Mario Kaplún para niños
Mario Kaplún (18 de febrero de 1923 - 10 de noviembre de 1998) fue un importante educomunicador, radialista (productor de radio) y escritor de Argentina. Se le recuerda por impulsar la idea de la comunicación transformadora, que es lo opuesto a la "educación bancaria".
Mario Kaplún: Un Pionero de la Comunicación Educativa
¿Quién fue Mario Kaplún?
Mario Kaplún tuvo su primera experiencia en la comunicación a los 17 años. Creó un programa para invitar a otros jóvenes a un club de debate. A los 19 años, lanzó su primer programa de radio educativo, llamado «Escuela de Aire». Este programa era una serie sobre la historia de Argentina, presentada como un radioteatro (una obra de teatro para la radio).
Desde entonces, Mario Kaplún participó y produjo muchos programas de radio. Estos programas eran de debate periodístico y educativos. Algunos de sus programas se transmitieron no solo en América Latina, sino también en Filipinas y Estados Unidos. Además, fueron traducidos a idiomas como el portugués, el quechua y el aimara.
Entre 1978 y 1985, vivió en Venezuela. Allí coordinó el área de Comunicación y Cultura Popular en una organización llamada CESAP. También dio cursos sobre comunicación con fotos, videos y periodismo, así como sobre comunicación popular y teatro.
También vivió en Uruguay. Fue uno de los fundadores de la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de la República. Hoy, esta escuela se llama Facultad de Información y Comunicación. Allí se dedicó a investigar, gestionar la parte académica y enseñar hasta su fallecimiento en 1998.
Sus Ideas Clave sobre la Comunicación
Mario Kaplún tomó las ideas sobre educación de Paulo Freire y las aplicó a la comunicación.
Comunicación "Bancaria" vs. Comunicación "Transformadora"
Kaplún criticaba la "comunicación bancaria". Este concepto lo adaptó de la "educación bancaria" de Freire. En la educación bancaria, el maestro "deposita" conocimientos en la mente del alumno, como si fuera un banco. Kaplún explicó que, de la misma manera, en la comunicación bancaria, quien emite el mensaje (el comunicador) "deposita" información en la mente de quien lo recibe (el receptor).
Él decía que:
- A cada tipo de educación le corresponde una forma de comunicación. Así como existe una «educación bancaria», existe una «comunicación bancaria». El que emite el mensaje es como el maestro que habla y el que recibe debe escuchar sin participar. O es el comunicador que «sabe» y envía su mensaje (su artículo, su programa de radio, su video) desde su propia visión. El lector (u oyente) «no sabe» y solo tiene el papel de recibir la información. Su forma de comunicación es un monólogo, es decir, habla uno solo.
Mario Kaplún defendía que la verdadera comunicación ocurre cuando hay un diálogo. Él pensaba que la mayoría de los medios de comunicación deberían llamarse "medios de información" o "medios de difusión". Esto es porque, en su opinión, no promueven un diálogo real con la sociedad.
El Concepto de "Emirec"
Kaplún promovió el término «emirec», creado por el canadiense Jean Cloutier. Esta idea dice que todas las personas tienen el derecho y la capacidad de participar en el proceso de comunicación. Pueden actuar alternativamente como emisores (emi) y como receptores (rec) de mensajes.
La Comunicación Participativa
La comunicación para el cambio social busca evitar que la información sea transmitida solo de arriba hacia abajo, es decir, de los expertos a la gente. En cambio, busca que la información se use en un contexto de diálogo y debate. Así, las personas pueden tener un papel activo en los cambios. Es una forma de comunicación que promueve procesos a largo plazo. Prioriza lo que es bueno para el grupo sobre lo individual. También prefiere motivar a las personas en lugar de solo persuadirlas o imponerles ideas.
Se propone que la comunicación no debe convencer, sino facilitar el diálogo. Y no debe enfocarse solo en los comportamientos individuales, sino en las formas en que la sociedad se expresa, su cultura y su forma de organizarse.
También se sugieren modelos intermedios. Por ejemplo, aquellos que se centran en escuchar atentamente a los demás. Esto permite incorporar sus ideas, intereses y deseos en los mensajes. Así, la otra persona también puede participar en la creación de esos mensajes.
Técnicas para una Comunicación Activa
A lo largo de su carrera, Mario Kaplún conoció, practicó y promovió diferentes técnicas para lograr una comunicación basada en el diálogo. Estas técnicas buscaban evitar el modelo de comunicación bancaria. Algunas de las prácticas que él impulsó son:
- Rotación de los lugares de comunicación: Se pueden crear programas y periódicos en lugares abiertos, en la calle o en sitios de reunión. Es mejor trabajar con grupos pequeños, ya que esto facilita que las personas participen, especialmente aquellas a quienes les cuesta expresarse en grupos grandes. Esto ayuda a que se compartan diferentes opiniones.
- Temas locales y conexión con la vida diaria: Es importante dar prioridad a los temas de la comunidad local. Pero también se pueden tratar temas nacionales e internacionales, siempre que se relacionen con las experiencias de la gente con la que queremos comunicarnos. Se busca presentar estos temas de forma que los lectores no se sientan ajenos o lejanos. Así, pueden entender cómo y por qué esos asuntos les afectan en sus vidas.
- Evaluación colectiva de la comunicación: Las personas también pueden participar dando su opinión sobre la elección de los temas, si fueron fáciles de entender o si fueron útiles. Sus opiniones sobre lo que les gustó o no, y lo que comprendieron, sirven para mejorar la forma de comunicarse.
- Problematización del mensaje: Los mensajes no buscan resolver todas las dudas. En cambio, buscan generar debates entre las personas. A través del diálogo, la gente decide qué soluciones adoptar. Esto permite compartir ideas, resumir discusiones y crear un ambiente donde se puedan establecer relaciones e interpretar los temas tratados.
- Prealimentación: Consiste en preguntar a las personas sobre sus intereses, preocupaciones y deseos. Esto se hace a través de discusiones y reflexiones en grupo antes de crear cualquier tipo de comunicación. Así, los conocimientos individuales se comparten y el grupo se enriquece. De esta manera, es posible elegir los temas, saber a qué nivel adaptarlos y enfocarlos para que sean útiles en la vida diaria de las personas.
La Comunicación en el Cuidado de la Salud
Cuando nos comunicamos, lo hacemos usando nuestros sentimientos, conocimientos, inteligencia, valores y toda nuestra personalidad. Esto significa que la forma de ser de quien comunica influye en el mensaje que da.
Para una buena comunicación e información en el ámbito de la salud, se necesitan dos cosas importantes: la capacidad de empatía y la capacidad de resonancia afectiva. Ambas son parte de la inteligencia emocional. La resonancia afectiva es la habilidad de no solo reconocer las emociones de otra persona, sino también de sentir una conexión con ellas, de apoyarlas y aceptarlas. Al igual que la empatía, no significa sentir exactamente lo mismo que la otra persona. Solo es necesario mostrar que lo que siente la otra persona es válido y que lo hemos comprendido. Para lograr esto:
- Es importante desarrollar la inteligencia emocional, especialmente la empatía y la capacidad de resonancia, para comunicarse bien en el ámbito de la salud.
- Al comunicarnos, debemos considerar las características de las personas, tanto si están sanas como si son pacientes.
- Debemos respetar las condiciones básicas necesarias para lograr una comunicación efectiva en nuestro trabajo en el campo de la salud.