Historia de la ciudad de Paraná para niños
Paraná es la capital de la provincia de Entre Ríos en la República Argentina. Esta ciudad se fue formando poco a poco durante la época de la colonización española, sin una fecha de fundación oficial. Al principio, era conocida como La Bajada. Más tarde, entre 1854 y 1861, Paraná fue la capital de la Confederación Argentina.
Los primeros europeos en ver la zona de La Bajada del Paraná fueron 130 exploradores de la expedición de Sebastián Caboto a finales de diciembre de 1527. Sus barcos, la Santa Catalina y el San Telmo, habían salido del fuerte de Sancti Spiritu.
Contenido
Primeros asentamientos y desarrollo
La influencia de Santa Fe
El 15 de noviembre de 1573, Juan de Garay en Argentina fundó la ciudad de Santa Fe. Al hacerlo, le dio un gran territorio que incluía la mayor parte de lo que hoy es Entre Ríos. Garay repartió tierras y asignó comunidades indígenas a sus colaboradores, quienes comenzaron a ocupar estas tierras en 1574.
Una de estas tierras, en La Bajada del Paraná, fue entregada a Diego Bañuelos. Más tarde, en 1590, estas tierras pasaron a manos de Hernandarias, y en 1596, la Compañía de Jesús recibió dos terrenos allí.
En 1617, el territorio de Entre Ríos pasó a formar parte de la gobernación del Río de la Plata, una gran región administrada por España.
Acuerdos con pueblos originarios
En 1632, Hernandarias firmó un acuerdo de paz con el líder indígena charrúa Yasú, cuya comunidad vivía cerca de La Bajada. Este acuerdo ayudó a que la población en la zona creciera.
En 1638, los herederos de Juan de Garay recibieron más tierras a lo largo del río Paraná, desde el arroyo Antonio Tomás hasta la Punta Gorda. Parte de estas tierras fueron vendidas a la Compañía de Jesús en 1659, formando la Estancia San Miguel.
En 1662, el gobernador Alonso Mercado y Villacorta también firmó un tratado de paz con otras comunidades indígenas, lo que contribuyó al crecimiento de La Bajada. La población estaba formada por españoles, criollos (nacidos en América), mestizos (de ascendencia mixta) y comunidades indígenas que se habían asentado allí.
El traslado de Santa Fe y el camino del Paraná
En 1649, se decidió trasladar la ciudad de Santa Fe a su ubicación actual. Este proceso fue lento y terminó en 1660. La Bajada, que al principio se llamó Baxada de Santa Fé, se convirtió en un punto clave para quienes viajaban por tierra hacia Corrientes, Paraguay y las Misiones, ya que desde allí partía un camino a lo largo del río Paraná.
Pronto, se establecieron ranchos de ganado en La Bajada, que era un lugar tranquilo y proveía alimentos a Santa Fe.
El siglo XVIII: Crecimiento y organización
Para 1715, La Bajada ya era un asentamiento importante, con más casas a orillas del río. La población crecía gracias a la abundancia de ganado, los suelos fértiles y la relativa calma con las comunidades indígenas. A diferencia de otras ciudades españolas, La Bajada no fue fundada con una ceremonia formal, sino que creció de forma natural.
El corazón de la ciudad
En esta época, las casas se construyeron en las barrancas, que son como pequeñas colinas, formando el centro de la actual ciudad. Se extendía entre tres de estas colinas, donde hoy están las plazas Alvear, Primero de Mayo y Saénz Peña. Esta ubicación era buena para la defensa y tenía un clima más agradable. El asentamiento se organizó como un tablero de ajedrez, con una plaza principal en el centro (la actual plaza 1.º de Mayo).
Defensa y milicias
Debido a ataques de comunidades indígenas, en 1725 se pensó en trasladar la población de Santa Fe a La Bajada. En 1727, se construyó un fuerte en La Bajada para proteger a sus habitantes. En 1729, se formó una compañía de milicias, llamada Compañía del Paraná, para defender la región.
En 1730, el cabildo de Santa Fe, por orden del gobernador Bruno Mauricio de Zabala, decidió construir dos nuevos fuertes en la costa de Entre Ríos. Ese mismo año, la jurisdicción de La Bajada se definió desde el arroyo Paracao hasta el arroyo Las Tunas. El 18 de junio de 1733, Santiago de Hereñú fue nombrado el primer alcalde de hermandad de La Bajada, una especie de autoridad local.
La creación de la parroquia
La atención religiosa en La Bajada la realizaban misioneros. Desde 1725, el sacerdote Miguel de Barcelona oficiaba en una pequeña capilla de la Inmaculada Concepción, donde hoy se encuentra la catedral de Paraná.
El gobernador Zabala pidió que se crearan nuevas parroquias, ya que eran importantes para el desarrollo de los pueblos. Así, el 23 de octubre de 1730, se creó la parroquia de La Baxada del Paraná bajo la protección de la Virgen del Rosario. Aunque no hubo una fundación formal de la ciudad, esta fecha se considera el inicio de su historia oficial. El 25 de octubre de 1730, el gobernador Zabala ordenó que se cumpliera esta decisión.
La creación de la parroquia fue muy importante para organizar estas tierras, que luego se convertirían en la provincia de Entre Ríos. La parroquia se convirtió en un centro religioso, político y administrativo, ayudando al crecimiento de La Bajada y de todo el territorio entrerriano. El primer párroco de esta nueva parroquia fue el presbítero Francisco Arias Montiel.
Nuevos caminos y comunicaciones
Entre 1749 y 1752, el teniente de gobernador de Santa Fe, Francisco Antonio de Vera Mujica, realizó expediciones militares que abrieron el territorio a más asentamientos. Esto permitió crear un segundo camino desde La Bajada, que conectaba Santa Fe con Yapeyú en las Misiones.
El 4 de enero de 1774, se estableció un servicio de correos entre Buenos Aires y Asunción, que pasaba por La Bajada.
En 1776, 50 milicianos de La Bajada fueron enviados a Buenos Aires para apoyar al gobierno.
El 2 de noviembre de 1782, el virrey Juan José de Vértiz y Salcedo encargó a Tomás de Rocamora fundar pueblos en el territorio de Entre Ríos. Rocamora dividió la región en tres zonas, una de ellas la De la Costa del Paraná Grande, que incluía La Bajada.
En 1790, se reorganizaron las milicias, creando la Compañía de milicias de caballería de la Villa del Rosario de la Bajada del Paraná.
El siglo XIX: Villa, ciudad y capital
El 9 de enero de 1810, el virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros decretó que La Bajada fuera una villa, pero esto no se concretó de inmediato.
La Revolución de Mayo y la autonomía
Después de la Revolución de Mayo de 1810, los habitantes de La Bajada reconocieron a la Primera Junta de Gobierno. En la Expedición de Belgrano al Paraguay, Manuel Belgrano llegó a La Bajada el 9 de octubre de 1810 y recibió una gran donación de caballos, destacándose la ayuda de Gregoria Pérez.
El 25 de junio de 1813, la Asamblea del Año XIII decretó que el pueblo de La Bajada se elevara a la categoría de Villa, bajo el nombre de Nuestra Señora del Rosario. También se ordenó la creación de un cabildo, que era como un ayuntamiento local. El 1 de octubre de 1813, se instaló el cabildo de La Baxada, siendo Andrés Pazos su primer alcalde.
El 20 de febrero de 1814, José Eusebio Hereñú, comandante de la villa de Paraná, reconoció a José Artigas como líder de los Pueblos Libres, lo que significó que Entre Ríos se separaba de la autoridad de Santa Fe y se volvía autónoma. Esto llevó a conflictos y cambios de autoridades en la villa.
En diciembre de 1817, Hereñú y otros líderes acordaron que Entre Ríos volviera a unirse a las Provincias Unidas del Río de la Plata. Sin embargo, Francisco Ramírez, un líder de Entre Ríos, derrotó a las fuerzas que apoyaban esta unión en 1818, y José Francisco Rodríguez se convirtió en gobernador de Entre Ríos y comandante de la villa del Paraná.
La República de Entre Ríos y la capital provincial
En 1820, Francisco Ramírez, en desacuerdo con Artigas, proclamó la República de Entre Ríos, que incluía Corrientes y parte de Misiones. Paraná fue uno de los cuatro departamentos de esta República. Tras la muerte de Ramírez, Lucio Norberto Mansilla asumió el mando en Paraná en 1821, y la República de Entre Ríos llegó a su fin, reintegrándose la provincia a la Nación.
El 6 de diciembre de 1821, Mansilla dividió la provincia en dos departamentos principales, siendo uno de ellos el Departamento Principal Nº 1 del Paraná, con cabecera en la villa de Paraná. El 17 de febrero de 1822, el congreso provincial declaró a la villa de Paraná como la capital de toda la provincia de Entre Ríos.
El 26 de agosto de 1826, una ley del Congreso provincial, propuesta por Justo José de Urquiza, elevó a Paraná y a Concepción del Uruguay al rango de ciudades.
Durante las guerras entre unitarios y federales, en 1841, el general José María Paz ocupó Paraná. En 1842, el general Manuel Oribe recuperó Entre Ríos para los federales.
Paraná, capital de la Confederación Argentina
Hacia 1836, la ciudad de Paraná había crecido mucho. Se abrió una calle importante, La Alameda de la Federación, para conectar el centro con el puerto. El censo de 1844 mostró que la ciudad tenía 4811 habitantes y 914 viviendas.
El 13 de abril de 1849, el gobernador Justo José de Urquiza creó el departamento Paraná, con la ciudad de Paraná como su cabecera.
Desde el 24 de marzo de 1854, Paraná fue la capital de la Confederación Argentina. Esto ocurrió porque la provincia de Buenos Aires se había separado de la Confederación. El 29 de septiembre de 1858, el Congreso Nacional decidió que Entre Ríos dejara de ser un territorio federal, pero Paraná y su área cercana siguieron siendo federales y la capital provisional de la Confederación.
El 25 de noviembre de 1860, se instaló la primera municipalidad de Entre Ríos en Paraná, siendo Francisco Soler su presidente. Esta municipalidad se encargaba de mantener el hospital, la cárcel y las escuelas.
Después de la batalla de Pavón, el gobernador Urquiza separó a Entre Ríos de la Confederación. El 2 de diciembre de 1861, Paraná volvió a ser parte de la provincia de Entre Ríos. La municipalidad de Paraná fue suprimida temporalmente hasta que se dictara una nueva ley provincial.
El 13 de mayo de 1872, se sancionó la ley de municipalidades, y el 1 de enero de 1873, se estableció oficialmente la municipalidad de Paraná.
Por decreto del gobernador Eduardo Racedo del 18 de septiembre de 1883, la capital provincial fue trasladada de nuevo a la ciudad de Paraná, lo cual fue confirmado por la reforma de la Constitución provincial de ese año.
Para 1887, la ciudad había crecido más allá de sus límites originales, con la construcción de nuevos edificios y el desarrollo de diferentes zonas.
El siglo XX: Expansión y modernización
El censo de 1914 registró 36.089 habitantes en Paraná. La ciudad contaba con fábricas de fósforos, cemento, cerámica y un matadero, lo que mostraba su buen nivel económico. Varias calles ya estaban pavimentadas e iluminadas. Entre 1940 y 1946, comenzaron a ocuparse los barrios San Agustín y La Floresta, al sur de la ciudad.
En 1956, se colocó la primera piedra del túnel subfluvial Hernandarias (hoy llamado Raúl Uranga-Carlos Sylvestre Begnis). Esta obra fue muy importante para conectar la ciudad y la región.
En la década de 1970, la construcción de nuevas viviendas en las afueras de la ciudad impulsó un crecimiento notable. En los últimos años del siglo XX, se renovó la peatonal San Martín, se construyó una nueva terminal de ómnibus y un nuevo sistema de alcantarillado.
En 1994, Paraná, junto con la ciudad de Santa Fe, fue sede de la Convención que reformó la Constitución Nacional Argentina.
Lista de alcaldes de hermandad
El cabildo de Santa Fe nombró a los alcaldes de la Santa Hermandad para La Bajada desde 1733 hasta 1812. Algunos de ellos fueron:
- 14 de junio de 1733: Santiago de Hereñú
- 1734: capitán Juan Esteban Frutos
- 1735: sargento mayor Juan Antonio de Hereñú y Arteaga
- 1736: capitán Francisco Benítez
- 1737: Carlos Maza
- 1738: Santiago de Hereñú
- 1739: capitán Hermenegildo de Argüello
- 1740: Jacinto Benítez
- 1741: capitán José Carballo
- 1742: Lorenzo Carballo
- 1743: teniente Juan José Sánchez
- 1744: Isidro Sánchez Moreno
- 1745: Diego de Pazos y Figueroa
- 1746: Francisco de Aguilera
- 1747: Juan Basillo Roldán
- 1748: Juan González de Setúbal
- 1749: Jacinto Benítez
- 1750: Bautista Alzugaray
- 1751: José Galindo Ramírez
- 1752: Marcos Rodríguez
- 1754: Bartolomé de Lacoisqueta
- 1755: Francisco de Mota Botello
- 1756: Francisco Silveira
- 1757: Juan de la Canal
- 1758: José Monzón
- 1759: José Monzón
- 1760: Francisco Javier de Crespo
- 1761: Juan González de Setúbal
- 1762: José Ignacio Barrenechea
- 1763: Juan de la Canal
- 1764: José Godoy
- 1765: Juan Broyn de Osuna
- 1766: Félix Troncoso
- 1767: Juan Bautista Martirenia
- 1768: Vicente Hereñú
- 1769: Juan Broyn de Osuna
- 1770: Juan de Setúbal - 17 de enero de 1770: José Monzón
- 1771: José Raimundo Troncoso
- 1772: Pedro Aristimeño
- 1773: Ignacio Echagüe y Andía
- 1774: Félix Troncoso
- 1775: Juan Antonio Rodríguez
- 1776: Santiago Godoy
- 1777: Sebastián Aguirre
- 1778: José Gregorio González
- 1779: José Romero
- 1780: Julián Barrenechea
- 1781: Roque García
- 1782: Sebastián Aguirre
- 1783: Sebastián Aguirre
- 1784: Ramón Hernández
- 1785: Ramón Hernández
- 1786: Ramón Hernández
- 1787: José de la Rosa
- 1788: José de la Rosa
- 1789: José Romero
- 1790: José Seguí
- 1791: Francisco Hernández
- 1792: Bartolomé Seguí
- 1793: Pedro Mendizábal
- 1794: Luis de Sierra
- 1795: Bonifacio Monzón
- 1796: José de la Rosa
- 1797: Sargento Mayor José de la Rosa
- 1798: José Francisco Bracamonte
- 1799: José Francisco Bracamonte
- 1800: José Quintana - Francisco del Valle Herrero
- 1801: Bonifacio Monzón
- 1802: José Ignacio Vera
- 1803: Bernardo José Alonso
- 1804: Manuel Antonio Dávila
- 1805: José Montojo
- 1806: Juan Ignacio de Vera
- 1807: Antonio Bruga
- 1808: Francisco Icart
- 1809: Manuel Islas
- 1810: Manuel Islas (renunció) - Juan Garrigós
- 1812: Santiago Riso (destituido) - Arturo Pasos