Segunda destrucción de Concepción para niños
Datos para niños Segunda destrucción de Concepción |
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Guerra de Arauco | ||||
![]() Representación de Lautaro al frente de su Ejército, hacia 1550.
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Fecha | 12 de diciembre de 1555 | |||
Lugar | Concepción, actual Penco, Región del Bío Bío, Chile | |||
Resultado | Victoria mapuche. Nuevamente es destruida la ciudad-fuerte | |||
Beligerantes | ||||
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La Segunda destrucción de Concepción fue un evento importante que ocurrió el 12 de diciembre de 1555. Tuvo grandes consecuencias para los españoles. Este suceso marcó el abandono completo de la región de Araucanía, un proceso que había comenzado después de la batalla de Marihueñu.
Contenido
¿Qué fue la Segunda Destrucción de Concepción?
La ciudad de Concepción en el pasado
La antigua ciudad de Concepción del Nuevo Extremo estaba ubicada donde hoy se encuentra Penco, cerca de la actual Concepción. En febrero de 1554, la ciudad había sido abandonada por Francisco de Villagra. Esto ocurrió porque se esperaba una destrucción inminente después de su derrota en Marihueñu.
La repoblación de la ciudad
Como se temía, Lautaro y sus fuerzas mapuches destruyeron la ciudad por completo. Mientras Villagra intentaba ser nombrado gobernador interino en Santiago, llegó una orden desde Lima. La Real Audiencia (un tribunal importante de la época) mandó repoblar Concepción.
Así, el 24 de noviembre de 1555, la ciudad fue repoblada. Llegaron 68 vecinos españoles, junto con mujeres, niños y yanaconas (personas indígenas que servían a los españoles). Muchos de ellos eran mestizos traídos de Perú. Juan de Alvarado quedó al mando de esta nueva ciudad-fuerte.
El ataque y la destrucción de la ciudad
El asedio de Lautaro
La ciudad apenas tenía un mes de haber sido fundada cuando un grupo de jóvenes guerreros mapuches, llamados conas, liderados por Lautaro, comenzaron a rodearla. Aunque el fuerte tenía menos defensas físicas que la primera vez, contaba con más soldados españoles y muchos más yanaconas para protegerlo.
Además, los españoles habían traído muchos recursos, como ganado y otros objetos de valor. Esto hizo que la ciudad pareciera un objetivo interesante para el toqui (líder militar mapuche) Lautaro. Él decidió construir un gran pucará, que era una fortaleza bien protegida. Su objetivo era evitar una batalla en campo abierto y anular la ventaja de la caballería y las lanzas españolas.
La estrategia de Alvarado y la respuesta mapuche
Pensando que no eran muchos mapuches, Juan de Alvarado atacó rápidamente con unos 50 jinetes y varios yanaconas. Su ataque a caballo se vio limitado por barrancos que protegían el pucará por los lados. Además, los choques contra la empalizada central (una cerca de troncos) facilitaron los golpes de macana (un arma) desde dentro. Esto hizo que los caballos retrocedieran, dejando cuatro españoles fallecidos.
Cuando aparecieron muchos más conas escondidos cerca, Alvarado intentó retirarse. Sin embargo, fue perseguido por grupos de emboscada de Lautaro y por la nueva caballería mapuche. La persecución llegó hasta la misma Concepción, donde todos los españoles, incluyendo mujeres y niños, tuvieron que luchar.
La infantería española, armada con lanzas y arcabuces (armas de fuego), no pudo romper las líneas mapuches. Otros 18 españoles perdieron la vida en la lucha, y comenzó la retirada hacia la costa. Finalmente, Alvarado logró escapar en barcos con los pocos españoles que quedaban. Otros intentaron una retirada desordenada por tierra. Los yanaconas que quedaron defendiendo la ciudad fueron superados por las fuerzas de Lautaro.
Consecuencias de la victoria mapuche
La nueva victoria mapuche se celebró con una fiesta, bebiendo muday (una bebida hecha de maíz o cebada). Aunque no pudieron aprovechar la victoria para avanzar más, obtuvieron un gran botín: caballos, objetos de valor, vacas y hierro.
Por el lado español, los que escaparon contaron diferentes versiones de lo sucedido. Esto causó mucho miedo entre los habitantes de Santiago, quienes pedían una solución rápida a Rodrigo de Quiroga, que estaba a cargo de la ciudad. Otro problema fue la reubicación de los vecinos de Concepción, quienes quedaron en Santiago dependiendo de la ayuda de sus vecinos.