Concilio de Coyanza para niños
El Concilio de Coyanza fue una reunión muy importante que se llevó a cabo a mediados del siglo XI en la villa de Valencia de Don Juan, en la actual Provincia de León, España. Su objetivo principal era hacer cambios y mejoras en la Iglesia Católica de ese tiempo.
Este concilio fue convocado por los reyes Fernando I y Sancha de León. Contó con la participación de varios obispos importantes de la época, como Froilán de Oviedo, Cipriano de León, Didaco de Astorga, Miro de Palencia, Gómez de Osma, Gómez de Calahorra, Juan de Pamplona, Pedro de Lugo, Cresconio de Iria (Santiago) y Sisnando de Viseo (en el actual Portugal).
Contenido
¿Cuándo se celebró el Concilio de Coyanza?
Existen dos versiones de los acuerdos que se tomaron en el Concilio de Coyanza: una de Portugal (Coímbra) y otra de Asturias (Oviedo). Durante mucho tiempo, hasta mediados del siglo XX, los historiadores solo usaban la versión asturiana. Esta versión, por un error en su escritura, indicaba que el concilio se había celebrado en el año 1050.
Sin embargo, en 1950, para conmemorar los novecientos años del evento, dos investigadores, Antonio Ubieto Arteta y Alfonso García-Gallo, hicieron estudios separados. Ambos llegaron a la misma conclusión: la fecha correcta del concilio fue el año 1055. Esto se confirmó al revisar la lista de obispos presentes y algunas referencias en la versión portuguesa de los acuerdos.
¿Qué cambios importantes se hicieron en el Concilio de Coyanza?
El Concilio de Coyanza estableció nuevas reglas religiosas y normas para la vida diaria de las personas en los reinos de ese tiempo.
Adopción del Rito Romano
Una de las reformas más destacadas fue la adopción del rito romano. Esto significó dejar de usar el rito visigótico, que se había practicado desde los primeros tiempos de los reyes de Asturias. Con este cambio, las diócesis de la región se pusieron bajo la autoridad del Papa.
La Regla de San Benito para los Monasterios
Otra reforma importante fue la obligación de que todos los monasterios siguieran la Regla de San Benito. Esta regla es un conjunto de normas para la vida en comunidad de los monjes. Los detalles de estas reformas se desarrollaron más tarde en otros concilios que se celebraron en Santiago de Compostela en los años 1060 y 1063.
¿Por qué se eligió Coyanza para el concilio?
No se sabe con certeza por qué se decidió celebrar un concilio tan importante en la villa de Coyanza, que en ese momento pertenecía a la Diócesis de Oviedo.
La explicación más aceptada por los historiadores es que la reina Sancha, quien era la esposa del rey Fernando I, tenía un vínculo especial con Coyanza. Ella era la señora de esta villa por herencia. Parece que Coyanza, que hoy se conoce como Valencia de Don Juan, era un lugar muy querido por la reina Sancha, donde le gustaba pasar largas temporadas.