Acción de Prats de Llusanés para niños
Datos para niños Acción de Prats de Llusanés |
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Parte de Tercera guerra carlista | ||||
Fecha | 6 de mayo de 1874 | |||
Lugar | Prats de Llusanés, Barcelona (![]() |
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Resultado | Victoria discutida | |||
Beligerantes | ||||
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Comandantes | ||||
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Fuerzas en combate | ||||
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La Acción de Prats de Llusanés fue un importante enfrentamiento militar. Ocurrió entre los carlistas y las fuerzas del gobierno durante la Tercera Guerra Carlista. Este evento tuvo lugar el 6 de mayo de 1874 en Prats de Llusanés, una localidad de Barcelona, España.
Contenido
¿Qué pasó antes de la batalla?
La llegada de Alfonso de Borbón
El 29 de abril de 1874, Alfonso de Borbón llegó a España. Él era hermano de Don Carlos, líder de los carlistas. Su objetivo era tomar el mando de las tropas carlistas.
Fue recibido con gran entusiasmo el 3 de mayo en Vich. Esto mostró la fuerza y el apoyo que tenían los carlistas en la zona.
Preparativos del gobierno
Para controlar la situación y ayudar a la ciudad de Berga, el gobierno dio una orden. Las brigadas militares de Esteban y Cirlot debían ir a Berga.
El 5 de mayo, estas fuerzas llegaron a Berga. Primero, desalojaron a los carlistas y destruyeron sus defensas. Después de ayudar a la guarnición de Berga, las tropas se dirigían hacia Santa Coloma de Queralt e Igualada.
El descubrimiento de las fuerzas carlistas
Mientras avanzaban, el comandante Esteban se enteró de algo importante. En Prats de Llusanés había un grupo de unos 1500 carlistas. Él llevaba un convoy con las familias de los oficiales que habían sido relevados.
Esteban avisó a Cirlot y se dirigió hacia Prats. Poco después, descubrió que las fuerzas carlistas eran mucho mayores. Había unos 7000 hombres, liderados por Rafael Tristany, esperándolos en la sierra de Grau. Esta sierra se encuentra al noroeste de Prats.
¿Cómo se desarrolló la batalla?
El avance de las tropas
La columna del comandante Esteban avanzó con cuidado desde Olva. Cruzaron el río Marlés sin ser atacados, aunque ya estaban cerca de los carlistas. Poco después, la brigada de Cirlot se unió a ellos, llegando desde Caserras.
El lugar de la batalla era un terreno difícil. Al frente, estaba la sierra del Grau, una posición alta y dominante. A los lados, había laderas empinadas. Detrás, estaba el río Marlés, que era difícil de cruzar por sus orillas inclinadas. Los carlistas ocupaban las posiciones más altas y fuertes de la sierra.
El plan de ataque
El comandante Esteban, al ser el de mayor rango, tomó el mando. Ordenó a Cirlot que atacara el lado izquierdo y el centro de los carlistas. Cirlot avanzaría por el camino principal hacia Prats.
Mientras tanto, Esteban atacaría el lado derecho de los carlistas. Él iría por una zona baja conocida como la Hondonada del Infierno.
El combate intenso
Los carlistas ya se habían movido hacia su lado derecho. Querían rodear el lado izquierdo de los liberales y capturar su artillería. Sin embargo, se concentraron aún más cuando vieron que la brigada de Cirlot amenazaba su lado izquierdo.
Después de dos horas de una lucha muy intensa, la brigada Cirlot logró subir a las alturas de Prats. También tomaron la ermita de San Sebastián. Luego, avanzaron por el llano al norte del pueblo.
Cirlot se dirigió a ayudar a la brigada de Esteban. Esteban había encontrado una gran resistencia al atacar el flanco izquierdo carlista.
La retirada carlista
Los carlistas estaban muy debilitados y temían ser rodeados por Cirlot. Después de defender el llano por un tiempo, se retiraron rápidamente. Se dirigieron por el Coll de Plana hacia Alpens.
Alfonso de Borbón y su esposa María de las Nieves habían presenciado parte de la batalla y se retiraron con ellos.
Después del combate
Las fuerzas liberales pasaron la noche del 6 de mayo en Prats. Había tantos heridos que no había suficiente espacio para todos. El 9 de mayo, marcharon a Vich, llevando consigo a muchos de los heridos que pudieron transportar.
¿Qué pasó después de la batalla?
El regreso de prisioneros
En el combate de Prats, más de 100 prisioneros de la columna de Nouvilas regresaron a las filas liberales. La mayoría de ellos llevaban sus armas.
La reputación de Don Alfonso
Aunque los carlistas afirmaron haber ganado la batalla, la reputación militar de Don Alfonso se vio afectada. Esta acción no fue favorable para su imagen como líder militar.