Corcho para niños
El corcho es la capa exterior del alcornoque, un tipo de árbol. En botánica, esta capa se llama felema. Cada año, el alcornoque forma una nueva capa de corcho que se suma a las anteriores, haciendo que la corteza sea cada vez más gruesa. El corcho puede usarse tal como se extrae del árbol o transformarse para diferentes usos. Su componente principal es una sustancia llamada suberina.
En todo el mundo, se producen unas 340.000 toneladas de corcho. Portugal es el mayor productor, con un 61%, seguido por España con un 30% e Italia con un 6%.
Contenido
¿Qué hace al corcho tan especial?
El corcho tiene características únicas que lo hacen muy valioso y difícil de imitar:
Ligereza y elasticidad del corcho
- Ligereza: Es muy ligero porque el 88% de su volumen es aire. Esto significa que pesa muy poco.
- Elasticidad: Puede volver a su forma original después de ser apretado. Por ejemplo, un tapón de corcho puede comprimirse casi a la mitad y luego recuperar su tamaño.
Otras propiedades importantes del corcho
- Gran agarre: Su superficie tiene pequeñas "ventosas" que le permiten adherirse bien y evitar que se resbale.
- Resistencia al agua: Es casi impermeable a líquidos y gases. Esto se debe a la suberina y otras sustancias en sus células. Por eso, el corcho no se daña con la humedad y puede durar mucho tiempo.
- Genera calor: Tiene un alto poder calorífico, similar al del carbón vegetal.
- Fácil de manejar: Se puede ablandar y hacer más elástico hirviéndolo, lo que facilita su corte y otros procesos industriales.
- Baja humedad: Contiene muy poca agua, lo que impide que crezcan microorganismos.
- Aislante térmico: Protege al árbol del calor y el frío. Su estructura llena de aire y su baja conductividad lo hacen un excelente aislante. Es treinta veces más resistente al paso del calor que el hormigón.
La industria del corcho en España

En España, la industria del corcho se concentra principalmente en Andalucía, Extremadura y Cataluña. España cuenta con 506.000 hectáreas de alcornocales, lo que representa el 25% del total mundial. De estos árboles se extraen 88.400 toneladas de corcho, el 30% de la producción global. Hay unas 150 empresas que emplean a cerca de 2000 personas.
La industria del corcho se divide en dos áreas principales:
- Preparación del corcho.
- Fabricación y venta de tapones.
Andalucía y Extremadura se especializan en la preparación del corcho. En Extremadura, esta etapa representa el 70% de la industria. En Cataluña, las empresas se dedican más a la fabricación y venta de tapones para diferentes tipos de bebidas, abarcando el 80% de la cadena de valor en esa región. El sector español produce 3.000 millones de tapones al año.
Exportación de productos de corcho
Más del 50% de lo que factura el sector corchero español proviene de las exportaciones. Los principales compradores son países europeos, que representan más del 80% de las ventas. Francia, Portugal e Italia son los mayores mercados. En América, destacan Argentina, Chile y Estados Unidos, que compran alrededor del 10% del total exportado.
¿Cómo se procesa el corcho?
El descorche o "saca del corcho"
La extracción del corcho del alcornoque se llama "saca del corcho". Esta actividad se realiza cuando el corcho está creciendo más activamente, entre mayo y agosto. Los trabajadores, llamados "corcheros" o "peladores", usan un hacha para cortar y separar la corteza del árbol, obteniendo lo que se conoce como "planchas de corcho". A este proceso también se le llama "la pela del alcornoque".
El corcho se puede extraer por primera vez cuando el árbol tiene entre 30 y 60 años. Este primer corcho, llamado "corcho bornizo", no es de la mejor calidad y se usa para decoraciones o aislamientos.
Entre nueve y catorce años después, se realiza la segunda extracción. El material obtenido, llamado "corcho secundario", es mejor pero aún no es apto para tapones.
Es en la tercera saca, cuando el árbol tiene entre 40 y 50 años, y en las siguientes, cuando se obtiene el corcho de la calidad necesaria para hacer tapones. Este corcho se llama "corcho amadia" o "de reproducción". A partir de este momento, el alcornoque producirá corcho de buena calidad cada 9 a 14 años, durante unos 150 años, lo que equivale a unas 14 o 15 extracciones.
El descorche es un proceso antiguo que debe ser realizado por expertos y consta de 6 pasos:
- Abrir - Se golpea el corcho verticalmente con el hacha para empezar a separarlo del tronco.
- Separar - Se continúa separando la plancha del árbol con el hacha.
- Trazar - Se hace un corte horizontal para definir el tamaño de la plancha que se va a extraer.
- Extraer - Se retira la plancha con cuidado para que no se rompa. Cuanto más grandes y enteras sean las planchas, más valiosas son.
- Quitar - Se eliminan los pequeños trozos de corcho que quedan pegados al tronco.
- Marcación - Finalmente, se marca el árbol con el año en que se realizó la extracción.
Después del descorche, las planchas de corcho se apilan en el bosque o en las fábricas. Se apilan de una forma específica para que el corcho se estabilice. Deben reposar al menos seis meses antes de entrar en la cadena industrial.
Tratamiento del corcho para diferentes usos
Existen dos procesos principales para tratar el corcho:
- Para los tapones de botella: El corcho se hierve a 100 grados Celsius durante una hora y luego se deja secar durante un año. Después, se vuelve a hervir, se corta en tiras y se perfora para hacer los tapones.
- Para otros productos: El corcho de menor calidad y los restos de las planchas se limpian, trituran, unen con pegamento y se prensan. Así se obtiene un material llamado aglomerado de corcho, que puede tener diferentes formas: gránulos, planchas, rollos o barras. Se usa para tapones de menor calidad, baldosas para suelos o techos, como material aislante, para sellar juntas o en paneles para colgar notas.
Usos comunes del corcho

Uno de los usos más conocidos del corcho es como tapón para recipientes de vidrio, especialmente botellas de vino y de aceite. Aunque hoy en día se fabrican tapones con otros materiales, como plásticos, a menudo se les sigue llamando "corchos".
Otro uso común son los paneles para paredes, que sirven para colgar notas o avisos con chinchetas. Originalmente eran de corcho natural, pero ahora también se hacen con otros materiales, aunque se les sigue llamando "corchos". También se usa en flotadores por su capacidad de flotar.
En la construcción, el corcho se utiliza como aislante en forma de planchas o gránulos para hacer morteros más ligeros.
Además, es un componente en los instrumentos de viento para sellar las llaves y evitar que el aire se escape. Hoy en día, el corcho se encuentra en muchos productos de uso diario, como suelas de zapatos, bolsos, paraguas, objetos de decoración para el hogar y juegos.
El corcho y el medio ambiente
Los bosques de alcornoques son ecosistemas muy importantes para la biodiversidad en Europa. Son el hogar de especies animales en peligro, como el águila imperial, la cigüeña negra o el lince ibérico.
El corcho ofrece muchos beneficios para el medio ambiente:
- Ayuda a reducir el riesgo de incendios, ya que el alcornoque es muy resistente al fuego gracias a su capa de corcho y puede rebrotar rápidamente.
- Frena la desertificación, porque las raíces de los alcornoques sujetan el suelo y sus copas reducen la fuerza de la lluvia, evitando la erosión.
- Contribuye al ciclo del agua, ya que la materia orgánica del suelo retiene el agua de lluvia y ayuda a recargar los acuíferos (reservas de agua subterránea).
- Protege contra el cambio climático. El corcho almacena dióxido de carbono durante mucho tiempo. Se calcula que un tapón de corcho retiene el doble de su peso en CO2. Por lo tanto, la industria del corcho ayuda a combatir el cambio climático.
El corcho es un material natural, orgánico, renovable, biodegradable y 100% reciclable.
Véase también
En inglés: Cork (material) Facts for Kids