Trinidad Grund para niños
Trinidad Grund y Cerero del Campo (nacida en Sevilla el 28 de febrero de 1821 y fallecida en Málaga el 31 de agosto de 1896) fue una persona muy importante en la ciudad de Málaga. Dedicó su vida y su dinero a ayudar a los demás. Es la única mujer en Málaga que tiene una calle y una plaza con su nombre. Su obra más conocida es el Asilo de San Manuel, un lugar donde se cuidaba a niños sin padres y a personas que lo necesitaban. Allí, niños y niñas recibían clases, y las mujeres aprendían oficios como panadería y planchado.
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¿Quién fue Trinidad Grund?
Los primeros años de Trinidad Grund
Trinidad Grund nació en Sevilla el 28 de febrero de 1821. Su padre, Federico Grund Steinert, era cónsul de Prusia en Sevilla y venía de Hamburgo. Su madre, Trinidad Cerero, era de Sevilla. Tenía dos hermanos, Julia y Constancio.
En 1832, el rey Federico Guillermo III de Prusia pidió a su padre que se fuera del país por diferencias con el gobierno. Antes de irse, Federico envió a su esposa e hijas a Málaga, una ciudad que en ese momento era más próspera. Así fue como Trinidad Grund llegó a Málaga cuando era una niña.
Momentos difíciles en la vida de Trinidad
En enero de 1848, Trinidad y su hermana Julia se casaron con Manuel Agustín y Tomás Heredia Libermore, hijos de un importante empresario llamado Manuel Agustín Heredia. El matrimonio de Trinidad con Manuel duró solo cuatro años. Manuel falleció el 30 de enero de 1852, a los 34 años. Trinidad tenía 31 años, dos hijos pequeños y esperaba un tercero. Cuatro meses después, su hijo mayor, Manolito, también falleció.
El 29 de marzo de 1856, Trinidad viajó en barco hacia Sevilla para asistir a una feria y animarse después de las pérdidas de su esposo e hijo. Iba con sus hijas María Isabel y Manuela, de 6 y 3 años, dos cuñados y una sirvienta. El barco naufragó, y de 82 pasajeros, 64 perdieron la vida. Trinidad logró sobrevivir al quedar enganchado su vestido a un banco de madera, lo que la mantuvo a flote. Sin embargo, sus dos hijas fueron arrastradas por el agua y también fallecieron.
La dedicación de Trinidad Grund a la caridad
Después de estas tragedias, a los 35 años, Trinidad Grund decidió dedicar su vida y su fortuna a ayudar a los demás.
El Asilo de San Manuel: Un legado duradero
Siguiendo el deseo de su esposo de crear una escuela para trabajadores, sus viudas e hijos, Trinidad fundó en 1859 el Asilo de San Manuel. Lo construyó en unos terrenos de su propiedad en el barrio de El Bulto. Puso a las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl a cargo de la enseñanza. Se cree que Trinidad eligió el nombre "San Manuel" en recuerdo de su esposo e hijo fallecidos, ya que no hay un santo con ese nombre. Hoy en día, más de 150 años después, el lugar sigue funcionando como el Colegio San Manuel.
Otras obras benéficas y ayuda en epidemias
Trinidad Grund también participó en la creación del colegio San Juan de Dios "Goleta" en 1861 y en la construcción del Asilo de los Ángeles. Además, pagó la construcción de la capilla del Hospital Civil. Su trabajo fue muy importante para ayudar a los habitantes de Málaga durante varias epidemias, como el cólera y el tifus.
También formó parte de un grupo de mujeres de la alta sociedad malagueña que ayudaron a los heridos de la guerra de África en el Hospital de San Julián.
Reconocimientos y valentía de Trinidad Grund
Por todas sus obras de caridad, la reina Isabel II de España le concedió la Banda de Damas Nobles de la Orden de María Luisa. Sin embargo, Trinidad Grund, que era muy religiosa, devolvió la Banda cuando se enteró de que la reina había reconocido el nuevo reino de Italia, que se había formado a costa de los Estados Pontificios. Esto le costó un tiempo de exilio en Roma hasta que el gobierno de Isabel II cambió y pudo regresar a Málaga.
También se habló mucho en la ciudad de su valiente actuación al inicio de la Primera República. Cuando supo que la Junta Revolucionaria planeaba destruir los conventos de Málaga, se presentó en el Palacio del Obispo, donde estaba la Junta, y exigió que se respetara a las religiosas y sus propiedades. Los revolucionarios aceptaron, y así se pudieron salvar muchos conventos de la ciudad.
La Cueva de Doña Trinidad Grund
En 1860, Trinidad Grund compró los terrenos de la cueva de Ardales, también conocida como Cueva de Doña Trinidad Grund o de la Calinoria, en el municipio de Carratraca. Esta cueva estuvo cerrada por más de 8.000 años y su entrada se descubrió en 1821 después de un terremoto. Doña Trinidad la preparó para que pudiera ser visitada y hasta llegó a ser guía para la gente importante de la época. Fue la primera cueva en España en ser usada como atractivo turístico para mostrar sus grabados y pinturas rupestres.
Fallecimiento
Trinidad Grund falleció el 31 de agosto de 1896, a los 75 años, en su casa de la calle Peligro, que más tarde sería conocida como calle Trinidad Grund. Su muerte fue noticia en los periódicos de todo el país. Fue enterrada junto a su esposo Manuel en el panteón de la familia Heredia en el Cementerio de San Miguel.