Dormancia para niños


La dormancia es un período especial en la vida de muchos seres vivos, como animales y plantas. Durante este tiempo, su crecimiento, desarrollo y actividad se detienen o disminuyen mucho. Esto les ayuda a ahorrar energía y sobrevivir cuando las condiciones del ambiente no son buenas, por ejemplo, si hace mucho frío, calor o hay poca comida o agua.
Los organismos pueden entrar en dormancia de dos maneras:
- Dormancia predictiva: Ocurre cuando el organismo se prepara para las condiciones difíciles antes de que lleguen. Por ejemplo, muchas plantas saben que el invierno se acerca por la cantidad de luz del día o la bajada de temperatura.
- Dormancia consecuente: Sucede cuando el organismo entra en dormancia solo después de que las condiciones difíciles ya han llegado. Esto es común en lugares donde el clima cambia de forma inesperada. Aunque puede ser arriesgado, les permite estar activos más tiempo cuando las condiciones son buenas.
Contenido
¿Cómo se preparan los animales para la dormancia?
Muchos animales tienen formas especiales de entrar en dormancia para protegerse del frío, el calor o la falta de alimento.
Hibernación: El sueño del invierno
La hibernación es una forma de dormancia predictiva que ayuda a muchos animales a sobrevivir el invierno. Antes de hibernar, el animal come mucho para acumular grasa, que le servirá de energía. Durante la hibernación, su corazón late muy lento (hasta un 95% menos) y su temperatura corporal baja mucho.
Algunos animales que hibernan son los murciélagos, las marmotas, otros roedores, y el erizo común europeo.
Diapausa: Una pausa programada
La diapausa es una estrategia de dormancia que está programada en los genes del animal. Es muy común en muchos insectos, que así pueden detener su desarrollo durante el invierno y seguir creciendo en primavera. También ocurre en mamíferos como el corzo europeo, donde el desarrollo del embrión se detiene un tiempo para que la cría nazca en primavera, cuando hay más comida y mejor clima.
Estivación: Descanso en el calor
La estivación es un tipo de dormancia consecuente que ocurre cuando hace mucho calor o hay sequía. Es común en animales pequeños como los caracoles del género Helix y las lombrices de tierra. También la hacen algunos peces, como el pez pulmonado, y mamíferos como el lirón.
Brumación: El reposo de los reptiles
La brumación es la forma de dormancia que tienen los reptiles, parecida a la hibernación. Los reptiles suelen empezar a brumar a finales del otoño. Durante este tiempo, pueden despertarse para beber agua, pero comen muy poco o nada. La brumación puede durar de uno a cuatro meses, dependiendo de la temperatura, la edad y el tamaño del reptil. No es un sueño tan profundo como la hibernación de los mamíferos, ya que su metabolismo no baja tanto. La brumación se activa por el frío y la disminución de las horas de luz.
¿Cómo se preparan las plantas para la dormancia?
En las plantas, la dormancia es un estado de reposo en el que el crecimiento se detiene. Es una estrategia para sobrevivir cuando el clima no es bueno para crecer, como en invierno o durante la estación seca.
Las plantas que entran en dormancia tienen como un "reloj biológico" que les avisa cuándo deben reducir su actividad. Esto ocurre con los días más cortos, la bajada de temperaturas o la falta de lluvia.
Semillas durmientes: Esperando el momento perfecto
Una semilla está "durmiente" cuando no germina (no empieza a crecer) aunque las condiciones sean buenas. Hay dos tipos principales de dormancia en las semillas:
- Dormancia externa: La semilla tiene una cubierta muy dura que no deja que el agua o el oxígeno lleguen al embrión. Así, el embrión no puede activarse.
- Dormancia interna: El problema está en el propio embrión, que no está listo para germinar.
La semilla más antigua que ha logrado germinar y crecer fue una de loto de 1300 años, encontrada en China.
Árboles durmientes: Un descanso necesario
Muchos árboles tienen una dormancia muy marcada. Por ejemplo, si un arce japonés (Acer palmatum) tuviera un "verano eterno" con mucha luz, solo crecería continuamente por un par de años. Después, entraría en dormancia de todas formas, sin importar las condiciones.
Los árboles caducifolias (los que pierden sus hojas) las tiran, y los perennifolias (los que siempre tienen hojas) reducen su nuevo crecimiento. Para que la mayoría de las plantas salgan de la dormancia, necesitan pasar un tiempo con temperaturas bajas, entre 0 °C y 10 °C.
La dormancia en Arabidopsis thaliana

Gracias a la planta Arabidopsis thaliana, que es muy estudiada en ciencia, se han descubierto genes que controlan la dormancia y la germinación.
Esta planta tiene una variación natural en su dormancia, lo que permite a los científicos estudiar cómo se controla. Se ha visto que la etapa más importante para que la dormancia comience es cuando el embrión de la semilla ya está completamente formado y deja de crecer.
Algunos genes clave, como ABI3, FUS3, LEC1 y LEC2, son muy importantes para controlar el desarrollo de la semilla y la dormancia. Cuando estos genes no funcionan bien, las semillas tienen menos dormancia.
También se sabe que una hormona llamada ABA es fundamental en la dormancia. Los genes NCED6 y NCED9 son importantes para producir ABA en la semilla. En las plantas silvestres de Arabidopsis thaliana, los niveles de ABA bajan a medida que la semilla madura, lo que permite que germine. Si se impide que la planta produzca ABA, el período de dormancia desaparece.
Dormancia en los nematodos
Los nematodos son un grupo muy diverso de gusanos, algunos viven en el suelo y otros son parásitos de animales o plantas. Para sobrevivir a los cambios del ambiente, la dormancia, también llamada hipobiosis, es muy importante para ellos.
Si las condiciones son buenas, algunos nematodos completan su vida sin parar. Pero si hay problemas como falta de agua, oxígeno o comida, detienen su desarrollo en una etapa de larva específica. Pueden quedarse en este estado de reposo por semanas o meses, hasta que las condiciones mejoran y retoman su desarrollo. La hipobiosis en nematodos parece estar controlada por una combinación de sus genes y el ambiente.
Dormancia en los virus
Los virus de la familia Herpesviridae son conocidos por su capacidad de permanecer "durmientes" dentro de las células de un ser vivo, como los humanos. Un ejemplo es el virus de la varicela, que muchos años después puede causar la culebrilla.
La dormancia de los virus se conoce más comúnmente como latencia o infección latente. El virus VIH también puede producir una infección latente en los linfocitos, y en este estado se le llama provirus.
Véase también
En inglés: Dormancy Facts for Kids