Complejo Chelonoidis nigra para niños
Datos para niños Tortuga de las Galápagos |
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Rango temporal: Holoceno - Reciente | ||
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Taxonomía | ||
Reino: | Animalia | |
Filo: | Chordata | |
Clase: | Reptilia | |
Orden: | Testudines | |
Suborden: | Cryptodira | |
Familia: | Testudinidae | |
Género: | Chelonoidis | |
Especie: | C. nigra | |
Distribución | ||
Localización del archipiélago de Galápagos. |
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especies | ||
véase el texto |
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El Complejo Chelonoidis nigra es un grupo de 10 especies de tortugas terrestres gigantes. Son conocidas como tortugas de las Galápagos o galápagos.
Estas tortugas están muy relacionadas entre sí y viven en las islas Galápagos. Son las tortugas terrestres más longevas del mundo, pudiendo vivir cientos de años. La tortuga gigante de Floreana es considerada la tortuga más grande del mundo.
Las tortugas de Galápagos son un gran ejemplo de cómo los animales se adaptan a su entorno. Esto ocurre gracias al aislamiento, el clima y las características geográficas de las islas.
Contenido
¿Dónde viven las tortugas de Galápagos?
Las 10 especies que forman el «Complejo Chelonoidis nigra» viven en 7 de las islas Galápagos. Este es un archipiélago volcánico que se encuentra a unos 1000 km al oeste de las costas de Ecuador en América del Sur.

¿Cómo se clasifican las tortugas de Galápagos?
La historia de su clasificación

Las islas Galápagos fueron descubiertas en 1535. En 1570, aparecieron por primera vez en los mapas con el nombre "Insulae de los Galopegos". Este nombre se puso por las tortugas gigantes que los marineros encontraron allí. La palabra «galápago» es una antigua palabra española para «tortuga».
Al principio, la tortuga gigante de Aldabra (Geochelone gigantea) y las de Galápagos se consideraban la misma especie. Los científicos pensaban que los marineros las habían transportado. En 1783, Johann Gottlob Schneider las clasificó a todas como Testudo indica. Más tarde, en 1812, August Friedrich Schweigger las llamó Testudo gigantea. En 1834, André Marie Constante Duméril y Gabriel Bibron clasificaron a las tortugas de Galápagos como una especie diferente, llamándola Testudo nigrita.
Se pensó que estas tortugas pertenecían al género Geochelone. Sin embargo, estudios genéticos mostraron que están más relacionadas con el género africano Kinixys. Se cree que sus antepasados llegaron a Sudamérica en el Oligoceno. Posiblemente cruzaron el océano Atlántico flotando. Esto fue posible porque pueden flotar con la cabeza hacia arriba y sobrevivir hasta 6 meses sin comida ni agua.
Después, usando el mismo método, cruzaron el océano Pacífico y llegaron a las islas Galápagos.
El «Complejo Chelonoidis nigra»
Charles Darwin notó la diversidad de estas tortugas cuando visitó las islas en 1835. Esto le ayudó a desarrollar su teoría de la evolución de las especies.
Antes, las tortugas de este grupo se consideraban subespecies de una sola especie: Chelonoidis nigra. A principios del siglo XXI, un estudio encontró que tenían más diferencias genéticas de lo que se pensaba. Por eso, ahora se consideran especies completas. Se agrupan en este "complejo" porque tienen un origen común y características similares dentro del género Chelonoidis.
¿Qué especies forman este grupo?
El «Complejo Chelonoidis nigra» incluye 10 especies:
- Chelonoidis becki (Rothschild, 1901) es la tortuga del norte de Isabela.
- Chelonoidis chathamensis (Van Denburgh, 1907) es la tortuga de San Cristóbal.
- Chelonoidis darwini (Van Denburgh, 1907) es la tortuga de Santiago.
- Chelonoidis duncanensis (Garman, 1996) es la tortuga de Pinzón.
- Chelonoidis hoodensis (Van Denburgh, 1907) es la tortuga de Española.
- Chelonoidis porteri (Rothschild, 1903) es la tortuga de Santa Cruz.
- Chelonoidis vicina (Günther, 1875) es la tortuga del sur de Isabela.
- Chelonoidis phantastica (Van Denburgh, 1907) es la tortuga de Fernandina. Se creía extinta hasta 2019.
También incluye dos especies extintas:
- † Chelonoidis abingdonii (Günther, 1877) era la tortuga de Pinta.
- † Chelonoidis nigra (Quoy & Gaimard, 1824) era la tortuga de Floreana.
¿Cómo son las tortugas de Galápagos?
Entre los miembros de este grupo se encuentran las tortugas terrestres más grandes del mundo. Pueden pesar más de 450 kg y medir más de 2 metros de largo. Son de los vertebrados más longevos, viviendo más de 100 años en la naturaleza y hasta 170 años en cautiverio.
La forma de sus grandes caparazones óseos varía mucho. Se han adaptado al ambiente de cada isla.
Esta variedad hizo que los científicos dividieran el grupo en muchas especies. Cada una es característica de una isla o parte de ella.
Se pueden reconocer 3 formas básicas de caparazón:
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- Los 3 grupos de especies de este complejo
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Ejemplo: Chelonoidis abingdonii.
Ejemplo: Chelonoidis chathamensis.
Ejemplo: Chelonoidis porteri.
¿Cómo se comportan las tortugas de Galápagos?
Algunas tortugas son sedentarias, es decir, no se mueven mucho. A otras les gusta explorar nuevos lugares. Todas deben buscar refugio cuando hace mucho sol. Se ponen a la sombra de un árbol, entre arbustos o se sumergen en charcos de lodo. El lodo también les ayuda a quitarse los parásitos. A veces, las tortugas estiran su cuello y patas. Esto invita a los pájaros a acercarse y comer sus parásitos.
¿Cómo se protegen las tortugas de Galápagos?
Las poblaciones de estas tortugas disminuyeron mucho. De más de 250.000 individuos en el siglo XVI, pasaron a unos 3.000 en los años 1970. Las causas de esta disminución fueron varias: la caza para obtener carne, la separación de su hábitat para la agricultura y la llegada de animales no nativos. Estos animales, como ratas, cabras y cerdos, competían por la comida o se comían sus huevos y crías.
Gracias a los esfuerzos de conservación desde el siglo XX, miles de tortugas han sido criadas en cautiverio. Luego, fueron liberadas en sus islas de origen. Se calcula que el número superó los 19.000 individuos a principios del siglo XXI. A pesar de esta recuperación, este grupo está clasificado como «Vulnerable» por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
¿Cómo evolucionaron las tortugas de Galápagos?
El desarrollo y la distribución de las tortugas de Galápagos se explican con varias ideas. Estas ideas intentan entender cómo estos reptiles únicos evolucionaron y se extendieron por las diferentes islas del archipiélago. Se basan en principios de evolución, geografía y ecología.
El aislamiento y la evolución
La idea más aceptada es que las tortugas de Galápagos evolucionaron de forma aislada en las islas. El archipiélago está sobre la Placa de Nazca, que se mueve constantemente. Este aislamiento ha llevado a una evolución única para las tortugas.
Se cree que las primeras tortugas llegaron desde el continente sudamericano. Posiblemente desde Ecuador o el norte de Perú, hace unos 3 a 4 millones de años. Los antepasados de estas tortugas pudieron haber sido llevados a las islas por plantas flotantes, balsas naturales u otros medios. Una vez que las tortugas llegaron a las islas, el aislamiento geográfico fue muy importante. Esto causó diferencias genéticas en las poblaciones de cada isla. Así surgieron diferentes especies de tortugas con características físicas y de comportamiento distintas. Por ejemplo, diferencias en la forma del caparazón, el tamaño y la capacidad de adaptarse a lugares específicos.
La forma del caparazón y la adaptación
La famosa diferencia en las formas de los caparazones entre las tortugas de distintas islas es un ejemplo de radiación adaptativa. Este es un proceso donde una especie evoluciona en varias formas adaptadas a diferentes ambientes. Se ven dos tipos principales de caparazones:
- Caparazones en forma de cúpula: Estas tortugas suelen vivir en islas más bajas con mucha vegetación. Allí hay más comida disponible. El caparazón en forma de cúpula les permite estirar el cuello y alcanzar el alimento del suelo.
- Caparazones en forma de silla de montar: Se encuentran en islas más secas y áridas. Estas tortugas tienen un caparazón más arqueado o en forma de silla de montar. Esto les permite estirar el cuello más alto y comer plantas más elevadas, como cactus y arbustos. Estas islas suelen tener menos recursos. Las tortugas con caparazón en forma de silla de montar evolucionaron para conseguir alimentos más difíciles de alcanzar.
Se piensa que esta diferencia evolucionó como respuesta a las distintas condiciones ambientales de las islas. Este proceso se conoce como especiación ecológica. Las tortugas que mejor se adaptaron a las condiciones locales tuvieron más posibilidades de sobrevivir y reproducirse. Esto llevó al desarrollo de formas distintas.
La actividad volcánica y la formación de islas
La formación y la edad de las islas también son muy importantes para la distribución de las tortugas. Las islas Galápagos son volcánicas y se formaron en diferentes momentos. Las islas más antiguas, como San Cristóbal, tienen poblaciones de tortugas bien establecidas con ecosistemas más viejos y estables. Las islas más jóvenes, como Fernandina, todavía están cambiando y tienen menos tortugas.
Las tortugas en islas más jóvenes pueden ser menos diversas o tener diferentes desafíos. Esto se debe a que la vegetación y los ecosistemas aún se están desarrollando. Con el tiempo, si las tortugas logran vivir en estas islas, pasarán por nuevos cambios evolutivos. Estos cambios serán impulsados por las condiciones específicas de cada isla.
La influencia humana y los movimientos de tortugas
Aunque el desarrollo y la distribución natural de las tortugas se explican por el aislamiento y el ambiente, las actividades humanas también han influido.
La llegada de los humanos a Galápagos (alrededor del siglo XVI) trajo muchas especies no nativas a las islas. Por ejemplo, ratas, cerdos y cabras. Estos animales competían con las tortugas por la comida e incluso se comían sus huevos y crías. Esto pudo haber causado que algunas poblaciones de tortugas disminuyeran o incluso desaparecieran.
Las personas también han movido tortugas entre islas a lo largo de los siglos. Esto se hizo por esfuerzos de conservación o para recolectarlas. Esto ha causado cierta mezcla genética. Sin embargo, también ha generado preocupación sobre la pureza genética de algunas poblaciones.
La época del Pleistoceno y el cambio climático
El desarrollo de las tortugas de Galápagos también pudo haber sido influenciado por el clima del Pleistoceno. En esa época, los niveles del mar eran mucho más bajos. Algunas islas podrían haber estado conectadas o más cerca entre sí. Esto pudo haber facilitado que las tortugas se movieran entre islas. También pudo haber contribuido al intercambio genético entre poblaciones. Durante los períodos más fríos, las tortugas pudieron haber colonizado nuevas islas más fácilmente. Durante los períodos más cálidos, el aislamiento pudo haber llevado a mayores diferencias.
Los cambios climáticos pudieron haber impulsado a las tortugas a adaptarse a diversas condiciones. Esto contribuyó al desarrollo de diferentes poblaciones con características distintas.
Las corrientes marinas y la distribución
Las tortugas también pudieron haber sido ayudadas por las corrientes oceánicas del archipiélago de Galápagos. Estas corrientes son importantes para que las especies se dispersen de forma natural. Las tortugas, al igual que otros seres vivos, pudieron haber sido transportadas por las corrientes oceánicas. También pudieron haber viajado en balsas naturales de vegetación que aparecían entre las islas. Esto facilitó que se movieran ocasionalmente y que hubiera intercambio genético entre las poblaciones de las islas.
Véase también
En inglés: Giant tortoise Facts for Kids