Grasas saturadas para niños
Los ácidos grasos saturados, también conocidos como grasas saturadas, son un tipo de grasa que se encuentra en muchos alimentos. Su nombre viene de su estructura química: son como cadenas largas de átomos de carbono que están "saturadas" con átomos de hidrógeno. Esto significa que todos los enlaces entre los átomos de carbono son simples, lo que les da una forma recta.
Estas grasas son parte de los lípidos, que son moléculas importantes para nuestro cuerpo. Casi siempre se encuentran unidas a una molécula llamada glicerol. La mayoría de los ácidos grasos saturados tienen un número par de átomos de carbono porque así es como se forman y se descomponen en los seres vivos. Sin embargo, hay algunas excepciones, como las que se encuentran en la leche de rumiantes o en algunas plantas.
Una diferencia clave entre las grasas saturadas y las insaturadas es que las saturadas solo tienen enlaces simples entre sus átomos de carbono, mientras que las insaturadas tienen al menos un doble enlace. Debido a su estructura recta, las grasas saturadas suelen ser sólidas a temperatura ambiente, como la mantequilla o la manteca. Las grasas insaturadas, en cambio, suelen ser líquidas, como el aceite de oliva.
La mayoría de las grasas de origen animal son saturadas. Las grasas de las plantas y del pescado suelen ser insaturadas. Muchos alimentos que comemos contienen una mezcla de grasas saturadas e insaturadas. Algunos ejemplos de alimentos con alto contenido de grasas saturadas son:
- Productos de origen animal como la carne grasa, la manteca de cerdo y los productos lácteos enteros (leche, yogur, queso, mantequilla).
- Algunos productos vegetales como el aceite de coco y el aceite de palma.
- Muchos alimentos procesados, como los fritos en aceites hidrogenados y algunos productos horneados.
Las grasas saturadas son un tipo de lípidos llamados triglicéridos, que se forman cuando tres moléculas de ácidos grasos saturados se unen a una molécula de glicerol.
Muchas organizaciones de salud, como la OMS, sugieren reducir el consumo de grasas saturadas para mantener una buena salud y disminuir el riesgo de ciertas enfermedades.
Contenido
Grasas saturadas en alimentos comunes
Aquí puedes ver la cantidad de diferentes ácidos grasos saturados en algunos alimentos comunes, como porcentaje de la grasa total:
Comida | Ácido láurico | Ácido mirístico | Ácido palmítico | Ácido esteárico |
---|---|---|---|---|
Aceite de coco | 47% | 18% | 9% | 3% |
Aceite de palma | 48% | 1% | 44% | 5% |
Mantequilla | 3% | 11% | 29% | 13% |
Carne de vaca picada | 0% | 4% | 26% | 15% |
Salmón | 0% | 1% | 29% | 3% |
Huevo, yemas | 0% | 0.3% | 27% | 10% |
Anacardos | 2% | 1% | 10% | 7% |
Aceite de soja | 0% | 0% | 11% | 4% |
Grasas saturadas y la salud humana
Las grasas saturadas son importantes para nuestro cuerpo. Se usan como fuente de energía, ayudan a construir partes de nuestras células y participan en la forma en que funcionan nuestras proteínas y genes. Nuestro cuerpo, especialmente el hígado, puede producir y guardar estas grasas a partir de otros nutrientes, como el azúcar.
Los diferentes tipos de grasas saturadas pueden tener efectos variados en el cuerpo. Por ejemplo, el ácido butírico, que es una grasa saturada de cadena corta, se considera muy beneficioso por sus efectos positivos en la salud. Otros, como los ácidos caprílico, cáprico y láurico, tienen propiedades que ayudan a combatir ciertas bacterias y hongos. El ácido palmítico, por su parte, es importante para la comunicación dentro de nuestras células.
Relación con la salud
Salud del corazón
Se ha estudiado mucho cómo las grasas saturadas pueden afectar la salud del corazón. Algunos estudios han encontrado una relación entre el consumo de grasas saturadas, los niveles de colesterol en la sangre y el riesgo de problemas del corazón. La idea de que las grasas saturadas pueden aumentar el colesterol "malo" (LDL) en la sangre y, por lo tanto, el riesgo de enfermedades del corazón, se conoce como la "hipótesis lipídica".
Sin embargo, también hay estudios que muestran que reducir el consumo de grasas saturadas no siempre disminuye el riesgo general de problemas de salud graves. Algunos datos incluso sugieren que en ciertos países, un mayor consumo de grasas saturadas se asocia con menos problemas cardíacos. Además, más de 25 estudios han encontrado que las personas con problemas cardíacos no consumen más grasas saturadas que las personas sanas.
A pesar de esto, muchas autoridades de salud, como la Asociación Estadounidense del Corazón y la Organización Mundial de la Salud, recomiendan reducir la ingesta de grasas saturadas a menos del 10% del total de energía que consumimos y aumentar las grasas insaturadas. Hay evidencia de que reemplazar las grasas saturadas con grasas insaturadas o carbohidratos durante al menos dos años puede reducir el riesgo de problemas del corazón. Un estudio de 2021 encontró que las dietas con muchas grasas saturadas se asociaban con un mayor riesgo de problemas de salud en general y del corazón.
En 2019, un comité de expertos en nutrición del Reino Unido concluyó que un mayor consumo de grasas saturadas está relacionado con un aumento del colesterol en la sangre y un mayor riesgo de problemas cardíacos.
Niveles de lípidos en la sangre
El consumo de grasas saturadas se considera un factor que puede influir en los niveles anormales de lípidos (grasas) en la sangre, lo que se conoce como dislipidemia. Tener niveles altos de colesterol total, triglicéridos, colesterol "malo" (LDL) o niveles bajos de colesterol "bueno" (HDL) se asocia con un mayor riesgo de problemas cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Relación con el cáncer
Algunos estudios han investigado la relación entre las grasas saturadas y el riesgo de ciertos tipos de cáncer. Un análisis de 2003 encontró una posible relación entre las grasas saturadas y el riesgo de cáncer de mama. Sin embargo, revisiones posteriores han encontrado asociaciones débiles o no significativas, señalando que hay muchos otros factores que pueden influir.
También se ha encontrado evidencia de un mayor riesgo de cáncer de ovario con un alto consumo de grasas saturadas.
Una revisión encontró evidencia limitada de una posible relación entre el consumo de grasa animal y el riesgo de cáncer colorrectal.
Algunos investigadores han sugerido que ciertos ácidos grasos saturados, como el mirístico y el palmítico, podrían estar relacionados con un aumento en el riesgo de cáncer de próstata. Sin embargo, estas asociaciones podrían reflejar diferencias en cómo el cuerpo procesa estas grasas, más que una causa directa.
Galería de imágenes
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Las grasas de la mantequilla están formados por ácidos grasos saturados.
Véase también
En inglés: Saturated fat Facts for Kids