Castillo de Tíscar para niños
El Castillo de Tíscar es una antigua fortaleza que se encuentra cerca del Santuario de la Virgen de Tíscar. Está situado en una zona rocosa, a unos 13 km al sur de la localidad de Quesada, en la provincia de Jaén (España). Este castillo es muy importante por su valor histórico y artístico, por eso está protegido como un Bien de Interés Cultural desde el año 1949.
¿Cómo es el Castillo de Tíscar?
El Castillo de Tíscar es un lugar no muy grande. Tiene una pequeña torre del homenaje, que es la torre principal y más fuerte de un castillo, ubicada en su lado este.
Materiales de construcción del castillo
Fue construido con una técnica llamada tapial, que usa tierra prensada, y también con mampuesto, que son piedras sin trabajar unidas con mortero. Las paredes del castillo se apoyan en las rocas naturales del lugar, cerrando los espacios entre ellas. En el centro del castillo hay una gran roca llamada «Peña Negra». Es posible que esta roca funcionara como una pequeña fortaleza dentro del castillo.
Origen y antigüedad del castillo
Se cree que las paredes del castillo son de la época de Al-Ándalus, cuando los musulmanes vivían en esta parte de España. Sin embargo, los expertos piensan que la torre principal fue construida en la primera mitad del siglo XIV, poco después de que los castellanos (cristianos) conquistaran la zona.
Historia del Castillo de Tíscar
El Castillo de Tíscar fue una fortaleza muy importante en la época musulmana. Muchos escritores de ese tiempo, como Al-Razi y Al-Idrisi, hablaban de lo difícil que era conquistarlo. Durante casi cien años, fue un punto clave para el Reino nazarí de Granada (el último reino musulmán en la península ibérica) en la zona de Cazorla. Desde aquí, se lanzaban ataques hacia Quesada.
La conquista del castillo por el infante Pedro
En mayo de 1319, el infante Pedro de Castilla conquistó el castillo de Tíscar. El infante Pedro era hijo del rey Sancho IV de Castilla y de la reina María de Molina. Él era uno de los tutores del joven rey Alfonso XI de Castilla. Algunos historiadores han debatido si el castillo conquistado era este o uno con el mismo nombre en otra provincia. Sin embargo, la mayoría de los expertos, basándose en los relatos de la época, creen que se refieren a esta fortaleza en Jaén.
El asedio y la estrategia del infante Pedro
Las crónicas de la época, como la Crónica y la Gran Crónica de Alfonso XI, cuentan cómo fue la conquista. En mayo de 1319, el infante Pedro estaba en Úbeda con importantes líderes militares y religiosos. Le pidió a Mahomad Handon, el señor de Tíscar, que se uniera al rey Alfonso XI. Le envió esta propuesta con dos mensajeros, Pero Joan de Berrio y Ramos de Xérez, quienes también tenían la misión secreta de averiguar cómo conquistar el castillo.
Pero Mahomad Handon respondió al infante Pedro con orgullo:
E aquel cavallero moro llamado Mahomad Handon enbio a decir al ynfante don Pedro que bien sabia el en como no obedesçia a moro ni a christiano, e que mas queria el ser libre y sin tributo ninguno que non tributario.
Esto significa que Mahomad Handon prefería ser libre y no pagar impuestos a nadie.
Al escuchar esto, el infante Pedro decidió conquistar el castillo. Ordenó a sus tropas que se prepararan con comida para doce días. Para engañar a los defensores, hizo correr la voz de que iban a otro lugar, no a Tíscar. Los castellanos comenzaron a marchar en una dirección diferente, pero luego cambiaron de rumbo y se dirigieron al castillo. La Crónica de Alfonso XI dice que el infante Pedro se sorprendió mucho al ver lo fuerte que era la fortaleza. Comenzó el asedio usando máquinas de guerra.
La toma de la Peña Negra y la victoria
Las fuertes defensas del castillo hicieron que la conquista fuera difícil y lenta. El infante Pedro y sus hombres tuvieron que luchar como soldados de a pie durante los trece días que duró el asedio. Poco después, un hombre valiente llamado Pero Fidalgo, que era muy bajito, escaló de noche la «Peña Negra» junto con otros hombres. Esta roca estaba al lado del castillo y la defendían diez soldados. Al amanecer, Pero Fidalgo y sus hombres atacaron a los musulmanes que la custodiaban, los vencieron y tomaron la roca.
Cuando el infante Pedro se enteró, ordenó a sus tropas que atacaran la villa de Tíscar, y la conquistaron.
Al ver que los cristianos habían tomado la Peña Negra y la villa, Mahomad Handon, el señor de Tíscar, decidió entregar el castillo. Pidió al infante Pedro que les permitiera a él y a los musulmanes que quedaban salir con todas sus pertenencias. El infante Pedro aceptó, ya que no quería quedarse más tiempo allí. Permitió que las 4.500 personas que vivían en Tíscar salieran y garantizó su seguridad hasta que llegaron a Baza. Un mes después de esta victoria, el 25 de junio de 1319, los infantes Pedro y Juan murieron en un combate conocido como el Desastre de la Vega de Granada.
El castillo en los años siguientes
El 13 de junio de 1321, los tutores del rey Alfonso XI ordenaron que los habitantes de Tíscar, Quesada y otros lugares cercanos pagaran los gastos para mantener sus castillos y torres de vigilancia. Si no lo hacían, sus bienes serían confiscados. Años después, el 1 de junio de 1329, el rey Alfonso XI, ya mayor de edad, dio un documento para que los habitantes de Tíscar y otros castillos de la frontera no tuvieran deudas. Esto ayudaba a que la gente quisiera vivir en esos lugares y los defendiera.
El 28 de noviembre de 1335, el rey Alfonso XI entregó el castillo de Tíscar al ayuntamiento de Úbeda para que lo poblaran y defendieran, dándoles también algunos privilegios. El 6 de febrero de 1336, el rey Alfonso XI concedió a Úbeda dinero y trigo cada año para el mantenimiento del castillo de Tíscar durante 15 años. Dos años después, el 15 de septiembre de 1338, el rey ordenó que se diera más dinero a Úbeda para el trabajo en los castillos de Tíscar, Quesada y Albanchez.