Biblioteca para niños
Una biblioteca es un lugar especial donde se guardan y organizan libros, revistas, películas, música y otros materiales. Su propósito es que las personas puedan usarlos para aprender, investigar o divertirse. Las bibliotecas no solo son colecciones de documentos, sino también instituciones que ayudan a los usuarios a encontrar lo que necesitan. Cada 24 de octubre se celebra el Día Internacional de la Biblioteca.
Contenido
¿De dónde viene la palabra "biblioteca"?
La palabra biblioteca viene del latín bibliothēca. Esta, a su vez, viene del griego βιβλιοθήκη (bibliothēke). Está formada por dos palabras griegas: βιβλίον ('biblíon', que significa 'libro') y θήκη ('théke', que significa 'armario' o 'caja'). Así que, al principio, una biblioteca era el lugar donde se guardaban los libros. En la antigüedad, los libros solían ser rollos de papiro.
¿Qué es una biblioteca hoy en día?
Hoy, una biblioteca es mucho más que un simple almacén de libros. Se puede entender de dos maneras principales:
- Es una colección organizada de libros, revistas, películas, música y otros documentos. Estos materiales están disponibles para que las personas los tomen prestados o los consulten.
- También es la institución o el lugar que se encarga de crear, mantener y actualizar estas colecciones. Su objetivo es ayudar a los usuarios a encontrar la información que necesitan para estudiar, investigar o pasar un buen rato. Para ello, cuentan con personal especializado.
Las bibliotecas tienen tres partes muy importantes: la colección (todos los materiales que tienen), la organización (cómo están ordenados para encontrarlos fácilmente) y el uso (que las personas puedan acceder a ellos). Además, el personal de la biblioteca es clave para que todo funcione bien.
La colección de una biblioteca ha cambiado mucho con el tiempo. Antes solo tenían libros manuscritos y luego impresos. Después se añadieron revistas, mapas, música, videos y microfichas. Hoy en día, gracias a internet, las bibliotecas también ofrecen acceso a documentos digitales que no tienen físicamente, pero que están disponibles en línea. Esto ha dado lugar a las bibliotecas digitales.
La organización se refiere a las técnicas que usan los bibliotecarios para clasificar y catalogar los documentos. Así, es más fácil encontrar lo que buscas. El uso es que los usuarios puedan encontrar el documento o la información que necesitan.
Los bibliotecarios son los profesionales que organizan todo el material y ayudan a los usuarios a encontrar información. Antes solo cuidaban los libros, pero ahora son expertos en organizar documentos en cualquier formato.
En 1931, un famoso bibliotecario de la India llamado Ranganathan creó cinco leyes que resumen el espíritu de las bibliotecas modernas:
- Los libros están para usarse.
- Cada lector debe encontrar su libro.
- Cada libro debe encontrar su lector.
- Hay que ahorrar tiempo al lector.
- La biblioteca es un organismo que siempre crece.
Un viaje por la historia de las bibliotecas
Las bibliotecas tienen una historia de más de cuatro mil años, que va de la mano con la historia de la escritura y el libro.
Las primeras bibliotecas en la Antigüedad

Al principio, las bibliotecas eran más parecidas a lo que hoy llamamos archivos. Nacieron en los templos de las ciudades de Mesopotamia. Allí, se guardaban registros de actividades religiosas, políticas y económicas en tablillas de barro con escritura cuneiforme. Estas tablillas eran pesadas, pero se han conservado muy bien. Algunas bibliotecas famosas de esa época fueron las de Mari, Lagash, Ebla y la del rey asirio Asurbanipal.
En el Antiguo Egipto, había "Casas de los Libros" para documentos administrativos y "Casas de la Vida" que eran centros de estudio para los escribas. Los textos se escribían en rollos de papiro.
En la antigua Grecia, las bibliotecas se desarrollaron mucho. La escritura griega facilitó el acceso a la lectura, y aparecieron bibliotecas que no estaban ligadas a los templos. En el periodo helenístico, surgieron grandes bibliotecas legendarias como la Biblioteca de Alejandría y la de Biblioteca de Pérgamo. Su objetivo era reunir todo el conocimiento de su tiempo.
En Roma, se usaban los mismos rollos de papiro. Allí se fundó la primera biblioteca pública conocida por Asinio Polión. También hubo grandes bibliotecas como la Octaviana, la Palatina (creadas por Augusto) y la Biblioteca Ulpia (del Emperador Trajano). Las bibliotecas romanas solían tener una sección para libros griegos y otra para libros romanos.

Con el crecimiento del cristianismo, apareció un nuevo formato: el códice de pergamino. La lectura y las bibliotecas empezaron a pasar de las instituciones paganas a las de la nueva Iglesia cristiana.
Bibliotecas en la Edad Media
Durante la Edad Media, con las invasiones y la caída del Imperio Romano de Occidente, la cultura se refugió en los monasterios. Estos eran los únicos lugares con bibliotecas importantes. Allí se conservaba la cultura cristiana y lo que quedaba de la cultura clásica. Monasterios como Saint Gall, Fulda y Monte Casino en Europa, o Santo Domingo de Silos y San Millán de la Cogolla en España, fueron centros de conocimiento.
Más tarde, con la creación de las universidades y la invención de la imprenta, surgieron las bibliotecas universitarias. El Estudio General de Salamanca, que luego sería la Universidad de Salamanca, tuvo una biblioteca para sus estudiantes desde 1218.

En Oriente, el Imperio Bizantino mantuvo viva la cultura clásica, influyendo en el mundo árabe y eslavo. También hubo grandes bibliotecas en monasterios y ciudades. El mundo árabe creó bibliotecas ligadas a las mezquitas y centros de enseñanza, como la del califa Al-Mamum en Bagdad o las de Abd-al-Rahman III y Al-Hakam II en Córdoba.
Durante el Renacimiento, el rey Matías Corvino de Hungría (1458-1490) apoyó a muchos artistas y científicos. En la década de 1460, fundó la Bibliotheca Corvinniana en su palacio en Buda. Tenía más de 3000 libros y era una de las más grandes de su tiempo, solo superada por la Biblioteca del Vaticano. Aunque la biblioteca fue destruida en 1526, muchos de sus libros se salvaron y hoy están en museos importantes.
Bibliotecas en la Edad Moderna
El Renacimiento, con la invención de la imprenta por Johannes Gutenberg, trajo un nuevo tipo de biblioteca: las bibliotecas principescas. Gracias a los ideales humanistas, estas bibliotecas reales y de la alta nobleza se abrieron a un público de estudiosos. En el siglo XVI, destacaron la de Fontainebleau en Francia y las de Austria y Baviera. En España, fueron importantes la de Hernando de Colón, la de la Universidad Complutense y la de El Escorial, creada por Felipe II.
En el siglo XVII se fundaron grandes bibliotecas para eruditos, como la Bodleiana en Oxford, la Ambrosiana en Milán y la Mazarina en París.
Durante el siglo XVIII se crearon la Biblioteca del Museo Británico (antecesora de la British Library) y la Biblioteca Real (origen de la Biblioteca Nacional de España). También de este periodo son las bibliotecas universitarias de Yale, Harvard y Princeton.
Bibliotecas en la Edad Contemporánea
Las revoluciones francesa y americana impulsaron la idea de que la cultura y la educación debían ser accesibles para todos. Esto llevó a que muchos fondos bibliográficos de instituciones como la Iglesia católica pasaran a ser propiedad de la sociedad. Sin embargo, la idea de acercar la cultura a todos no se hizo realidad hasta mediados del siglo XIX, con la aparición de la biblioteca pública en el mundo anglosajón.
Poco a poco, se consolidó la idea de que todas las personas tienen derecho a acceder libremente a la información. Hoy en día, el modelo anglosajón, que promueve el libre acceso y la cooperación entre bibliotecas, se ha extendido por todo el mundo.
A finales del siglo XX, con el desarrollo de los lectores digitales, surgieron los libros "electrónicos" y, con ellos, las bibliotecas digitales y electrónicas.
Tipos de bibliotecas
Las bibliotecas se pueden clasificar de varias maneras, según sus usuarios, el acceso o su ubicación. Las clasificaciones más usadas son las de la Unesco y la IFLA.
Clasificación de la UNESCO
Algunas nuevas formas de bibliotecas para niños son el bibliobús y las bebetecas. Un bibliobús es una biblioteca móvil que viaja por diferentes barrios o pueblos. Ofrece servicios de biblioteca a niños, jóvenes y adultos, especialmente a quienes viven en lugares pequeños sin una biblioteca fija. Las bebetecas son servicios especiales para bebés y niños pequeños (de 0 a 6 años). Tienen un espacio y libros elegidos para ellos y sus padres, además de ofrecer préstamos de libros, charlas sobre cuentos y asesoramiento.
Clasificación de la IFLA
La IFLA clasifica las bibliotecas en grandes grupos:
- Bibliotecas generales de investigación:
* Bibliotecas nacionales. * Bibliotecas universitarias y otras bibliotecas de investigación. * Bibliotecas para parlamentarios.
- Bibliotecas especializadas:
* Bibliotecas gubernamentales. * Bibliotecas de Ciencias Sociales. * Bibliotecas de Geografía y Mapas. * Bibliotecas de Ciencia y Tecnología. * Bibliotecas de Ciencias Biomédicas y de la Salud. * Bibliotecas de Arte. * Bibliotecas de Genealogía e Historia Local.
- Bibliotecas que atienden al público en general:
* Bibliotecas públicas. * Bibliotecas para personas con discapacidades. * Bibliotecas para niños y adolescentes. * Bibliotecas escolares y centros de recursos. * Bibliotecas para personas ciegas. * Servicios bibliotecarios para poblaciones multiculturales. * Bibliotecas metropolitanas. * Bibliotecas móviles.
Galería de imágenes
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Sala principal del Real Gabinete Portugués de Lectura de Río de Janeiro.
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La Sucursal Skillman Southwestern de la Biblioteca Pública de Dallas en Dallas, Texas
Otros temas relacionados
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Véase también
En inglés: Library Facts for Kids