Maretas de Guatisea para niños
Las maretas de Guatisea son seis grandes depósitos que se usaban para guardar el agua de lluvia. Fueron construidos en la Montaña Guatisea, en el municipio de San Bartolomé en la isla de Lanzarote, España.
Datos para niños Maretas de Guatisea |
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![]() Maretas de Guatisea durante su restauración parcial en el año 2013.
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Ubicación | ||
Continente | Europa | |
Región | España | |
Archipiélago | ![]() |
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Isla | Lanzarote | |
País | ![]() |
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Coordenadas | 28°59′22″N 13°37′38″O / 28.989555555556, -13.627188888889 | |
Historia | ||
Tipo | Depósito de agua | |
Época | 1927 | |
Abandono | 1965-2018 | |
Mapa de localización | ||
Ubicación en Lanzarote
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Contenido
¿Cómo son las Maretas de Guatisea?
Estos seis depósitos están excavados dentro de la montaña. Además, tienen dos filtros a los lados y un gran canal que recogía el agua de la lluvia que bajaba por la ladera. Más tarde, se construyó un sistema de tuberías desde las Maretas hasta la plaza del pueblo de San Bartolomé. Desde allí, el agua se distribuía a las personas que la necesitaban.
La montaña donde se encuentran las Maretas es un lugar con mucha historia. En sus laderas se han encontrado muchos restos de los majos, que fueron los primeros habitantes de la isla antes de la llegada de los europeos. En la roca volcánica de la montaña se pueden ver dibujos y formas variadas, como cazoletas.
¿Por qué se construyeron las Maretas?
En la isla de Lanzarote llueve muy poco, menos de 150 milímetros al año. Esta falta de agua ha sido un desafío para sus habitantes a lo largo de la historia. Desde los tiempos de los Majos, los antiguos pobladores de Lanzarote, hasta casi los años setenta del siglo XX, la gente buscaba formas de guardar la poca lluvia que caía.
Al principio, acumulaban el agua en grandes charcos que se formaban en los valles cuando llovía. A estos charcos se les llamó "maretas", un nombre que llegó por influencia del idioma francés después de la conquista de las Islas Canarias.
Después de la conquista, los depósitos de agua mejoraron. A las maretas originales se les añadieron muros de piedra y cal. También se empezaron a construir muchos aljibes por toda la isla, que eran depósitos subterráneos para almacenar el agua. A pesar de esto, seguía habiendo momentos de mucha escasez de agua. La gente tenía que irse de la isla o esperar a que llegara agua en barcos desde otras islas. La situación mejoró mucho cuando se instaló una planta desaladora en 1965, que convierte el agua del mar en agua dulce.
¿Cuándo y cómo se construyeron?
La idea de construir estas maretas en la Montaña Guatisea surgió en 1927, gracias a un concejal llamado Estanislao Salazar Carrasco. Las obras comenzaron, pero no se terminaron en ese momento. Los huecos que se habían excavado se usaron como almacén de explosivos militares durante algunos años.
Las obras se retomaron en 1949, y ya se habían excavado cuatro depósitos. En 1958, se empezó a perforar la montaña para crear el quinto depósito. Un encargado del Cabildo (el gobierno de la isla) llamado Antonio González Marrero, diseñó el proyecto para el canal de recogida de agua y los desagües. También se empezó a instalar la tubería que llevaría el agua desde las Maretas hasta la plaza del pueblo de San Bartolomé.
En 1960, se pagaron varios trabajos para arreglar el sistema de agua de los depósitos. Por ejemplo, se pagó por cemento, cubos, cal y por el transporte de arena. Ese mismo año, se diseñó el proyecto para construir el sexto depósito, que comenzó en 1961. Sin embargo, se detuvo por falta de dinero y se reanudó en 1963. A principios de 1964, se terminaron las obras de las maretas.
La construcción fue financiada por varias entidades: el Ayuntamiento de San Bartolomé, el Cabildo de Lanzarote, el gobierno provincial y el estado. También muchas personas del pueblo ayudaron de forma voluntaria, la mayoría prestando su trabajo. En la obra participaron ingenieros, jefes de obra, albañiles y otros trabajadores.
¿Qué tamaño tienen las Maretas?
Cada uno de los seis depósitos mide aproximadamente 41.45 metros de largo, 6 metros de ancho y 5 metros de alto. El suelo y las paredes se hicieron impermeables con cal y cemento para que el agua no se filtrara. El techo no está cubierto y tiene forma de arco.
¿Cómo se distribuía el agua?
Desde 1949, cuando se terminaron los primeros depósitos y hubo lluvias, se empezó a distribuir un poco de agua. Pero fue a partir de 1960 cuando la distribución de agua se hizo más organizada después de las lluvias. El ayuntamiento de ese año fijó el precio de un garrafón de 16 litros de agua en 80 céntimos. Con el tiempo, el precio del agua subió a medida que la economía de la isla mejoraba. A partir de los años setenta, era común que los camiones cisterna llevaran agua a domicilio a los vecinos de San Bartolomé.
¿Por qué se dejaron de usar?
La instalación de la planta desaladora en Las Caletas, en Arrecife, cambió la vida en la isla, ya que producía agua dulce potable a partir del agua del mar. Poco a poco, desde 1965, la red de suministro de agua dulce de la desaladora se fue extendiendo. Entre finales de los años setenta y principios de los ochenta, llegó a gran parte de la isla.
Las maretas de Guatisea, al igual que otras obras para recoger y almacenar agua en la isla, dejaron de usarse. Los canales y filtros se llenaron de arena y tierra. Hubo un intento de recuperarlas en 2013, cuando se limpiaron los canales y filtros, pero no los depósitos interiores. En 2018, el Cabildo de Lanzarote cerró las entradas de los seis depósitos para evitar que personas o animales cayeran dentro, pero esto también impidió la entrada de agua.