Demarquía para niños
Demarquía o estococracia es un sistema de gobierno donde los ciudadanos que dirigen el Estado son elegidos al azar. Es como si, en lugar de votar, se hiciera un sorteo para decidir quiénes serán los líderes. En otros idiomas, se le conoce como "tirada a suerte" o "sufragio por la suerte". En español, también se usan los términos insaculación o lotocracia.
Contenido
¿Qué es la Demarquía o Estococracia?
Origen del término y su significado
El término demarchy fue creado por Peter Dienel y Burkhard Wehner. Más tarde, el filósofo australiano John Burnheim lo desarrolló en el siglo XX. La demarquía es un sistema político donde el Estado es gobernado por ciudadanos elegidos al azar. La idea es que la democracia se logre mediante sorteos, eliminando las elecciones y los partidos políticos. Así, cualquier ciudadano podría ser elegido para gobernar.
Estos ciudadanos, llamados "jurados políticos" o "jurados de ciudadanos", tomarían las decisiones sobre las leyes y las políticas públicas. Si son elegidos individualmente (como un presidente o un alcalde), decidirían. Si son elegidos en grupo (como un parlamento), debatirían y luego decidirían, de forma similar a como un jurado llega a un veredicto en un juicio.
El Poder Judicial (los jueces) generalmente no se elige por sorteo, ya que se considera una carrera especializada. Sin embargo, se podría considerar su elección por sorteo si se tienen en cuenta sus méritos.
¿Cómo funciona la Demarquía?
Superando desafíos de la democracia actual
La demarquía busca resolver algunos problemas de las democracias representativas actuales. A veces, estas democracias pueden ser influenciadas por grupos con intereses especiales. También pueden crear una división entre los políticos profesionales y los ciudadanos, que a menudo se sienten poco informados o involucrados.
La idea de elegir líderes por sorteo viene de la antigua Grecia. Se ha vuelto a considerar debido a la gran influencia de los medios de comunicación, la corrupción y la formación de una "clase política" y partidos que aprueban sus propios presupuestos. Según Burnheim, elegir a los líderes al azar haría más fácil que los ciudadanos participen y más difícil que los grupos con intereses especiales corrompan el proceso.
Albert Einstein, un famoso científico, también habló sobre los problemas de los partidos políticos. Él pensaba que los partidos, financiados por personas con mucho dinero, podían separar a los votantes de los legisladores. Esto hacía que los representantes no protegieran bien los intereses de la gente común. Además, creía que quienes tenían dinero controlaban los medios de comunicación y la educación, lo que dificultaba que los ciudadanos tomaran decisiones informadas.
Estudiosos como Vilfredo Pareto señalaron que el poder se ejerce cada vez más controlando la educación y las opiniones a través de los medios. La demarquía, al elegir a los gobernantes por sorteo, aseguraría que todos los grupos de la población estén representados. Por ejemplo, si un grupo forma el 1% de la población, la demarquía garantizaría que el 1% de los gobernantes pertenezca a ese grupo. Esto se basa en las matemáticas de las muestras estadísticas.
Además, la demarquía busca eliminar los partidos políticos, los gastos de las campañas electorales y los compromisos de los gobernantes con quienes financiaron sus campañas. También busca eliminar los privilegios de la "clase política" y limitar la influencia de políticos individuales por mucho tiempo.
En una demarquía, nadie podría predecir quiénes serán los próximos gobernantes. Esto significa que cada región o país tendría que establecer reglas generales para las políticas públicas, confiando en que los futuros gobiernos las sigan. Si un gobernante comete un error, este sistema busca que sea juzgado sin que un partido político lo defienda. Esto ayuda a evitar que los políticos queden sin castigo por delitos cometidos durante su gestión.
Historia de la Demarquía
Orígenes en la antigua Grecia
La palabra estococracia viene del griego stokhos, que significa "objetivo" o "blanco". Se refiere a algo aleatorio, pero con una intención.
La democracia ateniense en la antigua Grecia tenía elementos similares a la demarquía. La mayoría de los cargos públicos se elegían por sorteo. También hubo ejemplos limitados de sorteo en la antigua Roma, en algunas partes del gobierno de la Iglesia, en las repúblicas italianas de Florencia y Venecia, y en procesos de insaculación en algunas regiones de España y Suiza.

En la antigua Grecia, muchos de los funcionarios públicos más importantes eran esclavos. Esto se hacía para que el conocimiento especializado no se convirtiera en poder político. Los ciudadanos querían que todo el poder político estuviera en sus manos. Al confiar estas funciones a esclavos, la ciudad evitaba que surgiera un grupo de expertos que pudiera volverse contra ella. De ahí viene la idea de que la administración y los jueces no deben ser políticos.
Ideas de la Ilustración: Montesquieu y Rousseau

Montesquieu, en su libro El Espíritu de las Leyes (1748), apoyó la estococracia. Él dijo que "El sufragio por sorteo es propio de la democracia, mientras que el sufragio por elección es propio de la aristocracia".
Jean-Jacques Rousseau, en su obra El Contrato Social (1762), también consideró el sorteo como una forma de elegir. Él pensaba que en una democracia, el pueblo tiene dos roles: es el que hace las leyes y el que gobierna. Para hacer esto bien, no deberían distraerse con intereses personales. El sorteo, o estococracia, permitía que los intereses personales fueran mínimos.
Rousseau afirmó que solo la ley puede obligar a alguien a ser gobernante si es elegido por sorteo. Así, la condición sería igual para todos, y la elección no dependería de la voluntad de nadie. También creía que las elecciones por voto eran más adecuadas para los sistemas aristocráticos, donde se usan influencias y grupos de presión. Para Rousseau, el voto a partidos políticos era una forma de engaño para dominar, creada por la aristocracia, y no era verdaderamente democrática.
Otros pensadores como Nicolas de Condorcet y el gobierno de la Revolución Francesa también estudiaron la democracia por sorteo.
La demarquía en la actualidad
En la política moderna, se han hecho pruebas de sistemas similares a la estococracia en lugares como la ciudad china de Zeguo (2009), en la Columbia Británica (Canadá), en Nueva Gales del Sur (Australia), en algunas iniciativas del Parlamento de Islandia (2010) y en varios "jurados" en Alemania.
Un ejemplo práctico de Demarquía
Imagina un país con cuarenta millones de habitantes, dividido en veinte provincias. Supongamos que veinte millones de personas pueden ser elegidas para cargos de gobierno (cumplen la edad, no tienen antecedentes penales, etc.). Cada ciudadano tiene un número de identificación.
En cada elección, se sortea un "número determinante" de tres cifras, por ejemplo, el 465.
Requisitos para ser elegido
Todos los ciudadanos que cumplen los requisitos y cuyo número de identificación termina en 465 se convierten en legisladores. Esto podría significar 20,000 legisladores para todo el país. Estos legisladores se distribuyen en cada provincia y municipio de forma proporcional a su población.
Los legisladores recibirían un salario similar al promedio de la población. En la estococracia, no hay gastos de elecciones ni campañas de partidos, porque no hay partidos políticos.
Aquellos cuyo número de identificación termina en 465 serían legisladores municipales. Quienes tengan un número que termine en 5465 serían legisladores provinciales. Y quienes terminen en 65465 serían legisladores nacionales. Esto asegura que el número de legisladores sea proporcional a la población en todos los niveles.
Para elegir a los líderes del Poder Ejecutivo (como presidentes o gobernadores), se realiza un segundo sorteo, pero usando el mismo "número determinante" (el 465). Por ejemplo, quienes tengan un número que termine en 465465 podrían ser elegidos para cargos ejecutivos. Si hay más personas que cargos, se haría un sorteo adicional para decidir quién ocupa el puesto.
Aclaración sobre los cargos administrativos
En este sistema, la carrera administrativa (los funcionarios que trabajan en el gobierno de forma permanente) llega hasta el nivel de secretario de estado o de área. Esto significa que el líder político elegido por sorteo (presidente, gobernador o alcalde) solo puede nombrar a sus ministros de confianza. No puede nombrar a los funcionarios de niveles inferiores, que son "de carrera administrativa" y obtienen sus puestos por concursos públicos.
Esta limitación busca evitar problemas como el nepotismo (favorecer a familiares), el clientelismo político (intercambiar favores por apoyo) y la compra de cargos. También busca asegurar que los funcionarios políticos reciban buen asesoramiento y que las políticas de Estado importantes se mantengan a largo plazo, sin cambiar con cada nuevo gobierno. Además, promueve que los funcionarios de carrera estén bien capacitados.
Determinación de los líderes nacionales
Finalmente, el ciudadano cuyo número de identificación sea, por ejemplo, 5.465.465, sería el Presidente de la Nación. Si hubiera otro ciudadano con un número como 65.465.465, podría ser el vicepresidente y presidir el poder legislativo nacional. Si hubiera más personas que cargos, se haría un sorteo adicional.
La claridad de estas reglas ayuda a que el sistema sea transparente. No hay necesidad de escrutinios electrónicos ni campañas. La prioridad es mejorar la educación y preparación de toda la población, ya que esto mejora la calidad de los gobernantes.
Véase también
- Democracia ateniense#El Consejo de los 500 (Boulé)
- Insaculación
- Étienne Chouard