Semana Trágica (España) para niños
Datos para niños Semana Trágica |
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![]() Miembros de la Guardia civil arrestando a civiles durante la Semana Trágica
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Fecha | 26 de julio de 1909-2 de agosto de 1909 | |||
Lugar | Barcelona (España) | |||
Acción | Disturbios, huelgas, barricadas, incendios provocados y enfrentamientos | |||
Casus belli | Oposición al servicio militar obligatorio y la guerra de Melilla Oposición a la participación militar Oposición a la influencia religiosa en la sociedad |
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Beligerantes | ||||
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Arrestados: 1.700
Heridos: 441 Muertes: De 104 a 150 civiles y 8 militares. Cinco civiles más fueron ejecutados después de los disturbios. |
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La Semana Trágica fue un periodo de intensos disturbios y protestas que ocurrieron en Barcelona y otras ciudades de Cataluña entre el 26 de julio y el 2 de agosto de 1909. Estos eventos violentos comenzaron debido a la decisión del gobierno de Antonio Maura de enviar tropas de reserva a la guerra de Melilla. Esta medida causó mucho descontento, ya que la mayoría de los reservistas eran padres de familia de las clases trabajadoras. Los sindicatos organizaron una huelga general, y el ejército respondió con fuerza para controlar los disturbios.
Contenido
¿Qué fue la Semana Trágica de Barcelona?
La Semana Trágica fue un levantamiento popular en Barcelona, España, que duró una semana. Fue un momento de gran tensión social y política, donde la gente protestó contra la guerra y las desigualdades sociales.
El contexto de España a principios del siglo XX
A principios del siglo XX, España estaba pasando por un momento difícil. Había perdido sus últimas colonias importantes, como Cuba y Puerto Rico, en la guerra hispano-estadounidense de 1898. Esto causó una crisis económica y política en el país.
Durante el reinado de Alfonso XIII, el gobierno se alternaba entre dos partidos principales: el conservador y el liberal. Este sistema se conocía como "turnismo". El rey también tenía mucha influencia en la política, especialmente en temas militares. Las elecciones a menudo eran manipuladas para asegurar que los partidos se alternaran en el poder.
En Cataluña, surgió un movimiento llamado Solidaridad Catalana en 1906. Era una unión de diferentes grupos políticos que buscaban un cambio. Su gran victoria en las elecciones de 1907 mostró que la gente quería un sistema más justo.
Además, los trabajadores españoles empezaron a organizarse en sindicatos. El movimiento obrero español se hizo muy fuerte en las zonas industriales, sobre todo en Barcelona. Allí nació el sindicato Solidaridad Obrera, que unía a socialistas, anarquistas y republicanos.
¿Por qué estalló la Semana Trágica? Causas principales
Después de perder sus colonias, España buscó expandir su influencia en África. En 1904 y 1906, obtuvo control sobre una zona del norte de Marruecos, conocida como el Rif. Más tarde, en 1912, se estableció allí un protectorado español.

El 9 de julio de 1909, hubo un ataque a los trabajadores que construían un ferrocarril en Melilla, cerca de unas minas de hierro. Este incidente marcó el inicio de la guerra de Melilla. Al día siguiente, el 10 de julio, el gobierno de Antonio Maura ordenó movilizar a tres brigadas de reserva, incluyendo una de Cataluña.
La orden de movilización fue muy mal recibida por la gente común. En esa época, la ley permitía a los ricos evitar ir a la guerra pagando para que otra persona fuera en su lugar o pagando una gran suma de dinero. Esto significaba que los hijos de familias adineradas no iban al frente, mientras que los trabajadores, muchos de ellos padres de familia y únicos proveedores de sus hogares, eran obligados a ir. Un trabajador ganaba muy poco al día, por lo que pagar para no ir a la guerra era imposible para ellos.
Desde el 10 de julio, hubo muchas protestas contra la guerra en periódicos, mítines y manifestaciones. El gobierno intentó prohibir algunas de estas reuniones. En algunas ciudades, la salida de las tropas fue muy tensa. El 23 de julio, el gobierno prometió una pequeña pensión diaria a las esposas e hijos de los reservistas movilizados.
En Barcelona, los primeros embarques de tropas en el puerto, el 11 de julio, transcurrieron sin problemas. Pero el 18 de julio, la situación cambió. Cuando un batallón de soldados se preparaba para embarcar, algunos soldados arrojaron al mar objetos que les habían dado. La gente en los muelles gritaba:
¡Abajo la guerra! ¡Que vayan los ricos! ¡Todos o ninguno!
La policía tuvo que intervenir. Las protestas aumentaron cuando llegaron noticias de muchas bajas entre los soldados españoles en Marruecos. El 22 de julio, los políticos de Solidaridad Catalana pidieron al gobierno que debatiera sobre la guerra y el reclutamiento. El gobernador de Barcelona prohibió una reunión de Solidaritat Obrera que iba a decidir una huelga general. A pesar de la prohibición, un comité secreto de huelga convocó un paro de 24 horas para el lunes 26 de julio, lo que dio inicio a la Semana Trágica.
¿Cómo se desarrollaron los eventos? Cronología de la Semana Trágica
Lunes, 26 de julio: El inicio de la huelga
La huelga comenzó en los barrios industriales de Barcelona. Los manifestantes quemaron las casetas donde se cobraban impuestos impopulares. Luego, los trabajadores se dirigieron al centro de la ciudad, donde hubo disturbios. Intentaron detener los tranvías y obligaron a cerrar tiendas y cafés. El capitán general de Cataluña declaró el "estado de guerra". Barcelona quedó paralizada, sin servicios básicos como gas y luz, y sin comunicación con el exterior. Una manifestación de mujeres y niños fue dispersada con disparos. A partir de ese momento, la protesta se convirtió en una insurrección. Esa noche, el primer edificio religioso fue incendiado.
La huelga y los disturbios se extendieron a muchas localidades de Cataluña, especialmente en las provincias de Barcelona y Gerona. En algunas ciudades, como Sabadell, la situación se volvió una verdadera insurrección, con la formación de juntas revolucionarias y la proclamación de la República. Se cortaron las comunicaciones y se incendiaron edificios religiosos.
Martes, 27 de julio: La escalada de la violencia
En Barcelona, se levantaron cientos de barricadas y se asaltaron armerías. La violencia se dirigió contra iglesias y propiedades religiosas, especialmente conventos y escuelas. Muchos edificios religiosos fueron incendiados. En algunos casos, los bienes y las personas fueron respetados, pero en la mayoría hubo saqueos y destrucción. Algunos religiosos perdieron la vida. La violencia contra la Iglesia fue muy fuerte, especialmente durante la "noche trágica" del martes al miércoles, cuando ardieron muchos edificios. En estos eventos participaron obreros y jóvenes del Partido Republicano Radical, que tenían una fuerte oposición a la influencia de la Iglesia.
La protesta inicial contra la guerra se transformó en una protesta contra la Iglesia, con el incendio de iglesias, conventos y escuelas religiosas. Esto fue el resultado de años de ideas que culpaban a la Iglesia de muchos problemas del país. La gente creía que las órdenes religiosas eran muy ricas y competían injustamente con los trabajadores.
Las noticias de Marruecos sobre el desastre del Barranco del Lobo, donde murieron muchos reservistas, avivaron aún más la insurrección.
Miércoles, 28 de julio: Llegan los refuerzos
Barcelona amaneció con humo de los edificios religiosos incendiados. La violencia continuó, con enfrentamientos entre los manifestantes y las fuerzas del orden. Los incidentes más graves ocurrieron en el barrio de San Andrés de Palomar. Sin embargo, este día comenzaron a llegar los primeros refuerzos militares de otras ciudades, a quienes se les había dicho que iban a reprimir un movimiento "separatista".
Del jueves, 29 de julio, al domingo, 1 de agosto: El fin de la revuelta
Unos 10.000 soldados fueron ocupando la ciudad de Barcelona. La moral de los manifestantes disminuyó al darse cuenta de que la rebelión no se había extendido al resto de España. Entre el viernes y el sábado, la ciudad fue recuperando la normalidad, excepto en algunos barrios donde continuaron los enfrentamientos y los incendios. El domingo, los periódicos volvieron a publicarse. El lunes 2 de agosto, los trabajadores de Barcelona regresaron a sus empleos. En otras localidades catalanas, la normalidad no se recuperó hasta el 5 de agosto.
¿Cuáles fueron las consecuencias de la Semana Trágica?
Los disturbios en Barcelona dejaron un total de 78 personas fallecidas (75 civiles y 3 militares), alrededor de 500 heridos y 112 edificios incendiados, de los cuales 80 eran religiosos. El gobierno de Maura inició una represión muy dura. Se detuvo a miles de personas, de las cuales 2000 fueron juzgadas. Hubo 175 condenas a destierro, 59 a cadena perpetua y 5 a muerte. Además, se cerraron sindicatos y escuelas laicas.
Las cinco personas condenadas a muerte fueron: Josep Miquel Baró, Antonio Malet Pujol, Clemente García, Eugenio del Hoyo y Francisco Ferrer Guardia, un pedagogo anarquista.
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Francisco Ferrer Guardia (ejecutado el 13 de octubre de 1909)
El caso de Francisco Ferrer Guardia

Aunque los sucesos de la Semana Trágica no tuvieron consecuencias políticas inmediatas, la situación cambió en septiembre debido a una gran campaña internacional de protesta por la condena a muerte de Francisco Ferrer Guardia. Fue acusado de ser el principal responsable de los disturbios, y fue ejecutado el 13 de octubre, a pesar de muchas peticiones para que se le perdonara la vida. La propia hija de Ferrer le escribió una carta al rey Alfonso XIII pidiendo clemencia para su padre.
Muchos historiadores consideran que las pruebas contra Ferrer eran insuficientes para culparlo de ser el líder de los anarquistas españoles.
Durante meses, la prensa mundial se centró en España, mostrando una imagen de un país atrasado. Hubo protestas en muchas ciudades de Europa y América, donde la gente manifestaba su descontento por la ejecución de Ferrer.
La caída del gobierno de Maura

La protesta internacional por el "caso Ferrer", que no tuvo tanto impacto en España, fue aprovechada por el Partido Liberal para hacer campaña contra el gobierno de Maura. El 20 de septiembre, el PSOE se unió a esta oposición.
El 18 de octubre de 1909, hubo un fuerte debate en el Congreso de los Diputados. El líder liberal, Segismundo Moret, pidió la dimisión del gobierno de Maura. El 22 de octubre, Maura presentó su dimisión al rey, quien la aceptó. El rey nombró a Moret como nuevo presidente del gobierno.
El rey Alfonso XIII lamentó la "falsa interpretación" que se había dado de los sucesos de Barcelona y se mostró dolido por la imagen que se había proyectado de España.
Películas relacionadas
- La ciudad quemada, (dirigida por Antoni Ribas, 1976)
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Tragic Week (Spain) Facts for Kids