Diego de Tiedra para niños
Diego de Tiedra fue un artista muy talentoso del Renacimiento español. Se dedicó a la escultura, a tallar madera (como un entallador o imaginero) y a trabajar la piedra (como un cantero). Falleció en el año 1559. La mayor parte de su trabajo lo realizó en la provincia de Cuenca, en España.
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Las Obras de Diego de Tiedra
Diego de Tiedra creó muchas obras importantes. Un retablo es una estructura grande y decorada que se coloca detrás del altar en las iglesias. A menudo tiene esculturas y pinturas.
Retablos y Esculturas
Retablo de Montalbanejo
En el año 1536, Diego de Tiedra hizo un retablo con imágenes muy bonitas para la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción en Montalbanejo.
Retablo de Belmonte
También se cree que él hizo un retablo en la Capilla de los Gómez de León, en Belmonte (Cuenca). Este retablo está dedicado a la Anunciación, que es el momento en que se le anuncia a la Virgen María que va a ser madre.
La imagen de la Virgen, que es una escultura exenta (es decir, que se puede ver por todos lados), está en el centro del retablo. El resto del retablo tiene relieves, que son esculturas que sobresalen de una superficie plana, mostrando escenas de la vida de María. En uno de estos relieves está grabada la fecha de 1546. La parte superior del retablo, llamada ático, tiene una escena en bulto (esculturas tridimensionales) que representa el Calvario.
Retablo de la Catedral de Cuenca
En 1551, Diego de Tiedra recibió un encargo del canónigo Juan Fernández de Heredia para la catedral de Cuenca. Creó un retablo dedicado a san Fabián y san Sebastián. Las imágenes de estos santos son esculturas exentas de madera policromada (pintada con muchos colores) y ocupan la parte central del retablo.
En la parte superior, el Padre Eterno aparece mostrando la cruz dentro de una hornacina avenerada, que es un hueco en la pared con forma de concha. También hay relieves que muestran escenas del martirio de los santos Onofre.
Otras Obras y su Legado
En el Museo Diocesano de Cuenca se puede ver una escultura de La Resurrección que se conserva allí.
Diego de Tiedra falleció en 1559 mientras estaba trabajando en la iglesia de Villares del Saz. Después de su muerte, otros canteros de Cuenca, Sebastián Arnaya y Juan de la Sierra, continuaron con las obras de piedra que él había comenzado en la iglesia.