Francisco Martín de Alcántara para niños
Datos para niños Francisco Martín de Alcántara |
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Información personal | ||
Nacimiento | Siglo XV Trujillo (Corona de Castilla) |
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Fallecimiento | 26 de junio de 1541jul. Lima (Perú) |
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Nacionalidad | Española | |
Información profesional | ||
Ocupación | Explorador | |
Francisco Martín de Alcántara (nacido en Trujillo, Cáceres, antes de 1500 – fallecido en Lima, Perú, el 26 de junio de 1541) fue un explorador español. Fue el medio hermano de Francisco Pizarro, uno de los líderes más importantes en la exploración del Perú. Martín de Alcántara fue un consejero clave para Pizarro durante los primeros años de este periodo histórico.
Contenido
¿Quién fue Francisco Martín de Alcántara?
Francisco Martín de Alcántara era hijo de Francisca Alcántara. Era medio hermano de Francisco Pizarro por parte de madre. Pizarro llevó a Martín de Alcántara con él a la expedición al Perú en 1535.
Martín de Alcántara se convirtió en una persona de mucha confianza para Pizarro. Lo asesoraba en todos los asuntos importantes relacionados con la expedición.
Su vida en el Perú
Después de que la expedición se estableció en Perú, Martín de Alcántara y su esposa, Inés Muñoz, vivieron en Lima. Su casa estaba cerca de la gran residencia de su hermano Francisco Pizarro.
Una de sus tareas principales era cuidar y educar a sus sobrinos. Estos eran los hijos que Francisco Pizarro tuvo con dos princesas incas. Hoy en día, existen descendientes de Martín de Alcántara.
El conflicto con los Almagristas
Hubo un gran conflicto entre Diego de Almagro y Francisco Pizarro. Después de estos eventos, Pizarro intentó hacer las paces con el joven Diego de Almagro, hijo de su antiguo socio.
Sin embargo, el joven Almagro no aceptó la amistad. Él quería vengarse de Pizarro, a quien consideraba responsable de la muerte de su padre. Los seguidores del joven Almagro también querían venganza.
Francisco Pizarro recibió muchas advertencias de que querían acabar con su vida. Pero él no les dio importancia. Pensaba que los almagristas no se atreverían a atacarlo.
La visita de Juan de Rada
Unos días antes de la festividad de San Juan, Juan de Rada y otros cuatro hombres visitaron a Francisco Pizarro. En realidad, fueron a espiar el lugar para planear un ataque.
Pizarro le preguntó a Rada por qué quería hacerle daño al joven Almagro. Pizarro juró que no tenía nada contra Almagro. Dijo que, al contrario, le habían advertido que Almagro quería acabar con él.
Después de que Pizarro les ofreciera unas naranjas de su huerto, las primeras cosechadas en esa tierra, Rada se despidió. Pizarro le dijo amablemente que si necesitaba algo, él lo ayudaría.
Cuando la reunión terminó, Rada y sus compañeros salieron de la casa de Pizarro. Fueron a contar a los almagristas lo que había pasado. Calcularon sus posibilidades y planearon cómo atacar. Decidieron acabar con Pizarro cuando estuviera en la iglesia, durante la misa del día de San Juan.
Advertencias ignoradas
Uno de los conspiradores reveló el plan al sacerdote de la iglesia principal. El sacerdote se lo comunicó de inmediato a Pizarro.
Pero Pizarro no lo creyó. Dijo que había hablado con Rada y que la persona que había denunciado el plan quizás solo quería perjudicar a Rada. A pesar de las advertencias, Francisco Pizarro no fue a misa el día de San Juan. Sin embargo, no tomó en serio las amenazas y descuidó la seguridad de su casa y de sí mismo.
El ataque final
Al terminar la misa, el teniente Francisco de Chaves y otros amigos fueron a comer a casa de Pizarro. Rada, al ver que Pizarro no había ido a misa, decidió atacarlo en su propia casa.
Escogió a once de sus hombres más valientes y se dirigieron a la casa de Pizarro. Gritaban por la calle: "¡Muera el tirano…! ¡Muera el traidor!".
Cuando Francisco Pizarro escuchó los gritos, comprendió que la amenaza era real. Le pidió al teniente Francisco de Chaves que protegiera la entrada del salón con unos veinte hombres que lo acompañaban. Mientras tanto, Pizarro buscaba su espada.
Cuando escuchó pasos en la escalera, Chaves abrió la puerta para intentar detener a los hombres de Rada. Pero un golpe certero lo hizo caer por las escaleras.
Al ver al teniente herido, los que lo acompañaban huyeron. Se descolgaron por las ventanas hacia el huerto. Solo quedaron siete sirvientes en la sala. Dos fueron heridos y los otros cinco perdieron la vida.
Pizarro salió de su habitación y le dijo a Martín de Alcántara que se defendiera. Pero ya era demasiado tarde. Un golpe dejó a Martín de Alcántara en el suelo, mientras Pizarro se defendía con gran valentía.
Mientras Francisco Pizarro atacaba a uno de sus oponentes, los otros hombres de Rada lo rodearon. Le dieron un golpe en la garganta. Francisco Pizarro perdió la vida en esa habitación. Antes de morir, besó una cruz que había dibujado en el suelo con su propia sangre. Era el día de San Juan, el 26 de junio de 1541.