Salto (locomoción) para niños
Saltar, brincar o botar es una forma de moverse en la que un ser vivo, como un animal, o incluso un robot, se impulsa por el aire siguiendo una trayectoria. Se diferencia de correr o galopar porque, al saltar, todo el cuerpo está en el aire por un tiempo más largo y el impulso inicial es hacia arriba.
Algunos animales, como los canguros, usan el salto como su forma principal de moverse. Otros, como las ranas, lo usan para escapar rápidamente de peligros. Saltar también es muy importante en muchos deportes y actividades, como el salto de longitud, el salto de altura y el salto de obstáculos.

Contenido
¿Cómo funciona el salto? La física detrás del movimiento
Todo salto comienza cuando aplicas fuerza contra una superficie, como el suelo o el agua. Esa superficie, a su vez, te empuja hacia arriba, impulsándote. Por ejemplo, los delfines saltan fuera del agua y las ranas saltan desde el suelo.
La trayectoria del salto: ¿Qué forma tiene?
Cuando saltas, tu cuerpo sigue una trayectoria curva en el aire, como un arco. Esta trayectoria se llama balística. Una vez que dejas el suelo, tu camino en el aire está determinado por la velocidad y el ángulo con el que te impulsaste. Por eso, un pájaro que salta para empezar a volar no se considera que "salta" una vez que está en el aire, porque ya está controlando su vuelo.
La distancia, el tiempo y la altura de tu salto dependen de dos cosas: el ángulo con el que te lanzas y la velocidad inicial. Para saltar la mayor distancia posible en horizontal, el ángulo ideal es de 45 grados. Sin embargo, cualquier ángulo entre 35 y 55 grados te permitirá alcanzar casi la distancia máxima.
La energía y la potencia en el salto
Los músculos de tu cuerpo hacen un trabajo físico para añadir energía a tu salto. Cuanto más trabajo hagan tus músculos, mayor será la velocidad con la que te impulsas. Esto significa que saltarás más rápido y el tiempo que pasas impulsándote será más corto.
La potencia de tus músculos (cuánto trabajo pueden hacer en un tiempo determinado) y la distancia que pueden empujar (como la longitud de tus piernas) son clave para la altura y la distancia de un salto. Por eso, muchos animales que saltan tienen piernas largas y músculos fuertes, diseñados para generar la máxima potencia.
Sin embargo, los músculos tienen un límite en la potencia que pueden generar. Para superar esto, muchas especies usan elementos elásticos, como los tendones. Estos elementos se estiran y almacenan energía, como un muelle. Luego, pueden liberar esa energía mucho más rápido que los músculos, lo que aumenta la potencia del salto a niveles que los músculos solos no podrían alcanzar.
Saltos desde parado o en movimiento
Puedes saltar desde una posición quieta o mientras te mueves, como al correr. Cuando saltas en movimiento, aprovechas la velocidad horizontal que ya tienes para añadirle un impulso vertical, manteniendo la mayor parte de tu velocidad hacia adelante.
Los saltos en movimiento suelen ser más potentes que los saltos desde parado. Esto se debe a que ya tienes energía por tu velocidad horizontal antes de saltar. Por eso, los atletas pueden saltar distancias mucho mayores si toman carrera antes de saltar.
¿Cómo están hechos los animales que saltan? La anatomía del salto
Los animales tienen muchas partes de su cuerpo adaptadas para saltar. Estas adaptaciones se refieren solo a cómo se impulsan. Si un animal usa el aire para extender su salto o controlarlo después de impulsarse, eso ya se considera planear o paracaidismo.
Los animales acuáticos rara vez tienen adaptaciones especiales para saltar. Los que saltan bien suelen estar adaptados para la velocidad en el agua y simplemente nadan muy rápido hacia la superficie para impulsarse. Algunas especies acuáticas que pueden saltar en tierra, como los peces saltarines del fango, lo hacen moviendo rápidamente su cola.
Las patas y extremidades: Claves para el impulso
En los animales terrestres, las patas son la parte principal para impulsarse, aunque algunas especies usan sus colas. Las características comunes de los animales saltadores son:
- Patas largas: Aumentan el tiempo y la distancia que el animal puede empujar contra el suelo, lo que permite un salto más potente y rápido.
- Músculos grandes en las patas: Generan más fuerza, mejorando el rendimiento del salto.
- Elementos adicionales en las extremidades: Muchos animales saltadores tienen huesos del pie y del tobillo más largos, con articulaciones extra. Esto añade más segmentos a la pata y aumenta su longitud total.

Las ranas son un gran ejemplo de estas adaptaciones. Sus patas traseras pueden ser casi el doble de largas que su cuerpo, y los músculos de sus patas pueden representar hasta el 20% de su peso. Además, no solo tienen el pie, la pantorrilla y el muslo alargados, sino que sus huesos del tobillo se extienden con una articulación extra, y sus huesos de la cadera también son más grandes y tienen más movilidad. Gracias a esto, las ranas son campeonas de salto entre los vertebrados, pudiendo saltar más de cincuenta veces la longitud de su cuerpo, ¡lo que equivale a más de dos metros y medio!
Aumento de potencia con energía almacenada
Los saltamontes son famosos por usar el almacenamiento de energía elástica para saltar más lejos. Como ya vimos, la potencia es clave para la distancia del salto, pero los músculos tienen un límite. Para superar esto, los saltamontes "enganchan" sus patas con un mecanismo interno mientras sus músculos estiran un elemento elástico llamado apodema (parecido a un tendón). Cuando el gancho se suelta, el apodema libera rápidamente su energía. Como el apodema libera energía más rápido que los músculos, la potencia de su salto es mayor que la que los músculos podrían producir solos.
Imagina que lanzas una flecha con la mano frente a usar un arco. El arco (almacenamiento elástico) permite que tus músculos trabajen de una manera más eficiente y produzcan más energía de la que podrían solos, mientras que el arco libera esa energía mucho más rápido. Este uso de energía elástica también se ha encontrado en mamíferos y ranas que saltan, aumentando su potencia de dos a siete veces más que la de sus músculos solos.
Herramientas y ejercicios para saltar más alto
La altura de un salto se puede aumentar usando una cama elástica, que te impulsa hacia arriba. También se puede lograr convirtiendo la velocidad horizontal en velocidad vertical con la ayuda de estructuras como un medio-tubo en deportes extremos.
Existen varios ejercicios que pueden ayudar a un atleta a saltar más alto. Una categoría son los ejercicios pliométricos, que consisten en repetir ciertos movimientos de salto para mejorar la velocidad, la agilidad y la potencia.
Véase también
En inglés: Jumping Facts for Kids