Diego Zapata de Cárdenas para niños
Datos para niños Diego Zapata de Cárdenas |
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![]() Gobernador y capitán general de Yucatán |
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17 de mayo de 1636-31 de diciembre de 1643 | ||
Predecesor | Andrés Pérez Franco | |
Sucesor | Francisco Núñez Melián | |
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Información personal | ||
Nacimiento | Siglo XVI Madrid (España) |
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Fallecimiento | Siglo XVII Mérida, Capitanía General de Yucatán, Nueva España |
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Nacionalidad | Española | |
Familia | ||
Cónyuge | Jerónima de Lazo y Castilla | |
Información profesional | ||
Ocupación | Administrador real | |
Diego Zapata de Cárdenas fue un importante administrador español. Nació en Madrid, España, en el siglo XVI. Se le conoció como el primer marqués de Santofloro. Fue gobernador y capitán general de Yucatán desde 1636 hasta 1643. Fue nombrado directamente por el rey Felipe IV de España.
Contenido
¿Quién fue Diego Zapata de Cárdenas?
Diego Zapata de Cárdenas fue una figura clave en la administración colonial española. Su trabajo principal era gobernar la región de Yucatán. Esta región era parte de la Nueva España, un gran territorio bajo el control de España en América.
Su llegada a Yucatán y primeros años de gobierno
Diego Zapata de Cárdenas fue nombrado gobernador el 30 de octubre de 1635. Este nombramiento se hizo en San Lorenzo de El Escorial, España. Sin embargo, no llegó a la península de Yucatán para tomar su cargo hasta mayo de 1636.
Algunos historiadores, como Diego López de Cogolludo, lo describieron como un gobernante prudente. Decían que se preocupaba por el servicio al rey y por el bienestar de la gente. Por ejemplo, él tuvo que aplicar un nuevo impuesto a los indígenas. Aunque hubo problemas, lo hizo. Luego, informó al rey sobre las dificultades que causaba este impuesto.
Sin embargo, otros historiadores tienen una opinión diferente. Mencionan que desde su llegada, el gobernador se dedicó a prácticas de negocio que no estaban permitidas. Se dice que adelantaba dinero o materiales a los indígenas mayas. A cambio, ellos debían producir mercancías que luego él compraba a precios muy bajos.
Desafíos durante su mandato: Piratas y rebeliones
El marqués de Santo Floro fue un gobernador que generó controversia. Le tocó eliminar un impuesto de cincuenta centavos por indígena al año. Este impuesto había sido establecido por el gobernador anterior.
También fue acusado ante la Real Audiencia de México y el Consejo de Indias. Estas acusaciones eran por sus prácticas de negocio injustas. Incluso hubo un movimiento de alcaldes que querían arrestarlo y enviarlo a la Ciudad de México. Un juez de Guatemala fue enviado a Yucatán para investigarlo. Al final, el gobernador solo recibió multas pequeñas y siguió en su puesto.
El ataque de los piratas holandeses
En marzo de 1640, la ciudad de Mérida vivió momentos de miedo. Llegó la noticia de que piratas holandeses habían desembarcado en el puerto de Sisal. Se creía que querían llegar hasta Mérida, la capital.
El gobernador organizó la defensa de la ciudad. Puso a dos militares experimentados, José de Argáez y Francisco de Sandoval, a cargo de batallones. Estos batallones se ubicaron en Hunucmá. Su misión era impedir que los piratas avanzaran hacia Mérida. Las fuerzas militares estuvieron vigilantes por ocho días. Finalmente, los piratas se fueron. Solo habían quemado algunas casas en Sisal y saqueado la villa. No se adentraron en la tierra.
La rebelión en Bacalar
Poco después, surgieron más problemas en la península. Los indígenas mayas de la región oriental, en Bacalar, se levantaron contra los españoles. El marqués de Santo Floro actuó con calma. Convocó una reunión para decidir cómo hacer que los indígenas volvieran a la obediencia. Ellos habían quemado sus pueblos y se habían escondido en los bosques.
Se decidió enviar al sacerdote Ambrosio de Figueroa. Él intentaría convencer a los rebeldes de regresar a sus pueblos. El sacerdote fue al lugar y trató de negociar. Les aseguró que no serían castigados si se rendían. Pero no tuvo éxito. Esto hizo que algunos pensaran en usar la fuerza. Sin embargo, el gobernador se negó. Dijo que no tenía permiso del rey para usar las armas.
En abril de 1641, otra comisión salió de Mérida. Esta vez, enviaron a dos frailes que hablaban maya: Juan de Estrada y Bartolomé de Fuensalida. Pasaron más de un año en la zona de Bacalar. Intentaron cumplir su misión, enfrentando muchos peligros en el extenso territorio. No tuvieron éxito y regresaron a Mérida en octubre de 1642. La rebelión de Bacalar nunca fue "resuelta" por la fuerza. No hubo grandes batallas, pero la región vivió en un estado de tensión e inseguridad.
El fin de su gobierno
El 31 de diciembre de 1643, el gobierno del marqués de Santo Floro terminó. Él decidió quedarse a vivir en la provincia de Yucatán. Murió allí en una fecha que no se conoce con exactitud. Después de él, Francisco Núñez Melián tomó el cargo de gobernador.
Véase también
- Virreinato de la Nueva España
- Diego López de Cogolludo
- Capitanía General de Yucatán
- Historia de Yucatán
- Gobernadores y Capitanes Generales de Yucatán