Luisa de Marillac para niños
Datos para niños Santa Luisa de Marillac |
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![]() Retrato de santa Luisa de Marillac
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Información personal | |||
Nacimiento | 12 de agosto de 1591 París |
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Fallecimiento | 15 de marzo de 1660 París |
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Nacionalidad | Francesa | ||
Religión | Catolicismo | ||
Familia | |||
Padre | Louis de Marillac | ||
Cónyuge | Antoine Le Gras (desde 1613) | ||
Información profesional | |||
Ocupación | Monja y enfermera | ||
Información religiosa | |||
Beatificación | 9 de mayo de 1920 | ||
Canonización | 11 de marzo de 1934 | ||
Festividad | 15 de marzo | ||
Atributos | Con un libro y una niña | ||
Patronazgo | Niños abandonados o huérfanos, viudas, patrona de obras sociales (1960) | ||
Orden religiosa | Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl | ||
reconocimientos
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Luisa de Marillac (nacida en París el 12 de agosto de 1591 y fallecida en la misma ciudad el 15 de marzo de 1660) fue una mujer muy importante en la historia de la ayuda social. Junto a Vicente de Paúl, fundó las Hijas de la Caridad. Esta congregación se dedicó a cuidar a las personas que más lo necesitaban.
Luisa de Marillac mejoró mucho la forma en que se atendía a la gente en los hospitales, orfanatos y centros de ayuda en la Francia de su tiempo. La Iglesia católica la declaró santa en 1934. Su día especial se celebra el 9 de mayo.
Contenido
¿Quién fue Luisa de Marillac?
Sus primeros años y familia
Luisa nació en París en una familia noble de la región de Auvernia. Su padre fue Louis I de Marillac, un caballero y señor de Ferrières-in-Brie. Luisa no conoció a su madre y su padre falleció cuando ella tenía solo trece años.
Su abuelo fue Guillaume de Marillac y su tío, Michel de Marillac, la tomó bajo su cuidado. Desde muy joven, Luisa vivió en el monasterio real de Poissy, cerca de París.
Su camino hacia el servicio
En 1604, Luisa viajó a París con su tía. Allí, su tío Michel de Marillac, quien más tarde sería un importante canciller de Francia, se convirtió en su tutor. Luisa aprendió a manejar una casa y se unió a grupos que buscaban mejorar la vida religiosa en la capital.
Quería unirse a una comunidad religiosa y prometió servir a Dios y a los demás. Sin embargo, debido a su salud delicada, no fue aceptada por las religiosas capuchinas.
Un matrimonio y una visión especial
En 1623, Luisa tuvo una experiencia muy significativa durante una misa. Sintió que debía quedarse con su esposo por un tiempo. También tuvo la visión de que en el futuro podría hacer votos de pobreza, castidad y obediencia. Además, vio que estaría en una pequeña comunidad donde otras mujeres harían lo mismo.
Esta visión le hizo sentir que sería guiada por un nuevo director espiritual, que sería Vicente de Paúl. Dos años después, su esposo falleció. Luisa se sintió libre para dedicarse por completo a su deseo de servir a la religión. Escribió sus propias "Reglas de Vida en el Mundo".
La colaboración con San Vicente de Paúl
Un guía espiritual
Vicente de Paúl se convirtió en el guía espiritual de Luisa en 1625. Durante los siguientes ocho años, se comunicaron mucho a través de cartas y encuentros. En 1632, Luisa hizo un retiro para reflexionar sobre su siguiente paso.
Comprendió que había llegado el momento de salir al mundo para ayudar a los pobres y necesitados. Al mismo tiempo, debía mantener una vida espiritual profunda. Luisa se sintió lista para esta misión y le contó sus ideas a Vicente.
La fundación de las Hijas de la Caridad
En el siglo XVII en Francia, la ayuda a los pobres estaba muy desorganizada. Muchas personas sufrían por la falta de cuidados o por las malas condiciones en los hospitales. Las "Damas de la Caridad", fundadas por Vicente de Paúl años antes, ofrecían algo de ayuda, pero no era suficiente.
A principios de 1633, Luisa se encargó de organizar esta ayuda. Las Damas de la Caridad tenían dinero, pero no siempre el tiempo o la disposición para vivir entre los pobres. Luisa, con el acuerdo de Vicente, reunió en su casa a jóvenes humildes. Estas jóvenes tenían la energía y la actitud adecuadas para ayudar.
Con un grupo de cuatro jóvenes, Luisa comenzó a prepararlas. Les enseñó a cuidar a los necesitados y a desarrollar una vida espiritual profunda. Les decía: "Amar a los pobres y honrarlos como honrarían al propio Cristo". Así nació la congregación de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul.
El impacto de su trabajo
El trabajo de Luisa con estas jóvenes mejoró el sistema de atención en el Hôtel-Dieu, el hospital más antiguo y grande de París. Su labor fue reconocida y las Hermanas fueron invitadas a Angers para organizar el hospital de allí. Este fue el primer proyecto de la nueva comunidad fuera de París.
Luisa hizo el difícil viaje a Angers con tres hermanas. Allí, logró que médicos, enfermeras y otros profesionales trabajaran juntos como un equipo. Bajo la dirección de Luisa de Marillac, las Hermanas extendieron su servicio. Ayudaron en hospitales, orfanatos, instituciones para ancianos y personas con enfermedades mentales. También trabajaron en prisiones, escuelas y en el campo de batalla, ayudando a las víctimas de la Guerra de los Treinta Años.
En poco tiempo, Luisa de Marillac fundó nuevas comunidades en treinta ciudades de Francia y Polonia. Algunas de estas ciudades fueron París, Richelieu, Angers, Sedan, Nantes y Metz. Luisa continuó su trabajo con las Hijas de la Caridad hasta casi los setenta años.
Luisa de Marillac falleció el 15 de marzo de 1660, unos seis meses antes que Vicente de Paúl. Fue declarada santa en 1934 por el Pío XI. Es la santa patrona de los trabajadores sociales y cuidadores, un título que le dio el papa Juan XXIII en 1960. Sus restos se conservan en el Altar Mayor de la Capilla de la Casa-Madre de las Hijas de la Caridad, en París.
Galería de imágenes
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Urna con los restos de Santa Luisa de Marillac en la Rue du Bac, de París.
Véase también
En inglés: Louise de Marillac Facts for Kids