desarrollada y mayor masa muscular.
- Mayor estatura. Los hombres adultos son, en promedio, más altos que las mujeres adultas.
- Presencia de vello facial más grueso y largo en otras partes del cuerpo: brazos, piernas, pecho, abdomen, axilas y en otras partes del cuerpo.
- Vello facial, como barba y/o bigote.
- En promedio, los pies, manos y nariz son más grandes que en las mujeres.
- El tórax y los hombros se vuelven más anchos.
- Engrosamiento de la voz.
- Índice cintura/cadera menor que el de la mujer, en promedio.
- Cabeza ósea y esqueleto más pesados.
- Posible aparición de alopecia androgénica (pérdida de cabello) con la edad.
- En la mujer
En las mujeres, el desarrollo de los senos es una señal de niveles más altos de estrógeno. Esta hormona también ensancha la pelvis y aumenta la cantidad de grasa corporal en las caderas y otras partes del cuerpo. Las características femeninas incluyen:
- Senos desarrollados y pezones más grandes.
- En promedio, menor crecimiento de la estatura que en el varón.
- Mayor nivel de grasa debajo de la piel, especialmente en el rostro, glúteos y muslos.
- Caderas más anchas. Proporción cintura-cadera más baja que en los hombres adultos.
- Desarrollo de vello corporal en menor medida que en el varón, principalmente en las piernas y axilas.
- Voz más aguda.
Diferencias en el cerebro
El dimorfismo sexual cerebral se refiere a las diferencias entre el macho y la hembra de una misma especie en cuanto a su cerebro y cómo funciona. En los humanos, se sabe que el cerebro del hombre es más grande en volumen que el de la mujer, pero esta diferencia no significa que haya diferencias en la inteligencia.
Es difícil demostrar las diferencias en el funcionamiento del cerebro, ya que hay muchas variables complejas que considerar, especialmente la influencia de la cultura.
Se han encontrado diferencias en la estructura, la química y el funcionamiento del cerebro entre hombres y mujeres. Estas variaciones se han visto en todo el órgano, en áreas relacionadas con el lenguaje, la memoria, las emociones, la visión, la audición y la forma de orientarse en el espacio.
Estas diferencias podrían deberse a la acción de las hormonas en el feto durante el desarrollo. Esto se apoya en el hecho de que se han encontrado más receptores de hormonas en estas áreas del cerebro durante el crecimiento.
Una de las diferencias observadas es que las hembras toleran mejor el estrés prolongado que los machos, es decir, les causa menos daño cerebral en el hipocampo.
Actualmente, se investiga cómo estas diferencias de origen biológico se relacionan con las diferencias en la cognición (cómo pensamos) y el conducta de hombres y mujeres. Esto podría llevar a terapias diferentes para ciertas enfermedades neurológicas.
Dimorfismo sexual en el reino animal
Invertebrados

Entre los invertebrados (animales sin columna vertebral) encontramos muchos casos de dimorfismo sexual. En la mayoría de estas especies, las diferencias están en el tamaño (por ejemplo, la hembra de la tarántula del género Grammostola es mucho más grande que el macho). También pueden haber variaciones de color (como en algunas mariposas y polillas) o de apariencia (como en algunos cefalópodos). Los insectos, en particular, muestran una gran variedad de dimorfismos sexuales, incluyendo tamaño, adornos, coloración, producción de feromonas, capacidad de emitir luz (como las luciérnagas) o la ausencia de alas. En la abeja Osmia rufa, las hembras son más grandes y robustas que los machos, porque reciben más alimento cuando son larvas.
Además del dimorfismo sexual, algunas especies tienen diferencias entre los machos, lo que parece servir para que cumplan distintos roles. Esto se ve en la especie de abejas Macrotera portalis, donde hay machos con cabeza pequeña que pueden volar y machos con cabeza grande que no vuelan.
Anthidium manicatum también presenta dimorfismo entre los machos. Los machos más grandes son seleccionados porque son más agresivos en su territorio y tienen más éxito al reproducirse. También existen machos más pequeños. Lasioglossum hemichalceum es otro ejemplo de abeja con diferencias notables entre los machos de la especie.
Peces

En los peces, los machos de muchas especies tienen patrones de colores más brillantes y llamativos, y a veces partes externas que sobresalen. Un ejemplo claro es el pez luchador de Siam (Betta splendens), donde el macho tiene colores más vivos y aletas más grandes. Algo similar ocurre con los pecílidos, siendo el caso del guppy el más conocido.
Dinosaurios
Se ha sugerido que los terópodos machos (un grupo de dinosaurios carnívoros) podrían haber tenido un órgano retráctil similar al de los cocodrilos actuales. Se han estudiado esqueletos de cocodrilos para ver si hay diferencias en los huesos entre machos y hembras que pudieran ayudar a entender las diferencias físicas entre los tiranosaurios machos y hembras. Los estudios mostraron que los huesos de la cola de los cocodrilos machos, que sostienen los músculos de ese órgano, eran mucho más grandes que los de las hembras.
Aves

En las aves, el dimorfismo sexual en el tamaño puede deberse a la selección natural, la necesidad de las hembras de tener más crías, diferencias en el uso del hábitat entre sexos o el crecimiento desigual de las partes del cuerpo. En la clase aves, es muy común hablar de dimorfismo sexual refiriéndose principalmente al plumaje. Por ejemplo, en el diamante mandarín (Taeniopygia guttata), el gorrión común (Passer domesticus) o el cabecita negra (Carduelis magellanica), los machos suelen tener un plumaje más llamativo que el de las hembras.
A veces, el plumaje cambia según la estación: diferente para machos y hembras durante la época de reproducción, y similar en ambos sexos durante el invierno o la época no reproductiva. Esto es común en aves migratorias. En general, las especies de aves con un dimorfismo sexual muy marcado en el color también tienen grandes diferencias en su comportamiento. En cambio, las especies donde machos y hembras se parecen poco físicamente suelen compartir las tareas de construir el nido y cuidar a las crías. A veces, en muchas especies de aves, los machos son los únicos que cantan y muestran un comportamiento más agresivo. Por ejemplo, en los patos, los machos son más ruidosos, mientras que las hembras producen un sonido diferente.
Otras características que distinguen a los machos pueden ser la cresta en la cabeza y los espolones en las patas, como en los machos de la gallina doméstica (Gallus gallus).
Mamíferos
En el caso de los mamíferos, donde los órganos reproductores masculinos son visibles externamente, el dimorfismo sexual es muy claro. Sin embargo, en otras especies de mamíferos, el dimorfismo sexual muestra otras características distintivas. Un ejemplo claro es el del león, donde el macho es más grande y tiene una melena abundante de la que carece la hembra. O en las especies de ciervos, donde a menudo el macho presenta astas, ausentes en las hembras. Aunque el dimorfismo sexual está bien estudiado en animales adultos, hay pruebas recientes que muestran que también existe en crías recién nacidas, por ejemplo, en cerdos, donde las hembras tienen un mayor potencial para la regulación de su sistema de defensas local que los machos.
Comportamiento de cortejo


Las características físicas pueden dar ventaja a un individuo sobre sus rivales de dos maneras: pueden usarse para vencerlos en combate o para atraer a miembros del sexo opuesto. Un ejemplo de combate son los cuernos de los alces; el macho con la mejor cornamenta vencerá a sus rivales y así podrá acceder a las hembras del grupo. Un ejemplo de cortejo es el pavorreal, ya que el macho con la cola más impresionante atraerá a más hembras que un macho menos llamativo.
Véase también
En inglés: Sexual dimorphism Facts for Kids
- Cambios en el esqueleto humano debido al bipedismo
- Caracteres sexuales secundarios
- Dimorfismo sexual cerebral
- Sexado