Francesco da Urbino para niños
Francesco da Urbino fue un pintor italiano que vivió en el siglo XVI. Nació probablemente en la ciudad de Urbino, Italia, alrededor del año 1545. Es conocido principalmente por su trabajo en España, a donde llegó en 1569 para colaborar en importantes proyectos artísticos. Falleció en Madrid el 30 de diciembre de 1582.
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Los primeros años de Francesco da Urbino en España
Francesco da Urbino llegó a España en 1569. Fue invitado por otro artista llamado Giovanni Battista Castello, conocido como "el Bergamasco", para ayudarle a decorar el antiguo Alcázar de Madrid. Iban a pintar unos diseños especiales llamados grutescos, que son dibujos con figuras fantásticas, plantas y animales entrelazados.
Lamentablemente, el mismo año en que llegó, "el Bergamasco" falleció. Esto significó que Francesco tuvo que hacerse cargo de los trabajos que su maestro había dejado sin terminar en la corte de Madrid. Por su trabajo, recibía un salario de veinte ducados, que era una moneda de oro de la época.
Francesco dirigió su propio taller de artistas. En este taller trabajaban su hermano Giovanni María y un dorador llamado Francesco de Viana. Juntos, se encargaron de pintar los grutescos en la cámara del Alcázar. Después de 1570, también colaboró con otros pintores como Rómulo Cincinato y Patricio Cajés en la decoración de la Sala del Tesoro.
¿Dónde más trabajó Francesco da Urbino?
Entre 1570 y 1575, Francesco da Urbino se mudó a Segovia. Allí, trabajó en el palacio de Valsaín y en la Real Casa del Bosque, realizando varias obras de arte. Durante su estancia en Segovia, se casó con Isabel Merino en 1573. Sin embargo, ella falleció pronto, y él se casó por segunda vez con Camila, quien era hermana de su colaborador Francesco de Viana. Camila también falleció en 1581.
El trabajo de Francesco da Urbino en El Escorial
En abril de 1575, Francesco da Urbino recibió el título de pintor del rey y se trasladó a El Escorial. Este lugar es famoso por su gran monasterio. El padre Sigüenza, un historiador que escribió sobre la fundación del Monasterio de El Escorial, mencionó a Francesco en sus escritos.
El padre Sigüenza le atribuyó a Francesco los frescos (pinturas hechas sobre yeso fresco) del techo de la celda baja del prior. En estas pinturas, Francesco creó un conjunto de decoraciones con estucos (un tipo de yeso decorativo) y relieves que parecían reales. Pintó figuras de profetas y otros personajes del Antiguo Testamento, así como virtudes, usando una técnica llamada grisalla, que es pintar solo con tonos de gris. En el centro de la bóveda, pintó una escena muy importante: El juicio de Salomón.
El padre Sigüenza describió esta obra así:
de allí [la cornisa] arriba toda la bóveda está, como dicen, de oro y azul; tiene una pintura al fresco y un grutesco excelente, con grande estudio labrado, obra de un Francisco de Urbino, italiano.
Desde 1575 y hasta pocos meses antes de su fallecimiento, el nombre de Francesco da Urbino aparece regularmente en los registros de pagos mensuales del proyecto de construcción de El Escorial. Esto demuestra que fue un artista muy activo allí.
Colaboraciones y obras destacadas
Aunque no se detallan todas sus tareas, se sabe que en diciembre de 1581, Francesco da Urbino se encargó de decorar el techo de la sacristía junto con Niccolò Granello y Francesco de Viana. También trabajó con Granello en las pinturas del coro de la iglesia. De estas obras, se han conservado muchos dibujos que muestran cómo preparaban sus pinturas.
Los frescos del techo de la sala baja del prior, que son su obra más importante, se pueden fechar con precisión en 1581. Esto se sabe por una inscripción en números romanos que se encuentra en la base del trono de Salomón en la pintura.
Francesco da Urbino falleció siendo aún joven. Según el padre Sigüenza, en ese momento "llevaba camino de ser de los muy valientes", lo que significa que era un artista muy prometedor y talentoso.
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Francesco da Urbino Facts for Kids