Máscara de Fernando VII para niños
La Máscara de Fernando VII es un término que algunos historiadores usan para describir una estrategia que habrían usado los líderes de los movimientos de independencia en Hispanoamérica. Esta estrategia consistía en decir que apoyaban al rey Fernando VII de España, mientras que en realidad buscaban la independencia de sus territorios.
Aunque hoy en día se discute si esta "máscara" existió tal cual, la idea era que, al mostrar lealtad al rey, los líderes independentistas podían evitar una reacción muy fuerte por parte de los que apoyaban a España. Esto les permitía avanzar hacia la independencia sin declararla abiertamente al principio.
Contenido
¿Por qué se usó esta estrategia?
La situación de Fernando VII
Cuando Fernando VII estaba prisionero de Napoleón Bonaparte en Francia, España estaba en una situación difícil. Se formaron gobiernos provisionales en España, como las Cortes de Cádiz, que crearon una Constitución en 1812. Esta Constitución buscaba limitar el poder del rey y dar más derechos al pueblo.
Sin embargo, Fernando VII no estaba de acuerdo con esta Constitución. Él creía en el poder absoluto del rey, donde el monarca tiene toda la autoridad. Para él, cualquier idea de compartir el poder con el pueblo era una amenaza al sistema antiguo.
Diferencias entre España y América
Las Juntas de gobierno que se formaron en América, al igual que las Cortes en España, fueron revolucionarias en cierto modo. Ambas reconocían a Fernando VII como rey, pero querían que su poder fuera limitado. Sin embargo, pronto surgieron diferencias importantes entre las Juntas americanas y las Cortes españolas sobre cómo debía ser la nación y el territorio. Esto llevó a las primeras ideas de independencia en América.
Cuando Fernando VII regresó al trono en España, lo hizo de forma autoritaria, eliminando la Constitución de 1812 y persiguiendo a quienes apoyaban las ideas liberales. En América, esta situación impulsó a los movimientos a declarar su independencia de forma más abierta, formando nuevos países.
¿Cómo funcionaba la "Máscara"?
La idea de la "máscara" se basa en que las Juntas americanas juraban lealtad a Fernando VII, que estaba prisionero, pero no reconocían la autoridad de los gobiernos provisionales en España. Esto les permitía gobernar sus territorios con más libertad, aunque todavía no declaraban la independencia.
Cuando el gobierno español se refugió en Cádiz, muchos en América pensaron que era poco probable que los franceses fueran derrotados y que Fernando VII regresara. Por eso, rechazaron la Constitución de Cádiz.
Sin embargo, cuando Fernando VII fue liberado y regresó al trono en 1813, muchos territorios americanos, como Venezuela, Nueva Granada y el Río de la Plata, proclamaron su independencia. Por ejemplo, el Congreso de Tucumán en Argentina lo hizo el 9 de julio de 1816.
El caso del Río de la Plata
Ideas previas a la Revolución de Mayo
Antes de la Revolución de Mayo en el Río de la Plata, hubo una idea importante conocida como el Silogismo de Chuquisaca. Fue propuesta por Bernardo de Monteagudo en 1809. Él argumentó que si el rey de España estaba impedido de reinar, entonces los territorios americanos, que eran posesiones personales del rey, tenían derecho a gobernarse a sí mismos.
Esta idea fue un paso importante para la Revolución de Chuquisaca y la Junta Tuitiva de La Paz, que aunque fueron reprimidas, establecieron el principio de que el pueblo tiene derecho a elegir a sus gobernantes si las autoridades legítimas están ausentes.
La Revolución de Mayo
En 1810, el virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros fue destituido en Buenos Aires porque se consideró que su autoridad ya no era válida. Esto dio inicio a la Revolución de Mayo. El virrey fue reemplazado por la Primera Junta, que juró:
"...desempeñar legalmente el cargo, conservar íntegra esta parte de América a nuestro Augusto Soberano el señor don Fernando Séptimo, y sus legítimos sucesores, y guardar puntualmente las Leyes del Reino."
Las verdaderas intenciones de independencia no se hicieron públicas de inmediato debido a la presión de Gran Bretaña. Los británicos querían comerciar libremente con las colonias españolas, pero también eran aliados de España contra Francia en las guerras de ese momento. No querían que España tuviera que desviar sus fuerzas militares para luchar en América.
A pesar de esto, líderes como Cornelio Saavedra, presidente de la Primera Junta, afirmaron en sus memorias que la Revolución de Mayo nunca fue un acto de lealtad a Fernando VII. Él escribió que "por política" fue necesario usar el nombre de Fernando VII para que el movimiento fuera aceptado y para evitar un escándalo.
Saavedra explicó en una carta de 1811 que usar el nombre de Fernando VII era una estrategia para evitar que Inglaterra se convirtiera en su enemiga. Dijo que lo importante era allanar el camino para un Congreso que pudiera establecer la forma de gobierno que se considerara conveniente.
También Manuel Belgrano, otro miembro de la Primera Junta, veía la Revolución de Mayo como un paso planeado hacia la independencia. Él escribió que los eventos de 1808 en España avivaron las ideas de libertad en América y que sus amigos lo llamaron a Buenos Aires para "trabajar por la patria para adquirir la libertad e independencia deseada". Belgrano incluso se inspiró en George Washington y la Revolución estadounidense para lograr que América se convirtiera en una nación libre e independiente.
Incluso Bernardo de Monteagudo, un líder más radical, se burlaba del uso de la "máscara" de Fernando VII, viéndola como una excusa para los conservadores.
El caso de Nueva España (México)
En Nueva España, usar el nombre de Fernando VII y su imagen como rey era una forma de atraer a personas indecisas y de intentar influir en los leales a la monarquía española para que apoyaran una causa revolucionaria que parecía ser una reforma.
En una carta de 1812, el líder José María Morelos pidió que se quitara la "máscara" a la independencia y que se dejara de mencionar al rey. Él siempre creyó que el objetivo real era la separación de España.
También hay una carta de Ignacio Allende a Miguel Hidalgo y Costilla donde Allende admite que era una táctica hacer creer que el movimiento era para apoyar al rey Fernando VII. Esto se debía a que la mayoría de la gente en México seguía siendo leal a la Corona española y a la Iglesia católica, que se oponía a las ideas liberales.
Así, el movimiento insurgente se presentaba como una lucha para que Fernando VII regresara al trono, mientras que en realidad buscaba introducir ideas de libertad y autogobierno, para desarrollar una revolución que fuera contraria a la tradición monárquica que decían defender.
Véase también
En inglés: Historiography of the May Revolution Facts for Kids
- Revolución de Mayo
- Silogismo de Chuquisaca
- Fernando VII