Santa Faz de Alicante para niños


La Santa Faz de Alicante es una reliquia católica muy importante. Se trata de un paño que, según la tradición, muestra el rostro de Jesús. Se guarda y se venera en el monasterio de la Santa Faz en la ciudad de Alicante, España.
El paño original era de lino y tenía marcas que representaban una cara. Con el tiempo, estas marcas se destacaron con pintura roja. La gran devoción por la Santa Faz hizo que el paño se redujera de tamaño. Por eso, se colocó en un relicario especial. Este relicario tiene una imagen de la Santa Faz por delante y una de la Virgen María por detrás. Es una de las tres "faces" reconocidas por la Santa Sede.
Cada año, la reliquia es el centro de la romería de Santa Faz. Esta es una peregrinación que reúne a más de 260.000 personas.
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Historia de la Santa Faz
El origen de la tradición
La historia de la Santa Faz de Alicante comenzó en el siglo XV. En ese tiempo, el cura de San Juan de Alicante, Mosén Pedro Mena, viajó a Roma. Allí le regalaron un paño muy especial con la imagen del rostro de Cristo. Se decía que este paño había ayudado a salvar a Venecia de una enfermedad grave.
El sacerdote llevó el paño a su iglesia en San Juan y lo guardó en el fondo de un baúl. Pero, de forma sorprendente, el paño siempre aparecía en la parte de arriba del baúl. Por eso, un día, el 17 de marzo de 1489, decidió sacar el paño en una procesión para pedir lluvia. Al llegar a un lugar llamado barranco de Lloixa, el padre Villafranca no pudo sostener el paño. Entonces, vio cómo una lágrima brotaba de él. Después de esto, ocurrieron más eventos asombrosos, como el de las "tres faces". En el lugar donde ocurrió el primer evento, se construyó el Monasterio de la Santa Faz.
Aunque la Santa Faz está ligada a San Juan, hoy se encuentra en Alicante. Esto se debe a que, cuando San Juan se convirtió en un municipio independiente en el siglo XVIII, el barrio de Santa Faz permaneció en la capital.
En 1889, para celebrar los 400 años de la reliquia, se abrió el relicario. Se pudo ver que el paño medía aproximadamente 70 centímetros cuadrados.
La Santa Faz en tiempos difíciles
Durante un periodo de conflicto en España, entre 1936 y 1939, muchas cosas importantes estuvieron en peligro. En Alicante, el 26 de julio de 1936, el Monasterio de la Santa Faz fue afectado.
Dos personas valientes, Vicente Rocamora Onteniente y el alcalde pedáneo Antonio Ramos Alberola (conocido como Tonico Santamaría), actuaron rápidamente. Entraron al lugar donde se guardaba la Santa Faz. Rompieron el cristal y sacaron la reliquia, escondiéndola en una cesta de la compra. Vieron que el paño corría un gran riesgo.
Después de pasar la noche en casa del alcalde, la reliquia fue llevada a la Diputación Provincial. Allí se guardó en una caja fuerte para protegerla. Más tarde, el alcalde Rafael Millá Santos y el exalcalde Lorenzo Carbonell también ayudaron a asegurar que la reliquia estuviera a salvo.
El lugar donde se guarda la Santa Faz (el camarín) se mantuvo intacto. Sin embargo, el resto de la iglesia sufrió daños. Una vez que el conflicto terminó, el Monasterio fue restaurado. Se construyó un nuevo altar, más impresionante que el original. Esto fue posible gracias a los planos del arquitecto Juan Vidal Ramos y las donaciones de Manuel Prytz. En 1989, se hizo una réplica del arca donde reposaban los restos de Mosén Pedro Mena.