Cormorán mancón para niños
Datos para niños
Cormorán mancón |
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![]() Ejemplar de la isla Isabela
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Estado de conservación | ||
![]() Vulnerable (UICN) |
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Taxonomía | ||
Reino: | Animalia | |
Filo: | Chordata | |
Clase: | Aves | |
Orden: | Suliformes | |
Familia: | Phalacrocoracidae | |
Género: | Phalacrocorax | |
Especie: | P. harrisi (Rothschild, 1898) |
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Distribución | ||
![]() |
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Sinonimia | ||
Nannopterum harrisi |
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El cormorán mancón o cormorán de las Galápagos (Phalacrocorax harrisi) es un ave muy especial. Vive solo en las islas Galápagos, un lugar famoso por su fauna única. Lo más sorprendente de este cormorán es que, a diferencia de otras aves, ¡no puede volar! Es el único cormorán en el mundo que ha perdido esta habilidad.
Durante muchos años, los científicos lo clasificaron en un grupo aparte. Sin embargo, hoy en día se considera parte del género Phalacrocorax, donde están todos los demás cormoranes. Con una población de unos 1500 individuos, es una de las aves más raras del planeta. Por eso, existen programas para ayudar a protegerlo.
Contenido
¿Cómo es el Cormorán Mancón?
Características Físicas del Cormorán de Galápagos
Como todos los cormoranes, esta ave tiene patas con membranas entre los dedos. Sus patas son fuertes y le ayudan a impulsarse en el agua. Así, puede buscar su alimento, que incluye peces, anguilas y pulpos pequeños. Generalmente, busca comida cerca del fondo del mar, a no más de 100 metros de la orilla.
El cormorán mancón es el cormorán vivo más grande. Mide entre 89 y 100 centímetros de largo y pesa entre 2.5 y 5 kilogramos. Sus alas son muy pequeñas, solo un tercio del tamaño que necesitaría para volar. El hueso del pecho, donde se unen los músculos para volar, también es más pequeño.
Su cuerpo es de color negruzco en la parte de arriba y pardusco en la parte de abajo. Tiene un pico largo y curvado en la punta. Sus ojos son de un bonito color turquesa. Los machos suelen ser un poco más grandes que las hembras, pero no hay muchas diferencias entre ellos. Las crías y los jóvenes se parecen a los adultos, pero su plumaje es más brillante y tienen ojos oscuros. El sonido que hacen los adultos es como un gruñido suave.
¿Por qué no vuelan los Cormoranes Mancones?
Las plumas de estos cormoranes no son impermeables, como las de otras aves. Por eso, después de cada zambullida, pasan mucho tiempo secándose al sol. Sus plumas de las alas y la cola son parecidas a las de otros cormoranes. Sin embargo, las plumas que cubren su cuerpo son más gruesas, densas y suaves, casi como un vello. No producen mucho aceite para impermeabilizar sus plumas. En cambio, el aire que queda atrapado en su denso plumaje es lo que evita que se empapen.
¿Dónde Vive el Cormorán Mancón?
Distribución y Hábitat Natural
Este cormorán tan especial solo vive en las islas Galápagos. Su hogar es muy limitado. Se encuentra únicamente en dos islas: Isla Fernandina, sobre todo en la costa este, y en Isla Isabela, en las costas norte y oeste.
La cantidad de cormoranes mancones ha cambiado mucho a lo largo del tiempo. Por ejemplo, en 1983, un evento climático llamado El Niño redujo su población a la mitad, dejando solo unos 400 individuos. Afortunadamente, la población se recuperó rápido, y en 1999 ya había 900 cormoranes.
Esta especie vive en las orillas rocosas de las islas volcánicas. Busca su alimento en las aguas cercanas a la costa. Rara vez se aleja más de 1 kilómetro del lugar donde se reproduce.
¿Cómo se Reproducen?
Ciclo de Vida y Cuidado de las Crías
Los cormoranes mancones suelen anidar en los meses más fríos, de julio a octubre. En esta época, hay más alimento en el mar y las crías no sufren tanto por el calor. Forman grupos de unas 12 parejas para anidar.
El cortejo comienza en el mar. El macho y la hembra nadan uno alrededor del otro, moviendo sus cuellos como serpientes. El nido es grande y está hecho de algas marinas. Lo construyen un poco más arriba de la línea de la marea. El macho añade "regalos" al nido, como trozos de cuerda o tapones de botellas.
La hembra pone generalmente tres huevos blanquecinos en cada puesta. Sin embargo, casi siempre solo sobrevive una cría. Tanto el macho como la hembra se encargan de incubar los huevos. Después de que nacen los polluelos, ambos padres los alimentan y protegen. Si hay mucha comida, la hembra puede irse a buscar otra pareja después de que las crías se vuelven independientes. El macho se queda para terminar de cuidar a los polluelos. Las hembras pueden reproducirse hasta tres veces al año. Esto ayuda a que la población de cormoranes mancones se recupere rápidamente después de desastres naturales.
¿Cómo se Protege al Cormorán Mancón?
Amenazas y Esfuerzos de Conservación
Estos cormoranes evolucionaron en islas donde no tenían depredadores naturales. Como no tenían enemigos y podían cazar fácilmente en las aguas cercanas, perdieron la capacidad de volar. Sin embargo, cuando los humanos llegaron a las islas, trajeron consigo animales como perros, gatos y cerdos, que se convirtieron en nuevos depredadores. Además, los cormoranes no le tienen miedo a las personas, lo que los hace vulnerables.
Antes, los perros eran una gran amenaza en Isabela, pero ya han sido eliminados de la isla. La llegada de gatos o ratas a Fernandina sería un gran peligro. La pesca con redes también es una amenaza. No solo reduce la comida disponible para los cormoranes, sino que a menudo las aves quedan atrapadas en las redes y mueren.
El cormorán mancón es muy vulnerable debido a sus características únicas, su pequeña población y su hábitat limitado. Los desastres ambientales, como los derrames de petróleo, los eventos climáticos extremos (como El Niño, que son cada vez más fuertes) y la llegada de enfermedades o nuevos depredadores, son grandes riesgos para ellos.
Por todas estas razones, el cormorán mancón es una de las aves más raras del mundo. Todas las poblaciones de esta especie viven dentro del Parque Nacional de las Galápagos y la Reserva Marina. Además, las Galápagos fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad en 1979. A pesar de estas protecciones, la especie se considera vulnerable. La Estación de Investigaciones Charles Darwin vigila su población con frecuencia para asegurar su supervivencia.