Juan de Herrera, el Trasmerano para niños
Juan de Herrera, el Trasmerano, fue un importante maestro de cantería del siglo XVI. Nació en Gajano, un pueblo de Cantabria, España. Perteneció a la famosa escuela de canteros de Trasmiera. Fue el maestro principal de las obras en la Catedral de Santiago de Compostela, donde construyó la fachada de una parte del claustro, que está a la derecha del Obradoiro.
¿Quién fue Juan de Herrera, el Trasmerano?
Juan de Herrera, el Trasmerano, fue un experto en trabajar la piedra. Su padre fue Alonso González de Herrera. Juan se convirtió en el maestro principal de la Catedral de Santiago de Compostela, tomando el lugar de otro gran arquitecto, Rodrigo Gil de Hontañón.
En el año 1561, Juan de Herrera estaba en Orense. Allí se encargó de arreglar el Puente Mayor y de mover el Castillo. En Santiago, trabajó en el claustro de la Catedral, siguiendo los planos que había hecho Gil de Hontañón.
Proyectos y construcciones importantes

Juan de Herrera también diseñó sistemas para llevar agua a las ciudades. Además, hizo el proyecto para una cárcel. En el año 1570, fue nombrado el maestro principal de todas las obras de la ciudad. En la Catedral, diseñó y construyó la capilla de San Pedro de la Cerca.
En 1572, hizo los planos para el retablo de la capilla del colegio de Fonseca. También preparó las condiciones para las obras en el Monasterio de San Justo de Tojosoutos. Realizó reparaciones en la Catedral de Orense.
Obras en puentes y otros edificios
Juan de Herrera diseñó reparaciones para el Puente de Caldas de Reyes. También trabajó en los puentes de Ledesma y Betanzos. Estaba trabajando en el puente de Betanzos cuando falleció.
Además, trabajó en el palacio de los Gómez de la Torre en Riaño de Ibio. Participó en obras en los Monasterios de Sobrado y Celanova. También construyó el puente de Portomuro. Algunas de sus obras, como las del convento de Monfero, quedaron sin terminar. Es posible que la iglesia de su pueblo natal, Gajano, fuera diseñada por él, aunque no hay pruebas definitivas.
Tuvo un hijo llamado Francisco de Herrera Monasterio. Él también fue arquitecto y trabajó junto a su padre en Asturias.