Cálato para niños
El cálato (del griego kálathos) era una palabra usada en la Antigua Grecia para describir varias cosas. Podía ser un tipo de sombrero o tocado que llevaban en la cabeza algunas estatuas llamadas cariátides. Este tocado parecía una cesta alta, hecha de mimbre o juncos. También se usaba para nombrar un tipo de vasija o recipiente de cerámica, especialmente en la cerámica ibérica, que era muy común en la antigua Península Ibérica.
Contenido
Cálato: Un Objeto Antiguo con Muchos Usos
El cálato era un objeto muy versátil en la antigüedad. Se utilizaba de diferentes maneras, desde un adorno en la cabeza hasta un recipiente para guardar cosas. Su forma, similar a una cesta, lo hacía muy práctico.
El Cálato en la Mitología
En la mitología griega y romana, el cálato aparece en algunas historias. Por ejemplo, se dice que la diosa Proserpina (también conocida como Perséfone) llevaba un cálato en la cabeza. Este cálato era como una cesta que se usaba para recoger flores. Se cree que lo llevaba cuando fue llevada por Plutón, el dios del inframundo.
El cálato también estaba relacionado con la diosa Minerva (Atenea para los griegos). Ella era la diosa de la sabiduría y las artes. Se decía que el cálato estaba dedicado a ella porque era la inventora de muchas habilidades, como tejer y coser.
Usos Prácticos del Cálato
Además de su significado mitológico, el cálato tenía muchos usos en la vida diaria.
- Para guardar productos: Se usaba para almacenar y transportar alimentos. Por ejemplo, se guardaba miel, frutos secos o una salsa llamada garo.
- Para el comercio: Estos productos se vendían y se llevaban a diferentes lugares alrededor del Mar Mediterráneo.
- En ceremonias: Algunas decoraciones en los cálatos y el hecho de que se usaran como urnas para cenizas indican que también tenían un papel en ceremonias importantes.
- Para trabajar: Los trabajadores también los usaban para poner la lana mientras tejían o hacían otras labores.
Plinio el Viejo, un escritor romano, comparó la forma del cálato con la flor de la azucena. También los comparó con las cestas que llevaban en la cabeza las canéforas. Las canéforas eran jóvenes que participaban en fiestas religiosas y llevaban objetos sagrados en estas cestas.
Cálatos en la Península Ibérica
El cálato también fue muy importante en la Península Ibérica durante la época de los íberos.
Los cálatos más antiguos encontrados en la Península Ibérica son del siglo V a. C.. Tenían un cuello un poco más delgado. A partir del siglo III a. C., se empezó a fabricar un tipo de cálato que parecía un "sombrero de copa". Este diseño siguió usándose incluso durante la época romana.
Se cree que este tipo de cálato llegó a la Península Ibérica desde Italia. Desde la zona de Cataluña, se extendió a otras partes de la península, siguiendo el valle del Ebro.
¿Dónde se Encontraron Cálatos Iberos?
Se han encontrado muchos cálatos en diferentes lugares. Por ejemplo, en yacimientos cercanos a los ríos Perejiles y Aguasvivas, en un lugar llamado Azaila. También se han hallado en el poblado conocido como Los Castellares, cerca de Herrera de los Navarros. Estos hallazgos nos ayudan a entender cómo vivían y comerciaban los íberos.
Véase también
En inglés: Calathus (basket) Facts for Kids