Puente Viejo de Manresa para niños
Datos para niños Puente Viejo de Manresa |
||
---|---|---|
Bien de interés cultural Bien Cultural de Interés Nacional |
||
![]() |
||
Ubicación | ||
País | ![]() |
|
Comunidad | ![]() |
|
Provincia | ![]() |
|
Localidad | Manresa | |
Coordenadas | 41°43′15″N 1°49′48″E / 41.72083333, 1.83 | |
Características | ||
Tipo | Puente y Puente de estilo gótico | |
Cruza | Cardener | |
N.º de vanos | 8 | |
Largo | 113 m | |
Luz | 25 m | |
Historia | ||
Estilo | Arquitectura gótica | |
Construcción | 1960 - 1962 | |
Bien de interés cultural Patrimonio histórico de España |
||
Categoría | Monumento | |
Código | RI-51-0001253 | |
Declaración | 23 de diciembre de 1955 | |
Mapa de localización | ||
El Puente Viejo es una construcción histórica que cruza el río Cardener en la ciudad de Manresa, en Cataluña, España. Este puente es muy importante para la ciudad y ha sido reconstruido varias veces a lo largo de la historia.
Se cree que su origen es romano, pero el puente que vemos hoy es una reconstrucción fiel de un puente medieval. De aquel puente medieval, que también fue reconstruido en el siglo XII, solo se conservan las bases de su arco central. El puente actual fue dañado en 1939 y reconstruido entre los años 1960 y 1962. Tiene ocho arcos y su punto más alto está a 25 metros sobre el río.
En 1956, el Puente Viejo fue declarado monumento histórico artístico. Esto significa que es un Bien de Interés Cultural en la categoría de monumento, lo que ayuda a protegerlo y conservarlo.
Junto con la Basílica de Santa María y la Cueva de San Ignacio, el Puente Viejo forma una de las imágenes más reconocibles y bonitas de Manresa.
¿Qué historias se cuentan sobre el Puente Viejo?
Hay una leyenda interesante sobre el Puente Viejo de Manresa. Se cuenta que, hace mucho tiempo, unas criaturas traviesas se instalaron bajo el puente y molestaban a todas las personas que pasaban por allí.
Los líderes de Manresa, preocupados, pensaron que si pedían unas reliquias especiales de un santo, las criaturas se irían. Así que pidieron las reliquias de San Valentín a los monjes del monasterio de San Benito de Bages. Después de mucho insistir, los monjes se las prestaron.
Cuando las reliquias fueron llevadas bajo el Puente Viejo, las criaturas se asustaron y huyeron para siempre. Los líderes de Manresa quedaron tan impresionados que decidieron no devolver las reliquias. Sin embargo, un día las reliquias desaparecieron misteriosamente y nadie volvió a verlas en la ciudad.
Tiempo después, una joven pastora que cuidaba sus animales encontró las reliquias en una colina, entre unas plantas espinosas, cerca de San Fructuoso de Bages. La pastora las llevó a las autoridades de la iglesia. Para recordar este hallazgo, se construyó una pequeña capilla en ese lugar.