Joaquín Rubio y Muñoz para niños
Datos para niños Joaquín Rubio y Muñoz |
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Información personal | ||
Nacimiento | 1788 Cádiz (España) |
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Fallecimiento | 1874 | |
Nacionalidad | Española | |
Información profesional | ||
Ocupación | Abogado y numismático | |
Miembro de | Real Academia de la Historia | |
Joaquín Rubio y Muñoz (1788-1874) fue un importante abogado y un gran coleccionista español. Se interesó mucho por los objetos antiguos, especialmente las monedas y medallas. También coleccionó libros y manuscritos muy especiales.
Gran parte de su colección de monedas se encuentra hoy en el Museo Arqueológico Nacional de España en Madrid. También hay piezas suyas en otros museos de España y Dinamarca. Por su trabajo y colaboración, el rey Cristián VIII de Dinamarca lo nombró Caballero de la Real y Danesa Orden de Dannebrog.
Contenido
¿Quién fue Joaquín Rubio y Muñoz?
Joaquín Rubio y Muñoz nació el 27 de julio de 1788 en la ciudad de Cádiz, España. Fue bautizado pocos días después en la iglesia de San Antonio. Aunque su nombre completo era largo, él prefería usar la forma más sencilla: Joaquín Rubio.
Orígenes familiares de Joaquín Rubio
Sus padres, Juan Felipe Rubio Egea y Ana Ramona Muñoz de Pedros, se casaron en Cádiz en 1774. Su padre era de Córdoba y su madre de la Villa de Casares, en la provincia de Málaga.
La carrera de Joaquín Rubio como abogado
Joaquín siguió la tradición familiar y se dedicó a la abogacía, como su padre, su hermano y su hijo. Ocupó varios cargos importantes en el ámbito legal. Fue Escribano Público de Número de Cádiz y Secretario del Juzgado de Avenencias del Distrito Consular de Cádiz. También fue Escribano de Cámara Honorario de la Audiencia de Sevilla.
Además de su trabajo como abogado, Joaquín Rubio y Muñoz fue un miembro activo de varias instituciones culturales. Presidió la Diputación de Arqueología de la Provincia de Cádiz. También fue académico de la Real Academia de la Historia, de la Academia Española de Arqueología y de la Academia de Cádiz de Don Alonso el Sabio.
La familia de Joaquín Rubio
En 1823, Joaquín se casó con María Dolores Bosichy Pitaluga en la iglesia de San Lorenzo en Cádiz. Ella era de Cádiz, pero su abuelo era de Grecia. Tuvieron dos hijos: María Dolores Rubio Bosichy y Joaquín Rubio Bosichy.
Su hijo, Joaquín Rubio Bosichy, se casó con María Josefa de Artecona y de Lafuente. Ella se convirtió en Marquesa de Casa Rábago. Su abuela, María Josefa Fernández de Rábago O'Ryan, fue una mujer muy generosa. Dedicó muchos años a establecer educación gratuita para las niñas de Cádiz.
La pasión de Joaquín Rubio por coleccionar
Durante más de cuarenta años, Joaquín Rubio y Muñoz se dedicó a construir una impresionante colección. Su mayor interés eran las monedas antiguas, especialmente las de Cartago, Grecia y Roma. También reunió una valiosa biblioteca privada con libros y manuscritos muy raros.
Gracias a su pasión, Joaquín estuvo en contacto con muchos expertos y coleccionistas. En 1852, Basilio Sebastián Castellanos de Losada, un importante conservador de colecciones reales, lo describió como un "ilustrado anticuario y célebre coleccionista numismático". En 1848, el escritor Adolfo de Castro mencionó varios manuscritos únicos que estaban en la "preciosísima" biblioteca de don Joaquín Rubio.
Amistades y publicaciones
Joaquín Rubio mantuvo correspondencia con importantes figuras de su tiempo. Se conservan quince cartas que le escribió el escritor Bartolomé José Gallardo. Estas cartas, que tratan sobre temas literarios, muestran la buena amistad entre ambos.
En 1845, el ayuntamiento de Cádiz publicó una Historia de la Ciudad de Cádiz del siglo XVI. Joaquín Rubio escribió un apéndice sobre las monedas de Cádiz para esta obra. Las cartas de Gallardo también mencionan que conoció al hijo de Joaquín, Joaquín Rubio Bosichy, cuando este estudiaba derecho en la Universidad Complutense de Madrid en la década de 1840.
Reconocimiento internacional a Joaquín Rubio
El 16 de noviembre de 1847, a los 59 años, Joaquín Rubio y Muñoz fue nombrado Caballero de la Real y Danesa Orden de Dannebrog. Este honor se le concedió por su colaboración con el rey Cristián VIII de Dinamarca. El rey, que también era un gran coleccionista, estaba muy interesado en adquirir monedas raras de la colección de Joaquín.
El destino de su colección
Aunque algunas de las monedas de Joaquín Rubio se encuentran en el Museo Nacional de Dinamarca, la mayor parte de su colección está en el Museo Arqueológico Nacional de España en Madrid. Él mismo transfirió más de 8.000 monedas a este museo durante su vida.
En la década de 1850, el gobierno español mostró interés en adquirir su colección. Se debatió si debería ir al Museo Nacional o al Museo de la Real Academia de la Historia. Joaquín donó algunas monedas raras a la academia, pero la mayoría de su colección (8.298 monedas, incluyendo 190 de oro) fue vendida al Museo Arqueológico Nacional en mayo de 1858.
Joaquín pensó mucho en el futuro de su valiosa colección. Sus hijos no compartían su misma pasión por las monedas. En 1858, a los 70 años, escribió su testamento. Se dio cuenta de que era importante asegurar un lugar permanente y seguro para sus monedas.
A pesar de haber vendido gran parte de su colección, Joaquín no dejó de coleccionar. La Guía de Cádiz de 1871 mencionaba que su colección privada de monedas, aunque había enriquecido a los museos, "¡todavía sigue creciendo!". Joaquín Rubio y Muñoz falleció el 30 de noviembre de 1874, a los 86 años, en la misma ciudad de Cádiz donde había vivido toda su vida.
Véase también
En inglés: Joaquín Rubio y Muñoz Facts for Kids