Enriquillo para niños
Datos para niños Enrique Bejo |
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Cacique de Boyá y Bahoruco | ||
![]() Estatua de Enriquillo en el Museo del Hombre Dominicano, Santo Domingo
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Cacique de Boyá | ||
1533-27 de septiembre de 1535 | ||
Sucesor | Mencía de Guevara y Martín de Alfaro | |
Cacique de Bahoruco | ||
1519-4 de agosto de 1533 | ||
Información personal | ||
Tratamiento | Don | |
Nacimiento | ca. 1498![]() |
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Fallecimiento | 27 de septiembre de 1535![]() |
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Religión | Católica | |
Apodo | Enriquillo | |
Familia | ||
Cónyuge | Mencía de Guevara | |
Enrique Bejo (nacido cerca del lago Jaragua alrededor de 1498 y fallecido en Sabana Buey el 27 de septiembre de 1535), más conocido como Enriquillo, fue un líder taíno. Se rebeló contra las autoridades españolas en la isla Española. Primero fue cacique de Bahoruco y, después de llegar a un acuerdo con los españoles, se convirtió en cacique de Boyá.
Cuando era joven, Enrique fue puesto bajo el cuidado de Francisco Valenzuela en la villa de San Juan. Sin embargo, su vida cambió cuando el hijo de Valenzuela causó un gran daño a su esposa. Enrique buscó justicia, pero en lugar de recibir ayuda, fue encarcelado. Aunque lo liberaron, sus intentos de encontrar justicia en la Real Audiencia de Santo Domingo no tuvieron éxito.
En 1519, Enrique comenzó su levantamiento contra los españoles en la sierra de Bahoruco. Su rebelión duró hasta 1533. Durante muchos años, su lucha no preocupó mucho a las autoridades españolas. A pesar de la rebelión, Enrique mantuvo sus costumbres españolas y religiosas, como la abstinencia los viernes y durante la Cuaresma, y rezaba el Padrenuestro y el Avemaría.
Finalmente, en 1533, aceptó la paz que le ofrecieron los españoles. La Corona española le dio el título de "don", un honor que solo recibían las personas importantes. Desde entonces, se le conoció como Don Enrique.
Su historia fue contada de forma especial en la novela Enriquillo de Manuel de Jesús Galván. Esta obra de ficción, aunque no es totalmente histórica, a menudo ha sido usada como fuente por los historiadores dominicanos.
Contenido
Biografía de Enriquillo
¿Cómo fueron los primeros años de Enriquillo?
Enrique Bejo nació a orillas del lago Jaragua, que hoy se conoce como Lago Enriquillo. Fue educado en un convento por frailes de la Orden Franciscana. Desde pequeño, mostró ser católico y mantuvo su fe. Sabía leer, escribir y hablaba muy bien el español.
Más tarde, Enrique se casó con Mencía de Guevara. Ella era mestiza, hija de un español llamado Hernando de Guevara y de Ana de Guevara (Higuemota), quien era descendiente directa de la cacique Anacaona.
En 1514, Enrique fue puesto bajo el cuidado de Francisco Valenzuela en la villa de San Juan de la Maguana. Allí trabajaba y era tratado con respeto. Pero cuando Francisco murió, su hijo Andrés heredó las responsabilidades y trató a Enrique de forma injusta. Le quitó una yegua y maltrató a Mencía. Enrique se quejó a Pedro de Vadillo, el teniente de gobernador de San Juan de la Maguana, pero no le hicieron caso. En cambio, Enrique fue encarcelado y maltratado por Vadillo. Aunque lo liberaron, su situación no mejoró. Por eso, viajó a la ciudad de Santo Domingo para presentar su caso ante la Audiencia y Cancillería Real de Santo Domingo. El tribunal dijo que se le debía hacer justicia, pero las cosas en la villa de San Juan seguían siendo difíciles para Enrique.
¿Por qué se rebeló el cacique Enriquillo?
En 1519, después de sufrir muchas injusticias y ver que no había solución, Enrique decidió levantarse contra la opresión española. Huyó a la sierra de Bahoruco con un grupo de indígenas. Durante su rebelión, realizaba ataques sorpresa en los caminos, asaltando a los españoles y obteniendo bienes. También causó daños en pueblos y campos. Esta situación duró mucho tiempo porque, al principio, sus acciones no causaban grandes problemas a los intereses españoles. Él y sus indios estaban escondidos, como muchos otros, pero no afectaban gravemente a los españoles.

El 4 de julio de 1532, la reina Isabel de Portugal, quien gobernaba España e Indias mientras su esposo, el rey Carlos I de España, estaba ausente, recibió informes sobre los daños causados por Enrique. Ordenó una expedición de 200 hombres, dirigida por el capitán general Francisco de Barrionuevo, para resolver la situación. La idea era ofrecer a Enrique la oportunidad de rendirse al rey de España y recibir perdón, o enfrentar la guerra si se negaba.
El 21 de febrero de 1533, en Santo Domingo, se discutió cómo lograr la paz. La Real Audiencia reunió a líderes importantes y acordaron que el capitán Francisco de Barrionuevo primero intentaría negociar la paz. Solo usaría la fuerza si fuera necesario. Esta estrategia buscaba mantener la estabilidad de la colonia y evitar un conflicto mayor.
El 8 de mayo de 1533, el capitán Barrionuevo salió de la capital en un barco con 32 hombres y algunos indígenas aliados. Navegó por la costa sur de la isla hasta llegar a Villanueva de Yáquimo. Después de dos meses de búsqueda, solo encontraron un pueblo indígena que parecía abandonado. Barrionuevo envió guías a Yaguana y a un indígena que decía saber dónde estaba Enrique, pero este último nunca regresó. Después de 20 días de espera, Barrionuevo decidió ir él mismo con 30 hombres y una guía indígena. Siguiendo las indicaciones de la guía, finalmente encontraron un lugar cultivado después de tres días y medio.
Después de hablar con los indígenas de la zona, descubrieron que Enrique estaba en la laguna Comendador Aibaguanex. Siguiendo sus rastros, llegaron a un monte y capturaron a un indígena que cortaba leña, quien les dijo dónde se suponía que estaba Enrique. Barrionuevo se dirigió a la orilla de una laguna y habló con los indígenas. Se presentó como portador de una carta del rey y pidió que la indígena que ya había hablado con Enrique fuera a confirmar su presencia. Al día siguiente, llegaron dos canoas con la guía indígena, 15 indígenas y el capitán Martín de Alfaro, pariente de Enrique. Después de saludarse, los capitanes hablaron. Tras esta reunión, acordaron que Barrionuevo iría al escondite de Enrique, a pesar de la opinión de los españoles que lo acompañaban. Con un grupo de hasta 15 hombres, Barrionuevo dejó a los demás bajo el cuidado de los indígenas aliados y partió con Martín de Alfaro.
La Paz de Barrionuevo: Un acuerdo importante

El 4 de agosto de 1533, Martín de Alfaro le dijo a Barrionuevo que Enrique los invitaba a unirse a él. Después de reunir a los españoles que estaban con los indígenas aliados, la delegación fue a donde vivía Enrique. El abrazo entre Barrionuevo y Enrique marcó el inicio del encuentro.
Sentados sobre una manta de algodón, bajo la sombra de un gran árbol, Barrionuevo y Enrique hablaron. Barrionuevo colocó a los españoles a su lado, mientras Enrique acomodó a sus indígenas del otro lado. Barrionuevo le dijo a Enrique que el Emperador le ofrecía perdón y quería que fuera su vasallo, tratándolo bien y olvidando los problemas pasados. Le recordó que era cristiano y que Dios le daba la oportunidad de salvarse.
Enrique recibió la carta del Emperador, pero como no veía bien, pidió que se la leyeran. Barrionuevo lo hizo y luego le entregó la carta. Barrionuevo le dijo: «Señor don Enrique, besad la carta de Su Majestad e ponedla sobre vuestra cabeza». Enrique besó la carta y la puso sobre su cabeza.
Luego, Barrionuevo le mostró otra carta de la Audiencia dominicana y le explicó que venía a ofrecerle la paz en nombre del Rey. Le advirtió que si no aceptaba, la guerra sería mucho más dura. Le recordó que el Rey era muy poderoso y que no podría esconderse. También le dijo que si aceptaba la paz, sería tratado con respeto y viviría en libertad, como otros vasallos cristianos.
La respuesta de don Enrique fue sincera: «Yo no deseaba otra cosa sino la paz, y conozco la merced que Dios y el Emperador nuestro señor me hacen en esto, y por ello beso sus reales pies y manos; e si hasta agora no he venido en ello, ha seído a causa de las burlas que me han hecho los cristianos, e de la poca verdad que me han guardado, y por esto no me he osado fiar de hombre desta isla».
Enrique contó su historia hasta el inicio de su levantamiento. Luego, se levantó y habló con sus capitanes. Después de esa conversación, regresó con Barrionuevo y aceptó la paz. Enrique prometió reunir a los indígenas y a los africanos rebeldes que seguían luchando en otras partes de la isla. Desde ese momento, los indígenas comenzaron a llamarlo «don Enrique, mi señor», porque la carta real lo apoyaba. La cena que siguió selló el día con regalos entre indígenas y españoles. Después del encuentro, los españoles regresaron a la capital.
Carta de Enriquillo al rey
En 1534, Enrique le envió una carta al rey Carlos I para mostrarle su lealtad. En ella, le agradecía las mercedes (favores) que el Rey le había concedido y le aseguraba que él y todos los indígenas de su tierra habían regresado a los pueblos españoles. También le informó que se dedicaría a buscar y convencer a otros indígenas que aún no se habían unido al servicio del Rey. Enrique le pidió al Rey que lo contara entre sus servidores y vasallos.
Fallecimiento de Enriquillo
El 27 de septiembre de 1535, Enrique falleció en Sabana Buey. La noticia de su muerte fue enviada al rey Carlos por el escribano de la Audiencia, Diego Caballero. En su mensaje, Caballero informó que Enrique «Murió como buen cristiano, habiendo recibido los sacramentos y se hizo traer a enterrar un pueblo de esta isla que se dice la villa de Açua. Hizo testamento y mandó que su mujer Doña Mencía y un primo suyo que se decía el Capitán Martín de Alfaro, fuesen caciques en su lugar».
¿Fue Enriquillo la misma persona que Guarocuya?
Posible origen de Enriquillo
La mayoría de los historiadores piensan que Enriquillo y el cacique Guarocuya eran la misma persona. Si esto es cierto, Enriquillo pertenecía a la alta nobleza del cacicazgo de Jaragua. Guarocuya era sobrino de Anacaona, hermana del cacique de Jaragua Bohechío y quien lo sucedió después de su muerte. Anacaona estaba casada con Caonabo, el cacique del reino vecino de Maguana. Una minoría de historiadores no está de acuerdo y dice que Guarocuya fue capturado y ejecutado. Sin embargo, la mayoría cree que ambos rebeldes eran la misma persona, y que los relatos sobre la muerte de Guarocuya son muy parecidos a las versiones más confiables sobre la muerte de Anacaona. Esto sugiere que las historias podrían haberse confundido. También se ha documentado que Enriquillo estaba casado con Mencía, quien era nieta de Anacaona.
Legado de Enriquillo
Según una antigua tradición, el cacique Enriquillo se estableció en lo que hoy es la provincia de Monte Plata, y vivió en el pueblo de Boyá. Su tumba se convirtió en un lugar importante para los nativos. Por esta razón, los españoles decidieron construir la iglesia de Nuestra Señora de Aguas Santas en la comunidad de Boyá, en la Provincia de Monte Plata, sobre su tumba. Esto se hizo para cambiar el verdadero lugar de veneración de este líder. También se dice que el Cacique murió alrededor de 1536, a los 40 años de edad.
Sus restos descansan allí sin ningún honor oficial, a pesar de que el Decreto 6885 del 29 de septiembre de 1950, publicado en la Gaceta Oficial n.º 7193 del 18 de octubre de 1950, establece el 27 de septiembre como el Día del Héroe de Bahoruco.
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Enriquillo Facts for Kids