Pecados capitales para niños
Los siete pecados capitales, también conocidos como los pecados cardinales o vicios capitales, es una agrupación y categorización de las faltas humanas que, además de ser contrarias a las enseñanzas cristianas en función del objeto elegido, del fin que se busca o la intención y de las circunstancias de la acción u omisión, se cometen de modo reiterado, repetitivo o habitual oscureciendo la conciencia y distorsionando la valoración concreta de los actos humanos (conforme al Catecismo de la Iglesia Católica, 1865, 1866 y 1750).
Ellos son: la ira, la gula, la soberbia, la lujuria, la pereza, la avaricia y la envidia.
El término «capital» (de caput, capitis, "cabeza", en latín) no se refiere a la magnitud del pecado sino a que da origen a muchos otros pecados, de acuerdo con Santo Tomás de Aquino (II-II:153:4).
Al principio del cristianismo, todos los escritores religiosos ―Cipriano de Cartago, Juan Casiano, Columbano de Luxeuil, Alcuino de York― enumeraban ocho pecados capitales. El número siete fue dado por el papa Gregorio Magno y se mantuvo por la mayoría de los teólogos de la Edad Media.
Véase también
En inglés: Seven deadly sins Facts for Kids