Masía el Espinar para niños
La Masía el Espinar es una antigua finca fortificada que pertenece a una familia. Se encuentra en el municipio de Liria, en Valencia, España. Este gran edificio está en las primeras montañas al norte de Liria, cerca de la carretera que va a Alcublas.
Contenido
Historia de La Masía el Espinar
Orígenes como monasterio
Al principio, La Masía el Espinar fue construida para ser un monasterio de la Orden de los Jerónimos.
La Reina Germana de Foix y su conexión
Doña Germana de Foix, quien era sobrina del rey de Francia Luis XII y la segunda esposa de Fernando el Católico, falleció aquí el 8 de noviembre de 1536. Tenía 48 años en ese momento. Ella y su último esposo, el Duque de Calabria, tenían una relación especial con los monjes jerónimos.
Los monjes construyeron una residencia junto al monasterio. Así, la Reina Germana tenía un lugar tranquilo para descansar y recibir cuidados, especialmente cuando estaba enferma.
La placa conmemorativa
En el patio exterior de la masía hay una placa. Esta placa recuerda que la Reina Germana falleció allí. También dice que cien monjes jerónimos llevaron sus restos en procesión hasta el Monasterio de San Miguel de los Reyes. Allí descansa junto a su tercer esposo, el duque.
La placa actual no es la original. La primera fue destruida durante un conflicto importante en España. En ese tiempo, la masía se usó como hospital militar. Sin embargo, los dueños se encargaron de colocar una nueva placa después.
Encima de la puerta principal de la casa, todavía se puede ver el escudo del Duque de Calabria. Este escudo es una prueba de la historia de este edificio.
Cambios en el siglo XVIII
La masía tuvo un momento de gran esplendor en el siglo XVIII. En esa época, el Reino de Valencia creció mucho económicamente. Esto hizo que aparecieran personas con mucho dinero. Uno de ellos fue Antonio Vázquez, un comerciante de carne de Valencia. Él se hizo rico abasteciendo a la ciudad.
Entre 1752 y 1767, Antonio Vázquez compró muchas hectáreas de terreno en Liria. Entre ellas, adquirió la masía. Era una costumbre de la gente rica de Valencia comprar grandes fincas agrícolas cerca de la ciudad. Este propietario hizo grandes reformas en el lugar. Le dio la apariencia que tiene hoy en día.
En 1769, Antonio Vázquez tuvo problemas económicos y la masía fue embargada. El ayuntamiento de Valencia la vendió al monasterio Jerónimo de San Miguel de los Reyes.
Nuevos dueños en el siglo XIX
A principios del siglo XIX, durante las desamortizaciones del Trienio Liberal, el monasterio fue quitado a los monjes. Primero se alquiló, y en 1821, el militar Manuel Bas la compró. En 1822, pasó a manos de Pedro Pablo Casabonne, un comerciante y nieto de Antonio Vázquez. Él fue el dueño hasta 1833.
Luego, la masía fue vendida al industrial catalán José Bonaplata. Él la tuvo hasta el 18 de diciembre de 1883. En esa fecha, la vendió a don Jacinto Gil de Avalle y González Larrinaga. Desde finales del siglo XIX, la masía pertenece a los marqueses de Pescara. La han cuidado muy bien, manteniendo aspectos de su pasado como monasterio y fortaleza.
La hermosa construcción está rodeada de un gran jardín y un pequeño bosque. Se encuentra en medio de una moderna finca de almendros.
Características actuales
La Masía el Espinar es una de las llamadas masías fortificadas. Hoy en día, conserva parte de su muro y dos pequeñas torres de vigilancia. También mantiene las antiguas cuadras, que ya no se usan. Las taquillas de madera, que antes usaban los muchos empleados de la finca, tampoco se utilizan. El patio, donde está la placa conmemorativa, aún tiene su suelo empedrado.