Asamblea Nacional Consultiva para niños
Datos para niños Asamblea Nacional Consultiva |
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![]() Escudo de España en 1927
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![]() El Palacio de las Cortes fue la sede del organismo.
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Localización | ||
País | España | |
Información general | ||
Jurisdicción | España | |
Tipo | Cámara corporativa | |
Sede | Palacio de las Cortes, Madrid | |
Organización | ||
Presidente | José de Yanguas Messía | |
Composición | 429 Miembros | |
Historia | ||
Fundación | 1927 | |
Disolución | 1930 | |
La Asamblea Nacional Consultiva fue un grupo de personas importantes en España que se creó durante el gobierno del general Miguel Primo de Rivera, mientras reinaba Alfonso XIII de España. Su objetivo principal no era crear leyes como un parlamento, sino dar ideas y consejos al gobierno.
Este grupo debía preparar un plan de leyes importantes en un plazo de tres años. La Asamblea comenzó sus reuniones el 10 de octubre de 1927 y terminó el 15 de febrero de 1930. Se reunían en el Palacio de las Cortes en Madrid.
Fue la primera vez en Europa, entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial, que se formó una asamblea de este tipo, llamada "corporativa". Esto significa que sus miembros representaban a diferentes grupos de la sociedad, como trabajadores, empresas o profesiones. La Asamblea se dividió en dieciocho secciones, cada una con once miembros elegidos por el presidente. La sección más importante era la Primera, encargada de preparar los "Proyectos de Leyes Constituyentes", que eran propuestas para leyes fundamentales del país. Entre los 429 miembros, se incluyeron 15 mujeres.
Contenido
Historia de la Asamblea Nacional Consultiva
¿Cómo surgió la Asamblea?

En diciembre de 1925, el general Miguel Primo de Rivera finalizó la etapa de su gobierno militar. En ese momento, se recuperaron los cargos de presidente y ministros, pero el general mantuvo un gran poder para crear leyes. Las Cortes (el parlamento) seguían cerradas y la Constitución de 1876 (la ley fundamental del país) no se aplicaba por completo.
En esta nueva etapa, conocida como "Directorio Civil", el gobierno quería organizar la sociedad y el Estado de una forma diferente, con más control y un sistema "corporativo".
La idea de un nuevo parlamento
En julio de 1926, la Unión Patriótica (un grupo que apoyaba al gobierno) propuso crear un parlamento "corporativo". Este parlamento se basaría en la representación de la familia, los municipios y las provincias.
El 4 de septiembre, la Unión Patriótica pidió al gobierno que convocara este parlamento. También solicitaron una consulta pública, un tipo de votación, para saber si la gente estaba de acuerdo con la creación de una "Asamblea Suprema Nacional" que ayudara al gobierno.
Al día siguiente, Miguel Primo de Rivera anunció que el sistema parlamentario tradicional no funcionaba bien. Aceptó la idea de una "Suprema Asamblea nacional temporal" para construir una "España nueva".
La consulta pública de 1926
Entre el 11 y el 13 de septiembre de 1926, se realizó una consulta pública. Hubo una gran campaña para apoyar al gobierno, con la participación de la Iglesia y el Ejército. En esta consulta, las personas mayores de 18 años no votaron, sino que firmaron documentos para mostrar su apoyo al general.
Más de la mitad de la población con derecho a participar (unos 7,4 millones de personas) lo hizo. El periódico ABC comentó que hubiera preferido una votación más amplia y efectiva para volver a un sistema constitucional.
El 13 de septiembre de 1926, Primo de Rivera anunció que el nuevo parlamento tendría la misión de preparar un plan de leyes importantes en tres años. Este plan se presentaría al gobierno y, más adelante, se consultaría a la gente. También se mencionó un "proyecto de leyes constituyentes". Sin embargo, el rey no quería que esta asamblea creara una nueva Constitución directamente. Esa tarea quedaría para otro organismo o para una votación popular.
La creación oficial de la Asamblea
Según la historiadora Genoveva García Queipo de Llano, con esta consulta pública, Primo de Rivera quería demostrar que tenía el apoyo de la gente. Así, buscaba convencer al rey para que aceptara la creación de la Asamblea Nacional Consultiva, que no sería elegida por votación popular.
El rey Alfonso XIII se resistió durante un año, pero en septiembre de 1927, finalmente firmó el decreto para convocarla. El Real Decreto-ley del 12 de septiembre de 1927 decía claramente que la Asamblea "no ha de ser un Parlamento, no legislará, no compartirá soberanías". Su función sería la de "órgano de información, controversia y asesoramiento de carácter general que colaborará con el Gobierno".
En la primera sesión, el 10 de octubre de 1927, el presidente José Yanguas Messía explicó que la Asamblea no reemplazaría al parlamento. Dijo que la Constitución de la Monarquía estaba suspendida en algunas partes, pero no eliminada. La misión de la Asamblea sería doble: supervisar y aconsejar al gobierno, y preparar proyectos de leyes fundamentales.
El historiador Eduardo González Calleja señala que esta asamblea era temporal y no buscaba crear un nuevo sistema de gobierno. Sin embargo, su existencia mostraba que el gobierno no era solo provisional, sino que buscaba establecer un sistema con más control.
Ausencia de algunos grupos
Los socialistas decidieron no participar en la Asamblea. Al principio, fue porque los puestos se les asignaron sin elección. Aunque Primo de Rivera luego aceptó que fueran elegidos por su propio sindicato (UGT), los socialistas mantuvieron su negativa. Indalecio Prieto fue uno de los que más se opuso. Por otro lado, las universidades, que tenían cada vez más diferencias con el gobierno, tampoco enviaron representantes.
Miembros de la Asamblea
La Asamblea era un organismo "corporativo", lo que significa que sus miembros representaban a diferentes grupos de la sociedad. Dependía completamente del gobierno. Sus miembros eran elegidos por los ayuntamientos, las diputaciones provinciales, la Unión Patriótica, y también incluía a representantes del gobierno, el ejército, la justicia, la Iglesia, el trabajo, el comercio, la cultura y las artes.
De los 429 miembros, solo 71 habían sido diputados o senadores en parlamentos anteriores. La mayoría eran políticos menos conocidos.
Podían ser miembros de la Asamblea hombres y también "mujeres solteras, viudas o casadas". Las mujeres casadas necesitaban la autorización de sus maridos, siempre que estos no fueran ya miembros de la Asamblea. En octubre de 1927, el gobierno nombró a 15 mujeres, aunque dos de ellas renunciaron. Entre 1928 y 1930, se unieron otras tres mujeres. Muchas de ellas eran maestras o nobles. La primera mujer en hablar en el Palacio de las Cortes fue Concepción Loring, el 23 de noviembre de 1927.
Sesiones y funcionamiento
La Asamblea Nacional Consultiva se organizó en 18 secciones, cada una con 11 miembros elegidos por el presidente. La sección más importante era la Primera, que debía preparar los "Proyectos de Leyes Constituyentes".
El reglamento interno aseguraba que el gobierno tuviera un control estricto sobre la Asamblea. El gobierno, a través de la Mesa de la Asamblea, decidía qué temas se debatirían y cuándo. Cuando una comisión llegaba a un acuerdo, el presidente de la Asamblea lo enviaba al gobierno. El gobierno decidía si el tema se discutiría en una sesión general y si se votaría. Las sesiones generales estaban limitadas a cuatro al mes. A pesar de esto, se trataron temas importantes como un nuevo Código Penal o la reforma de los estudios universitarios.
La Asamblea no supervisó al gobierno de forma efectiva. Las pocas críticas que surgieron no llegaron al público debido a la estricta censura de prensa.
La sección primera de la Asamblea, presidida por José Yanguas Messía, presentó en el verano de 1929 una propuesta de ley fundamental para el país. Aunque se presentó como un "anteproyecto de Constitución", rompía con la historia de las leyes fundamentales de España. Un año después de su presentación, el proyecto estaba estancado. Esto llevó a que el debate político se centrara en la necesidad de crear una verdadera Constitución.
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