Crisis de mayo de 1941 para niños
La crisis de mayo de 1941 fue un momento de tensión política durante el gobierno de Francisco Franco en España. Ocurrió porque el Ejército y algunos grupos que apoyaban la monarquía estaban preocupados por el aumento de poder de Ramón Serrano Suñer y del partido único de ese momento, llamado FET y de las JONS. Estos grupos querían que el gobierno se pareciera más a otros sistemas políticos autoritarios de la época.
Al final, la crisis hizo que algunos ministros del partido único entraran al gobierno. Sin embargo, Serrano Suñer perdió el control del importante Ministerio de la Gobernación. Este ministerio fue ocupado por el coronel Valentín Galarza, quien no estaba de acuerdo con las ideas del partido único. El puesto que Galarza dejó fue ocupado por el capitán de navío Luis Carrero Blanco, quien fue un colaborador muy cercano de Franco hasta su fallecimiento en 1973.
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¿Qué pasó antes de la crisis de mayo de 1941?

Mientras algunos países europeos tenían éxitos militares, el gobierno de Franco en España empezó a adoptar más ideas de sistemas políticos autoritarios. Esto fue impulsado por Serrano Suñer, quien también era Ministro de Asuntos Exteriores.
El gobierno controlaba la información y los medios de comunicación. El partido único se encargó de la propaganda y creó una gran red de periódicos y radios. También se organizó a la sociedad a través de varias organizaciones:
- El Frente de Juventudes: Creado para formar a los jóvenes.
- El Sindicato Español Universitario (SEU): Para organizar a los estudiantes universitarios.
- La Sección Femenina: Su objetivo era educar a las mujeres con ciertos valores.
También se creó una organización para trabajadores y empresarios llamada Organización Sindical Española (OSE). Todos los trabajadores y empresarios debían afiliarse a ella. Esta organización estaba controlada por el partido único y buscaba la cooperación entre clases, no la lucha.
En septiembre de 1939, el Sindicato Español Universitario obtuvo el control exclusivo de la organización de estudiantes. Esto afectó a grupos católicos que también querían organizar a los estudiantes. El cardenal Isidro Gomá protestó, pero su escrito fue prohibido. Aunque después se publicó un resumen. Franco se reunió con el cardenal y acordó que las asociaciones católicas podrían seguir existiendo y que se daría formación religiosa en las organizaciones del gobierno.
En enero de 1940, Franco aprobó una nueva ley para los sindicatos. Esta ley establecía que la organización sindical se basaría en la unidad, la totalidad y la jerarquía. Algunos obispos no estuvieron de acuerdo con esta ley, ya que la consideraban contraria a las enseñanzas católicas.
¿Cómo se desarrolló la crisis política?
A finales de abril de 1941, el general Juan Vigón le dijo a Franco que si no se limitaba el poder de Serrano Suñer, él y otros ministros militares renunciarían. La preocupación de quienes se oponían a Serrano Suñer aumentó cuando, el 1 de mayo, se decidió que la prensa del partido único no estaría sujeta a la censura general.
Al día siguiente, Serrano Suñer dio un discurso en el que criticó a Gran Bretaña y propuso que el partido único tuviera todo el poder. También sugirió a Franco que nombrara a más ministros del partido único, como José Antonio Girón de Velasco para el Ministerio de Trabajo. Franco aceptó, pero empezó a creer las advertencias de los militares sobre las "ambiciones" de Serrano Suñer.
Así, el 5 de mayo, Franco nombró al coronel Valentín Galarza, un militar de su confianza y que no apoyaba al partido único, al frente del Ministerio de la Gobernación. Este ministerio había estado sin un ministro oficial desde octubre de 1940, pero Serrano Suñer lo seguía controlando a través de un colaborador.
El puesto que dejó Galarza fue ocupado por el capitán de navío Luis Carrero Blanco. Una de las primeras decisiones de Galarza fue cambiar al director general de Seguridad, que era una persona de confianza de Serrano Suñer. También destituyó a muchos gobernadores civiles que apoyaban a Serrano Suñer.
Después del nombramiento de Galarza, apareció un artículo en el periódico Arriba que se refería a Galarza de forma poco respetuosa. Como resultado, los autores del artículo fueron destituidos de sus puestos en el departamento de Prensa y Propaganda. Además, Galarza encargó a un periodista que escribiera un artículo en respuesta, que se publicó el 12 de mayo. Este artículo se burlaba de la idea de que los miembros del partido único opinaran sobre política exterior, lo que era un ataque directo a Serrano Suñer.
Serrano Suñer respondió presentando su renuncia. Franco le envió una carta diciéndole que no veía motivos para su dimisión y le pidió que reconsiderara su decisión, ya que podría dañar a España. Franco temía que, si Serrano Suñer se iba, quedaría a merced de los generales que apoyaban la monarquía. También pudo influir el hecho de que Serrano Suñer estaba casado con la hermana de la esposa de Franco.
Franco se reunió con otros líderes del partido único que también habían renunciado en solidaridad y los convenció para que siguieran en el gobierno o aceptaran otros puestos. Así, Girón de Velasco siguió en el Ministerio de Trabajo, y otros ocuparon las carteras de Agricultura y la secretaría del partido único con rango de ministro. Además, se creó una nueva oficina dentro del partido único que se encargaría de la Prensa y Propaganda, dejando de ser responsabilidad del Ministerio de la Gobernación. Finalmente, Serrano Suñer retiró su renuncia.
¿Qué consecuencias tuvo la crisis?

En su momento, se pensó que la crisis se había resuelto a favor de Serrano Suñer, pero en realidad fue el comienzo de su pérdida de influencia, que se haría más evidente al año siguiente. Franco se dio cuenta de que Serrano Suñer era más leal a sus propias ambiciones para el partido único que a él mismo. La resolución de la crisis significó que el partido único, FET y de las JONS, se volvió más "franquista". Además, esta crisis hizo que Luis Carrero Blanco, quien no apoyaba al partido único, entrara en la escena política como subsecretario de la Presidencia del Gobierno, un cargo que mantuvo hasta su fallecimiento en diciembre de 1973.
El cambio del partido único hacia una línea más "franquista" se confirmó en septiembre de 1941, cuando el líder de la Organización Sindical Española fue destituido. Una de las razones de su destitución fue un acuerdo que había firmado para enviar trabajadores a Alemania. Franco también decidió liberar a un antiguo líder del partido único, Manuel Hedilla, para calmar los ánimos de algunos miembros. Hedilla había estado en prisión desde 1937 por no aceptar una ley de unificación.
A finales de ese año, Franco, presionado por los militares y otros grupos del gobierno, frenó un proyecto de ley impulsado por Serrano Suñer que copiaba el sistema político de la Italia de la época. Este proyecto decía que el Estado español era un instrumento al servicio de la Patria y que todo su poder debía servir a este fin.
Véase también
- Anexo:Tercer Gobierno de España durante la dictadura franquista (1941-1942)