Milagro de los peces para niños
El milagro de los peces (en valenciano miracle dels peixets) fue un acontecimiento religioso que, según la tradición, tuvo lugar en julio de 1348 entre los actuales municipios de Alboraya y Almácera (Huerta Norte, Valencia). El milagro se conmemora con una romería el lunes de Pentecostés a la ermita erigida en recuerdo de tal suceso.
Según la leyenda, un converso llamado Hassam-Arda, que estaba gravemente herido, llamó al cura de Alboraya (ya que Almácera pertenecía entonces eclesiásticamente a esa localidad) para recibir el Santo Viático. El parróco, al ir a cruzar el Carraixet, que venía crecido por una fuerte lluvia, cayó al agua junto a su caballo, perdiendo la arqueta donde contenía las sagradas formas. El religioso decidió volver a Alboraya, y más tarde acudieron a él unos labradores diciendo que habían visto unas luces brillantes en el barranco, que resultaron ser dos peces con las formas en la boca. Así pues, el párroco recogió dichas formas con un cáliz, que se conserva en Alboraya, mientras que la arqueta está custodiada en Almácera. Existe una polémica sobre si el cura iba a Almácera o volvía de allí, centrada en que si iba a Almácera llevaría tres formas y si volvía, llevaría dos. Por tanto, en el escudo de Alboraya aparecen tres peces y en el de Almácera, dos.
A raíz de este suceso, Almácera solicitó al obispo de Valencia una parroquia propia, cosa que consiguió en 1352 gracias a la mediación de Hug de Fenollet.