Ambrosio Pisco para niños
Datos para niños Ambrosio Pisco |
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Información personal | ||
Nacimiento | 1737 | |
Ambrosio Pisco (1737-1785) fue un importante líder indígena. Es recordado por su participación en la Rebelión de los Comuneros entre 1781 y 1782. Este levantamiento ocurrió en el Virreinato de la Nueva Granada, que hoy conocemos como Colombia.
Ambrosio Pisco: Líder Indígena en la Rebelión de los Comuneros
Ambrosio Pisco nació en 1737. Aunque algunos historiadores debatieron su lugar de nacimiento, se sabe que fue bautizado en Chía. Sus padres fueron Antonio Pisco y Gertrudis Pisco. Su tío, Luis Pisco, había sido un importante líder o "cacique" del pueblo de Bogotá (actual Funza).
¿Cómo se convirtió Ambrosio Pisco en Cacique?
El hermano mayor de Ambrosio, Ignacio, fue cacique por un tiempo. Sin embargo, Ignacio falleció sin dejar un heredero directo que pudiera tomar su lugar. Por esta razón, un sobrino llamado Joseph Vicente Pisco cedió sus derechos a Ambrosio. Así, Ambrosio Pisco se convirtió en el cacique de su comunidad.
En el siglo XVIII, los caciques tenían un papel de mediadores. Ayudaban a conectar a la población indígena con las autoridades españolas. Aunque su poder no era tan grande como en tiempos antiguos, seguían siendo figuras importantes.
La Vida de Ambrosio Pisco Antes de la Rebelión
Ambrosio Pisco no aceptó su cargo de cacique de inmediato. A finales de la década de 1770, las autoridades le ofrecieron el puesto, pero él lo rechazó. Antes de la Rebelión de los Comuneros en 1781, Pisco se dedicaba a la agricultura y al comercio.
Era un hombre exitoso y con buenas propiedades. Tenía una hacienda con ganado y mulas en Güepsa, en el actual departamento de Santander. También poseía tiendas en Moniquirá (Boyacá) y en Santafé (hoy Bogotá). Además, administraba negocios importantes como los de tabaco y aguardiente.
La Participación de Pisco en la Rebelión de los Comuneros
La Rebelión de los comuneros fue un gran levantamiento contra los altos impuestos y las reglas injustas impuestas por el gobierno español. Al principio, Ambrosio Pisco no quería unirse a la rebelión. Incluso pensó en apoyar a las fuerzas del gobierno.
Sin embargo, cuando los rebeldes ganaron una batalla importante en Puente Real en mayo de 1781, la situación cambió. Los líderes comuneros lo amenazaron, y Pisco decidió unirse a ellos. Intentó escapar de la presión y dirigirse a Santafé. Pero en Simijaca, los indígenas lo aclamaron como su líder.
El "Príncipe de Bogotá"
Aunque no estaba muy entusiasmado, Ambrosio Pisco aceptó su nuevo rol. Fue declarado "Príncipe de Bogotá" y "Señor de Chía". También recibió tributos de los indígenas, lo que más tarde se usó en su contra.
Uno de los momentos más importantes de su participación fue antes de la firma de las Capitulaciones de Zipaquirá. Estas eran un acuerdo para poner fin a la rebelión. El 31 de mayo de 1781, el líder comunero Francisco Berbeo le pidió a Pisco que llevara a cinco mil indígenas cerca de Santafé. La idea era evitar que otros rebeldes causaran problemas en la ciudad. Sin embargo, esta acción no se llevó a cabo.
La Lucha por las Minas de Sal
Ambrosio Pisco defendió los derechos de los indígenas. Quería que ellos volvieran a controlar las minas de sal de Nemocón. Esto significaba que el gobierno no tendría el control total sobre la sal, como lo había hecho desde 1777.
El 1 de septiembre de 1781, algunos de sus seguidores incendiaron la casa del administrador de las minas de sal. Este acto llevó a la ejecución de varios implicados y al encarcelamiento de Ambrosio Pisco. Poco después, las Capitulaciones de Zipaquirá fueron anuladas por el Virrey Manuel Antonio Flórez.
El Indulto y el Exilio de Ambrosio Pisco
Las acusaciones contra Ambrosio Pisco eran muy graves y podrían haberle costado la vida. Sin embargo, en 1782, fue perdonado por el Arzobispo Virrey Antonio Caballero y Góngora. El Arzobispo no lo consideraba un rebelde peligroso y reconocía su ayuda para calmar a los indígenas.
Aun así, por razones políticas, no podía permitir que Pisco estuviera cerca de Santafé. Por ello, Ambrosio Pisco fue enviado al exilio en Cartagena. Allí vivió hasta su muerte en 1785. El Arzobispo Virrey informó de su fallecimiento a las autoridades el 31 de enero de 1785.
El Legado de Ambrosio Pisco
Ambrosio Pisco fue el líder principal de los indígenas en la Rebelión de los Comuneros. Sin embargo, asumió este papel con dudas y a menudo estuvo influenciado por otros líderes. Los criollos (personas de origen español nacidas en América) que dirigían la rebelión lo veían como un buen candidato para liderar a los indígenas. Esto se debía a que los indígenas lo aceptaban, y él no tenía un gran deseo de poder político.
Algunos historiadores creen que los criollos querían que Pisco fuera el líder indígena para poder negociar con las autoridades. También había un interés económico. Las Capitulaciones de Zipaquirá mencionaban que las tierras de los indígenas, llamadas "resguardos", pasarían a ser propiedad privada. Esto permitiría que estas tierras fueran divididas y vendidas a criollos y personas de origen mixto que querían más tierras.
Ambrosio Pisco fue un líder que, aunque a veces defendió los intereses de su gente, como en el caso de las minas de sal, en otras ocasiones sus acciones sirvieron a los intereses de otros grupos de la sociedad.