Tertuliano para niños
Datos para niños Tertuliano |
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![]() Tertuliano en un grabado en madera de 1584
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Título | Padre de la Iglesia | |
Nombre | Quintus Septimius Florens Tertullianus | |
Nacimiento | c. 160 Cartago, en el actual Túnez |
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Fallecimiento | c. 220 Cartago |
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Estudios | Teología | |
Obras notables | Contra Marción | |
Quinto Septimio Florente Tertuliano (en latín: Quintus Septimius Florens Tertullianus), nacido alrededor del año 160 y fallecido cerca del 220, fue un importante escritor y pensador de los primeros años del cristianismo. Nació, vivió y murió en Cartago, una ciudad que hoy se encuentra en Túnez.
Tertuliano fue una figura muy influyente en el cristianismo de su tiempo, especialmente en la parte occidental. Se le considera uno de los Padres de la Iglesia, que eran líderes y escritores cristianos de los primeros siglos. Sin embargo, su camino fue un poco diferente, ya que se unió a un movimiento llamado montanismo. Por esta razón, él y Orígenes son los únicos Padres de la Iglesia que no fueron declarados santos.
Contenido
La vida de Tertuliano: ¿Quién fue?
Se sabe muy poco sobre la vida personal de Tertuliano. La información que tenemos proviene principalmente de los escritos de otros historiadores como Eusebio de Cesarea y San Jerónimo.
Orígenes y educación
Según Eusebio, el padre de Tertuliano era un oficial del ejército romano en África. En esa época, la región de África romana era conocida por tener grandes oradores y pensadores. Esta influencia se puede ver en el estilo de escritura de Tertuliano, que era muy imaginativo y apasionado.
Tertuliano recibió una excelente educación. Era un gran estudioso y se especializó en leyes. Sus escritos muestran lo bien que argumentaba, como un abogado experto. Eusebio incluso menciona que fue un abogado destacado en Roma.
Su conversión al cristianismo
Tertuliano se hizo cristiano alrededor de los años 197 o 198. No se sabe mucho sobre cómo ocurrió este cambio, pero debió ser un momento muy importante en su vida. Él mismo decía que una verdadera vida cristiana implicaba un cambio profundo. Una de sus frases más conocidas es: «Los cristianos no nacen: se hacen».
Su papel en la Iglesia
Tertuliano fue ordenado presbítero (un tipo de sacerdote) en la Iglesia de Cartago. Estaba casado, lo cual era común en esa época, ya que el celibato (no casarse) no era obligatorio para los sacerdotes hasta mucho después. Escribió dos libros dedicados a su esposa.
Aunque estaba casado, Tertuliano se oponía a las segundas nupcias, es decir, que las personas que enviudaban volvieran a casarse. Animaba a los viudos y viudas a aprovechar la oportunidad para dedicarse a una vida de mayor compromiso espiritual. Fue uno de los teólogos más importantes del cristianismo en el siglo III.
Su camino diferente
Aproximadamente en el año 207, Tertuliano se separó de la Iglesia principal y se unió al grupo religioso de Montano. Sin embargo, para Tertuliano, los montanistas no eran lo suficientemente estrictos. Por eso, se separó de ellos y fundó su propio movimiento.
San Agustín (otro importante pensador cristiano) afirmó que, antes de morir, Tertuliano regresó a la Iglesia principal. El movimiento de los "tertulianistas" todavía existía en Cartago en tiempos de San Agustín. Tertuliano siguió luchando contra ideas que consideraba incorrectas, como el gnosticismo. Sus escritos fueron muy importantes y sirvieron de guía para Cipriano de Cartago, quien fue un maestro clave antes de San Agustín y el fundador de la teología latina.
Ideas de Tertuliano sobre Dios
Tertuliano fue un pensador clave en la forma en que el cristianismo entendía a Dios.
La relación entre el Padre y el Hijo
Tertuliano explicaba que el Logos de Dios (que él llamaba Sermo o Verbum, que significa Palabra) es Dios, pero de una manera que proviene del Padre. Lo comparaba con la luz del sol que viene del Sol:
Decimos que la Palabra ha sido pronunciada por Dios y que de esa pronunciación es generada. Por eso es llamada Hijo de Dios y Dios, por ser de la misma sustancia. Así como un rayo nace del Sol, es una parte de él, pero el Sol sigue estando en el rayo, porque el rayo es del Sol y la sustancia no se separa, sino que se extiende. De la misma manera, el espíritu nace del espíritu y Dios de Dios. Como una luz que enciende otras luces permanece completa sin disminuirse, y la fuente no pierde su fuerza aunque de ella nazcan otras luces iguales, que si se comparten no se reducen. Así, lo que nació de Dios es Dios completamente e Hijo de Dios, y ambos son uno, Espíritu de Espíritu y Dios de Dios. En ellos, solo el grado de la generación y la forma de la persona hacen una distinción numérica, no la grandeza de la esencia, que aunque nace no se separa; como la rama, aunque nace, no se divide del tronco.(Apologeticum XXI)
Tertuliano no creía que el Hijo existiera desde siempre junto con el Padre. Para él, el Hijo de Dios comenzó a existir cuando fue engendrado por el Padre. Lo explicaba así:
Nosotros afirmamos que el nombre de Dios siempre existió con Él, pero no siempre el de Señor. Porque una condición no es igual a la otra. Dios es el nombre de la sustancia misma, es decir, de la Divinidad; pero Señor no es de la sustancia, sino del poder. Sostengo que la sustancia siempre existió con su propio nombre, que es Dios; el título Señor fue añadido después, como señal de algo que aumentó. Desde el momento en que las cosas comenzaron a existir, sobre las cuales el poder de un Señor actuó, Dios, al adquirir ese poder, se convirtió en Señor y recibió ese nombre. Porque Dios es de la misma manera un Padre y también un Juez; pero no siempre fue Padre y Juez, simplemente por haber sido siempre Dios. Porque no pudo haber sido Padre antes del Hijo ni Juez antes del pecado. Hubo, sin embargo, un tiempo en que ni el pecado existió con Él, ni el Hijo; el primero lo convierte en Juez y el último en Padre. De esta manera, no fue Señor antes de aquellas cosas de las cuales Él fue Señor. Pero Él llegó a ser Señor solo en un tiempo futuro: así como llegó a ser Padre por causa del Hijo y Juez por el pecado, entonces también llegó a ser Señor a través de las cosas que hizo.(Adversus Hermogenem III)
Contra el Modalismo
Tertuliano también escribió contra una idea llamada Modalismo. Esta idea, defendida por personas como Noeto, Práxeas y Sabelio, decía que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo eran la misma persona, que se mostraba de diferentes maneras.
Tertuliano refutó a Práxeas diciendo:
La idea de Práxeas cree tener la verdad pura cuando afirma, para defender la unidad de Dios, que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son lo mismo.(Adversus Praxeam II)
Práxeas usaba un versículo de la Biblia (Juan 10:30) para apoyar su idea: «Yo y el Padre somos uno». Tertuliano explicó que esto no significaba que fueran la misma persona, sino que eran uno en propósito o esencia. Señaló que la frase usa "Yo y el Padre" (dos) y "somos" (plural), lo que indica dos personas, no una sola.
El origen de la palabra "Trinidad"
Tertuliano fue el primero en usar la palabra latina "trinitas" para referirse al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. Él dijo:
La unidad en la trinidad organiza a los tres, refiriéndose al Padre, al Hijo y al Espíritu. Pero los tres no tienen diferencia de estado ni de grado, ni de sustancia ni de forma, ni de poder ni de tipo, pues son de una misma sustancia, y de un mismo grado y de un mismo poder.Adversus Praxeam II, 4
La palabra "substantia" que usó Tertuliano ha sido muy debatida. Algunos creen que significaba "propiedad", mientras que otros piensan que se refería a la "esencia" o lo que algo es en sí mismo. Lo cierto es que Tertuliano usó esta palabra con varios significados, dependiendo del contexto.
Tertuliano y la Filosofía
Tertuliano tenía una visión crítica de la filosofía pagana. Creía que muchas ideas filosóficas eran el origen de errores en la fe.
Él decía:
Todas las ideas diferentes en último término tienen su origen en la filosofía. De ella proceden los errores y no sé qué formas infinitas y la tríada humana de Valentín; es que había sido platónico. De ella viene el Dios de Marción, cuya superioridad está en que está inactivo; es que procedía del estoicismo. Hay quien dice que el alma es mortal y ésta es doctrina de Epicuro. [...] Es el miserable Aristóteles el que les ha enseñado la dialéctica, que es el arte de construir y destruir, de convicciones cambiantes, de conjeturas firmes, de argumentos duros, creador de discusiones, molesta hasta para sí misma, siempre dispuesta a reexaminarlo todo, porque jamás admite que algo esté suficientemente examinado. [...] Quédese para Atenas esta sabiduría humana que manipula y altera la verdad, por donde anda la gran variedad de grupos que se contradicen entre sí con sus diversas ideas. Pero, ¿qué tiene que ver Atenas con Jerusalén? ¿Qué relación hay entre la Academia y la Iglesia? ¿Qué tienen que ver los que tienen ideas diferentes y los cristianos? Nuestra escuela es la del pórtico de Salomón, que enseñó que había que buscar al Señor con sencillez de corazón. Allá ellos los que han salido con un cristianismo estoico, platónico o dialéctico. No tenemos necesidad de buscar más, una vez que vino Jesucristo, ni hemos de investigar después del Evangelio. Creemos, y no deseamos nada más allá de la fe: porque lo primero que creemos es que no hay nada que debamos creer más allá del objeto de la fe.De Praescriptione, 7, 1
Tertuliano creía que era mejor confiar en lo que Dios había revelado que en lo que los humanos podían descubrir por sí mismos.
Es mejor no conocer por Dios, porque Él no lo ha revelado, que conocer por el hombre, porque él mismo lo ha asumido.De anima I, 1
A pesar de su crítica, Tertuliano a veces usaba ideas filosóficas para explicar sus propias creencias. Por ejemplo, en su obra Acerca del alma, se apoyó en un verso de un poeta llamado Lucrecio para defender la idea de que el alma es algo material.
Su famosa frase, a menudo citada como credo quia absurdum («creo porque es absurdo»), muestra su fuerte énfasis en la fe. Algunos lo ven como alguien que no valoraba la razón, pero otros explican que su postura se debía a su pasión y al contexto de las discusiones de su tiempo.
La Iglesia según Tertuliano
Tertuliano veía a la Iglesia como un grupo de personas fieles. Aunque reconocía que había una jerarquía (diferentes niveles de autoridad) en la Iglesia, también creía en la importancia de San Pedro, a quien consideraba el líder de los apóstoles. Creía que Pedro, junto con San Pablo, murió en Roma.
Obras importantes de Tertuliano
Los escritos de Tertuliano son muy numerosos y se han conservado hasta hoy. Se pueden encontrar en colecciones de textos antiguos como la Patrología Latina y el Corpus Christianorum.
Algunas de sus obras más destacadas se agrupan en diferentes temas:
- Obras de defensa del cristianismo
- Apologeticus pro Christianis (Defensa de los cristianos)
- Libri duo ad Nationes (Dos libros a las naciones)
- De Testimonio animae (Sobre el testimonio del alma)
- Ad Martyres (A los mártires)
- De Spectaculis (Sobre los espectáculos)
- De Idolatria (Sobre la idolatría)
- Accedit ad Scapulam liber (Libro a Escápula)
- Obras de debate y discusión
- De Oratione (Sobre la oración)
- De Baptismo (Sobre el bautismo)
- De Poenitentia (Sobre el arrepentimiento)
- De Patientia (Sobre la paciencia)
- Ad Uxorem libri duo (Dos libros a su esposa)
- De Cultu Feminarum lib. II (Dos libros sobre el adorno de las mujeres)
- Obras sobre la doctrina cristiana
- De Corona Militis (Sobre la corona del soldado)
- De Fuga in Persecutione (Sobre la huida en la persecución)
- Adversus Gnosticos Scorpiace (Contra los gnósticos, el escorpión)
- Adversus Praxeam (Contra Práxeas)
- Adversus Hermogenem (Contra Hermógenes)
- Adversus Marcionem libri V (Cinco libros contra Marción)
- Adversus Valentinianos (Contra los valentinianos)
- Adversus Judaeos (Contra los judíos)
- De Anima (Sobre el alma)
- De Carne Christi (Sobre la carne de Cristo)
- De Resurrectione Carnis (Sobre la resurrección de la carne)
- Obras sobre la moral y la conducta
- De velandis Virginibus (Sobre el velo de las vírgenes)
- De Exhortatione Castitatis (Sobre la exhortación a la pureza)
- De Monogamia (Sobre la monogamia)
- De Jejuniis (Sobre los ayunos)
- De Pudicitia (Sobre la modestia)
- De Pallio (Sobre el manto)
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Tertullian Facts for Kids