Silo (Mario Rodríguez) para niños
Datos para niños Silo |
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Silo en 2007
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Información personal | ||
Nombre de nacimiento | Mario Luis Rodríguez Cobos | |
Otros nombres | Silo | |
Nacimiento | 6 de enero de 1938 Mendoza (Argentina) |
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Fallecimiento | 16 de septiembre de 2010 Mendoza (Argentina) |
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Nacionalidad | Argentino | |
Familia | ||
Cónyuge | Ana Luisa Cremaschi | |
Hijos | Federico Rodríguez (2010) y Alejandro Rodríguez | |
Información profesional | ||
Ocupación | Escritor, fundador del Movimiento Humanista | |
Sitio web | ||
Mario Luis Rodríguez Cobos, conocido como Silo, fue un escritor argentino. Nació el 6 de enero de 1938 en Mendoza, Argentina, y falleció en la misma ciudad el 16 de septiembre de 2010. Fue el fundador del Movimiento Humanista.
Silo fue un orador muy activo y escribió muchos libros, cuentos y artículos. Sus escritos trataban sobre la sociedad, la forma de pensar de las personas, la espiritualidad y otros temas importantes. Aunque él se consideraba un escritor, muchas personas lo ven como un gran pensador.
Contenido
¿Quién fue Silo?
Sus primeros años y estudios
Silo fue el tercer y último hijo de una familia de clase media en Mendoza, Argentina. Sus padres eran Rafael Rodríguez, un experto en vinos de Granada, España, y María Luisa Cobos, una maestra de música de origen vasco.
Desde pequeño, Silo fue un estudiante brillante. Cursó la escuela primaria y secundaria con excelentes calificaciones. También practicaba gimnasia artística, destacándose en el "caballo con arcos" y llegando a ser campeón regional.
Además de sus estudios, Silo participaba en grupos juveniles y tenía una vida social y de aprendizaje muy activa. Estudió idiomas como francés e italiano, y también filosofía por su cuenta. Publicó artículos en revistas culturales.
Después de estudiar Derecho por un tiempo, viajó por varios países de América Latina. Más tarde, estudió Ciencias Políticas y Sociales en la Universidad Nacional de Cuyo. Allí, comenzó a formar grupos para investigar sobre el ser humano y los desafíos de la vida en sociedad.
El inicio de sus ideas
En 1967, Silo empezó a compartir sus ideas y formó grupos de estudio en Argentina y Chile. El 4 de mayo de 1969, a los 31 años, dio su primera charla pública. Fue en Punta de Vacas, un lugar en la cordillera de los Andes cerca del cerro Aconcagua, en la provincia de Mendoza.
En esa charla, conocida como «La curación del sufrimiento», habló sobre cómo superar el dolor, el sentido de la vida y la importancia de la no violencia. Hoy, en ese lugar, existe un Parque Histórico, uno de los muchos lugares dedicados a sus enseñanzas.
Silo se casó con Ana Luisa Cremaschi, a quien conocía desde joven. Tuvieron dos hijos, Alejandro y Federico, y siempre vivieron en su ciudad natal.
El Movimiento Humanista
En 1972, Silo publicó su libro La mirada interna. Sus grupos de estudio comenzaron a crecer y a extenderse a otros países. A principios de los años setenta, Silo creó una forma de pensar llamada Nuevo Humanismo o Humanismo Universalista.
También fundó el Movimiento Humanista. Este movimiento busca poner en práctica esas ideas, que abarcan tanto la vida personal como la social.
A partir de los años ochenta, el Movimiento Humanista se expandió por el mundo. Se crearon varias organizaciones, como el Partido Humanista (presente en unos 30 países), la Comunidad para el Desarrollo Humano (una asociación cultural), Convergencia de las Culturas (una asociación civil), Mundo sin Guerras y sin Violencia (una asociación que busca la paz) y el Centro Mundial de Estudios Humanistas.
En 1981, Silo fue invitado a dar charlas en varias ciudades de Europa y Asia, como Madrid, Roma, Berlín, Bombay (India) y Colombo (Sri Lanka). También visitó París, San Francisco y la Ciudad de México. En estas charlas, destacó la importancia de la no violencia, la superación del sufrimiento y el trato amable entre las personas. Sus ideas de este período se recopilaron en el libro Habla Silo.
En 1993, la Academia de Ciencias de Rusia le otorgó un reconocimiento especial, el doctorado honoris causa, por sus importantes contribuciones al pensamiento.
Sus últimos años y legado
A principios de 2002, Silo anunció que se retiraba de la dirección del Movimiento Humanista, después de haberlo impulsado por 32 años.
A mediados de 2002, lanzó El mensaje de Silo, que incluye un libro, una experiencia y un camino. También impulsó la construcción de lugares llamados Parques de Estudio y Reflexión en varios países, como Argentina, Chile, España, Estados Unidos, Italia, India y Egipto. Estos parques se construyen con donaciones voluntarias.
En la década de 2000, Silo volvió a dar charlas en Punta de Vacas y en otros lugares más sencillos, como casas de familia o salones de barrio. También asistió a las inauguraciones de varios Parques de Estudio y Reflexión.
Una de sus últimas charlas públicas fue en Berlín el 11 de noviembre de 2009. Fue invitado por los premios Nobel de la Paz para hablar en su Cumbre Mundial. Allí, Silo pidió el desarme nuclear mundial, es decir, que los países eliminen sus armas nucleares, como una urgencia principal para la paz.
Silo pasó sus últimos años en Chacras de Coria, cerca de Mendoza. Falleció en su casa el 16 de septiembre de 2010, a causa de una enfermedad renal.
Aunque él se definía como escritor, sus seguidores lo veían como un guía. Silo se refería a sí mismo como alguien que practicaba una "espiritualidad interna".
¿Qué pensaba Silo?
Sobre la mente humana
Silo le dio mucha importancia a cómo nuestra mente interpreta el mundo. Él explicaba que lo que vemos, oímos o sentimos no es solo una copia de la realidad. Nuestra mente organiza esas sensaciones y crea "imágenes" o representaciones.
Para Silo, estas imágenes no son pasivas, sino que nos ayudan a entender y a cambiar el mundo. Decía que la mente es activa y que siempre estamos transformando lo que percibimos. También hablaba de un "espacio mental" donde se organizan todas nuestras representaciones, como una pantalla interna.
Silo no creía en las ideas de "inconsciente" o "subconsciente" como se entendían antes. En cambio, se enfocaba en cómo funcionan los impulsos, los diferentes niveles de conciencia y cómo respondemos a lo que nos pasa.
Sobre el ser humano
Silo tenía una forma especial de entender al ser humano. Él decía que las personas somos seres "históricos", lo que significa que cambiamos y nos transformamos a lo largo del tiempo. Nuestra forma de actuar en sociedad también cambia nuestra propia naturaleza.
Explicaba que los seres humanos hemos usado herramientas para extender nuestras capacidades, como si fueran "prótesis" de nuestro cuerpo. Hemos aprendido a movernos en el agua y en el aire, e incluso a viajar fuera de la Tierra. También mencionó que podemos influir en nuestro propio cuerpo y en nuestra forma de pensar.
Para Silo, la acción de los humanistas busca reducir el dolor y aumentar el bienestar. Los humanistas no se basan en ideas fantasiosas, sino en las necesidades reales de la vida. El ser humano es capaz de aprender del pasado y planificar el futuro para mejorar su situación.
Sobre la espiritualidad
Silo creía que cada persona tiene el derecho de decidir si cree o no en la inmortalidad y en lo sagrado. Para él, este tema es muy importante porque influye en cómo cada uno vive su vida.
Explicaba que la inmortalidad puede significar diferentes cosas para distintas personas:
- Para algunos, se refiere a las acciones que hacemos en vida y que siguen teniendo un impacto después de nuestra muerte.
- Para otros, es el recuerdo que dejamos en nuestros seres queridos o en la sociedad.
- Y para otros, es la idea de que nuestra existencia personal continúa en otro nivel después de la muerte física.
En cuanto a lo sagrado, Silo decía que también se interpreta de varias maneras:
- Algunos sienten que lo más sagrado es el amor profundo por sus hijos u otros seres queridos.
- Otros consideran que el ser humano y sus derechos universales son sagrados.
- Y algunos experimentan a la divinidad como la esencia de lo sagrado.
Silo enfatizaba que todas estas formas de pensar sobre la inmortalidad y lo sagrado deben ser respetadas, no solo toleradas.
Libros importantes
Silo escribió muchos libros que fueron traducidos a varios idiomas. Aquí algunos de ellos:
- 1969: Manual del poder joven
- 1979: La mirada interna
- 1981: El paisaje interno
- 1989: Humanizar la Tierra (que incluye La mirada interna, El paisaje interno y El paisaje humano)
- 1989: Experiencias guiadas
- 1991: Contribuciones al pensamiento
- 1993: Cartas a mis amigos
- 1996: Diccionario del Nuevo Humanismo
- 2008: El mensaje de Silo