Carga militar para niños
Una carga militar es una táctica de ataque en la que un grupo de soldados avanza rápidamente y con mucha fuerza hacia el enemigo. Es como una embestida decidida de una tropa contra otra.
El objetivo principal de una carga es chocar con el enemigo y desorganizarlo. Esto se puede lograr con el impacto directo o usando armas de fuego o proyectiles. Una carga rápida ayuda a que los soldados estén menos tiempo expuestos a los ataques del enemigo y los desequilibra con la fuerza del impacto. Una carga más lenta permite que la tropa atacante se mantenga más unida.
Contenido
Historia de la carga militar
La carga en la Antigüedad
La carga fue muy usada por la falange macedonia, una formación militar de la antigua Macedonia. Era una parte clave de las tácticas del famoso líder Alejandro Magno, como la "Táctica del martillo y el yunque". La velocidad de los soldados macedonios, equipados con lanzas largas llamadas sarissas, les daba un gran poder para romper las líneas enemigas.
Las legiones romanas también usaban la carga. Marchaban con orden y en silencio, y cuando estaban cerca del enemigo, corrían hacia él gritando y tocando trompetas.
La carga en la Edad Media y Moderna
En la Edad Media, los caballeros europeos realizaban cargas. Más tarde, en el siglo XVIII, la infantería (soldados a pie) continuó esta maniobra usando bayonetas después de un breve intercambio de disparos de cañón. Se cree que la primera carga con bayoneta ocurrió en la Batalla de Espira en 1703.
Durante el Renacimiento, la infantería cargaba en grupos muy juntos. Los soldados con picas (lanzas largas) cruzaban sus armas, mientras que los que usaban arcabuces (un tipo de arma de fuego antigua) disparaban desde los lados.
En el siglo XVII, la infantería avanzaba con las picas bajas. Los oficiales y las banderas iban al frente. Justo antes del choque, las filas se cerraban para estar más unidas.
En el siglo XVIII, la carga comenzaba caminando en silencio y luego se aceleraba hasta convertirse en una carrera cuando estaban cerca del enemigo. Las bandas de música tocaban para animar el avance, y se intentaba mantener el orden hasta el último momento.
La carga en la Edad Contemporánea
Con el tiempo, los fusiles (armas de fuego) se hicieron más precisos y potentes. Esto hizo que los combates con armas blancas (como espadas o bayonetas) fueran más difíciles. Sin embargo, en la Guerra Ruso-Japonesa (1904-1905), se demostró que, frente a un enemigo fuerte, una carga vigorosa que terminara en una lucha cuerpo a cuerpo era a menudo decisiva.
Aunque las estadísticas muestran que pocas heridas en las batallas modernas son por armas blancas, la carga con bayoneta sigue siendo importante. El avance decidido del atacante y su valentía pueden afectar mucho la moral del enemigo. Como dijo el general ruso Aleksandr Suvórov: «la bala es loca y solo la bayoneta es cuerda». Esto significa que el impacto psicológico de un soldado que avanza con su bayoneta es muy fuerte.
La carga de infantería siguió usándose en guerras más recientes, como en la guerra de trincheras y en algunas batallas de la Segunda Guerra Mundial.
Tipos de cargas militares
Además de las cargas rápidas y lentas, existen otros tipos:
- Carga abierta: Un ataque con arma blanca donde los soldados no están muy juntos, sino más espaciados.
- Carga cerrada: Lo contrario de la anterior, los soldados avanzan en una formación muy unida y compacta.
- Carga a fondo o de petral: Es una embestida de caballería contra otra caballería, buscando el combate cuerpo a cuerpo entre los jinetes.
- Carga a la bayoneta: Un ataque de la infantería usando la bayoneta colocada en el fusil o carabina.
- Carga de caballería: La que realizan los escuadrones de caballería (grupos de jinetes).
Mecanismo de la carga a lo largo de la historia

Los hoplitas (soldados de infantería pesada) griegos, cuando su formación se rompía, cargaban con sus espadas (llamadas xifos) al ritmo de instrumentos musicales como el aulos o el salpinx.
En la época del Renacimiento, la infantería cargaba en grandes grupos. Los piqueros (soldados con picas) cruzaban sus armas, y los arcabuceros (soldados con armas de fuego) disparaban desde los lados.
Durante el siglo XIX, la carga de infantería comenzaba a unos 200 pasos del enemigo. Los soldados colocaban sus bayonetas y se lanzaban al ataque a la señal de los oficiales, acelerando al final para chocar con la fuerza necesaria.
Los japoneses en la Guerra Ruso-Japonesa solían atacar de noche. Los reglamentos militares de la época recomendaban no atacar toda la línea a la vez, sino por "oleadas" o impulsos de las tropas de atrás.
Carga de caballería

La carga ha sido la forma principal de ataque de la caballería desde hace mucho tiempo. Su éxito depende de la oportunidad, es decir, de atacar cuando el enemigo está débil, se retira o debe abandonar una posición.
En la antigüedad, los pueblos bárbaros a menudo cargaban de forma desordenada. Sin embargo, los pueblos más organizados daban mucha importancia a atacar en un orden regular y con grupos compactos.
La velocidad de la carga de caballería ha cambiado con el tiempo. Los griegos, macedonios, cartagineses y romanos no usaban el galope para cargar, sino el trote o el paso. Lo mismo ocurría en la Edad Media, debido al peso de las armaduras de los caballeros. El galope se reservaba para los torneos.
En los inicios de la Edad Moderna, hasta el siglo XVIII, solo se usaba el trote para cargar. Se pensaba que atacar al galope llevaría al desastre porque sería imposible mantener el orden. Solo cuando las armaduras desaparecieron y se mejoró el entrenamiento de los caballos y los jinetes, fue posible cargar al galope manteniendo el orden. Federico II el Grande fue clave en esta reforma.
Armas para cargar
Las armas usadas en la carga también han cambiado. En la antigüedad, se preferían la espada y la lanza, pero también se usaba el arco. Algunos pueblos, como los hunos, lanzaban dardos desde el caballo.
Cuando se inventaron las armas de fuego, la caballería las adoptó. Al principio, esto llevó a una forma de carga más lenta, donde los jinetes disparaban antes de usar sus espadas. Sin embargo, se vio que la carga debía ser al galope, sin disparar, usando solo el arma blanca para chocar con el enemigo con la fuerza necesaria.
El choque
Aunque la carga no es solo un acto mecánico, la masa (número de jinetes y su cohesión) y la velocidad son muy importantes. El verdadero efecto de una carga de caballería, más que el choque físico, era la impresión que causaba ver una masa de caballos avanzando rápidamente, levantando polvo y haciendo temblar el suelo. Muchos creen que el choque rara vez ocurría, porque el ejército más débil o desorganizado se retiraría antes de enfrentarse a la embestida.
Sin embargo, a veces el choque sí ocurría. En esos casos, la caballería que estaba más unida y compacta solía arrollar a la menos organizada. Si ambos bandos estaban en condiciones similares, se iniciaba una lucha cuerpo a cuerpo con armas blancas o de fuego como pistolas. La victoria era para los más hábiles, tenaces o mejor equipados. La llegada de refuerzos por un flanco también podía ser decisiva.
Reglamentación y eficacia
Los reglamentos militares no siempre estaban de acuerdo sobre cómo lograr la máxima velocidad en la carga. Algunos, como los alemanes, franceses e italianos, decían que había que ahorrar las fuerzas del caballo y acelerar progresivamente, manteniendo la formación. Otros, como los austriacos y rusos, priorizaban la rapidez y la decisión, incluso si se perdía algo de orden.
Para que los caballos tuvieran aliento para perseguir o retirarse, la distancia de la carga no podía ser muy grande. Se consideraba suficiente una distancia de 1200 metros. De esta distancia, se descontaban unos 50 a 80 metros para ganar el impulso necesario. El resto se repartía entre el paso, el trote y el galope para conservar la energía de los caballos.
La carga era más efectiva cuando se dirigía al flanco (lado) o a la retaguardia (parte de atrás) del enemigo. Por eso, la caballería siempre buscaba atacar por esos puntos.
Tipos de carga de caballería
- Carga en línea: Se realizaba en dos líneas cerradas, también llamada "carga en muralla". Era la forma normal de ataque contra caballería o infantería en formación cerrada.
- Carga en columna: Se usaba cuando no había espacio para desplegarse o se quería concentrar el ataque en un punto. Era común contra grupos de infantería pequeños.
- Carga en escalones: Cuando se trataba de grandes unidades, se intentaba atacar de frente y por el flanco al mismo tiempo. La primera línea era la más numerosa y buscaba romper la resistencia enemiga. La segunda línea intentaba flanquear al enemigo o proteger la retirada de la primera. La tercera línea (reserva) protegía la retirada de las otras dos.
- Carga a discreción: Los jinetes avanzaban en una sola fila, más o menos espaciados. Era útil para atacar infantería en orden de combate o artillería, o para ocultar movimientos de tropas.
- Carga contra infantería: Se buscaba sorprender a la infantería, atacándola por el flanco o desde lejos al galope para evitar sus disparos.
- Carga contra artillería: El momento más peligroso era cuando la artillería se movía. Se intentaba alcanzarla antes de que pudiera preparar sus cañones. Si ya estaban listos para disparar, se atacaba el flanco principal y se simulaba un ataque frontal.
Una precaución muy importante en todas las cargas era reconocer el terreno de antemano. Si no era posible, se enviaban exploradores delante de la caballería.
La historia militar tiene muchos ejemplos de cargas de caballería que decidieron batallas o salvaron ejércitos. Líderes como Federico II el Grande y Napoleón Bonaparte supieron usar la caballería de forma brillante. Sin embargo, los avances en las armas modernas han hecho que las cargas de caballería sean menos comunes hoy en día, aunque las de infantería aún pueden ser útiles.
Véase también
En inglés: Charge (warfare) Facts for Kids
- Táctica militar
- Estrategia militar
- Formación militar
- Combate terrestre