Felipe IV (1623-1628) para niños
Datos para niños Felipe IV |
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Año | hacia 1623, repintado hacia 1628 | |
Autor | Diego Velázquez | |
Técnica | Óleo sobre lienzo | |
Estilo | Barroco | |
Tamaño | 198 cm × 101,5 cm algo recortado a los lados | |
Localización | Museo del Prado, Madrid, ![]() |
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País de origen | España | |
El retrato oficial de Felipe IV, que lo muestra de cuerpo entero y vestido de negro, fue pintado por Velázquez alrededor de 1623. Fue uno de los primeros retratos que el artista hizo del rey poco después de mudarse a Madrid. El mismo pintor lo modificó por completo hacia 1628.
Esta obra de arte proviene del Palacio del Buen Retiro. En un inventario de 1700, se describía como un retrato del joven Felipe IV, hecho al estilo inicial de Velázquez. En 1791, se trasladó al Palacio Real Nuevo. Allí, en un inventario de 1814, se le describió como "retrato de Felipe 4º con un papel en la mano vestido de negro y golilla apoyado en una mesa". Estuvo en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando desde 1816 hasta que finalmente llegó al Museo del Prado en 1828, donde se encuentra hoy.
Contenido
Historia del Retrato de Felipe IV
¿Cómo Velázquez Pintó al Rey por Primera Vez?
Según cuenta Francisco Pacheco, quien fue maestro y suegro de Velázquez, el pintor llegó a Madrid en agosto de 1623. Pocos días después, hizo un retrato de Juan de Fonseca y Figueroa, una persona importante en la corte. Este retrato fue llevado al palacio y, al verlo, se le encargó a Velázquez que pintara al rey.
El rey posó para Velázquez el 30 de agosto de 1623. Este primer retrato, que se hizo en un solo día, sirvió de base para otras obras. Por ejemplo, se usó para un retrato del rey a caballo y para copias privadas. Una de estas copias fue encargada por doña Antonia de Ipeñarrieta, quien pagó a Velázquez por tres retratos en diciembre de 1624: uno del rey (que ahora está en el Metropolitan Museum of Art de Nueva York), otro del Conde-Duque de Olivares y uno de su esposo fallecido.
La Evolución del Retrato Real
Los expertos han estudiado mucho este primer retrato. Algunos creen que era solo un busto (la parte superior del cuerpo) hecho rápidamente. No es probable que el rey posara muchas horas al principio. Pacheco se asombraba de que el rey posara sentado durante tres horas seguidas para Velázquez cuando lo retrató a caballo, después de 1630.
Este primer retrato, que era como un apunte o un boceto, se usó más tarde para completar el retrato ecuestre (a caballo) en el taller de Velázquez. Ese retrato ecuestre original ya no existe.
Algunos historiadores, como José López-Rey, creen que el retrato que vemos hoy en el Museo del Prado es el mismo que el primero, pero que Velázquez lo modificó por completo alrededor de 1628. Las radiografías de la pintura muestran estos cambios.
Descripción del Retrato de Felipe IV
¿Qué Revelan las Radiografías del Cuadro?


Las radiografías de la pintura muestran que Velázquez hizo muchos cambios. Prácticamente ninguna parte del lienzo original quedó sin tocar. Por ejemplo, la posición de las piernas era diferente al principio, y la capa era más larga. También cambió la posición de las manos, la altura de la mesa y la forma del rostro del rey, haciéndolo más delgado y afilado. El traje también fue completamente rediseñado.
Velázquez hizo estos cambios para que la figura del rey se viera más elegante y esbelta. Quería que el rey pareciera más erguido y majestuoso.
Detalles y Símbolos en la Obra
El resultado final es una obra elegante y sencilla. Velázquez usó pinceladas precisas y pocos colores. La majestuosidad del rey se muestra por su propia dignidad y postura. Los símbolos de su poder están presentes de forma discreta:
- El Toisón de Oro: Cuelga de una cinta negra, no de un collar de oro como en la primera versión. Esto refuerza una imagen de austeridad.
- La espada de la justicia: Sobre ella descansa la mano derecha del rey.
- El memorial o billete: Lo lleva en la mano izquierda, simbolizando sus funciones de gobierno.
- El bufete: Sobre él reposa el sombrero de copa alta, también relacionado con su papel como gobernante.
Copias del Retrato Original
El retrato del Prado, en su estado original (antes de las modificaciones), se conoce gracias a las copias que se hicieron en el taller de Velázquez. Al menos dos de estas copias se conservan: una en el Museo de Bellas Artes de Boston y otra en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York. Esta última fue pintada para doña Antonia Ipeñarrieta.
También existen varias copias de la versión final del retrato. Algunas salieron del taller de Velázquez, como la que se encuentra en el Museo Isabella Stewart Gardner de Boston.
Galería de imágenes
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Velázquez (?), Felipe IV, 1624, (200 x 102,9 cm), Nueva York, Metropolitan Museum of Art, una copia del retrato de Felipe IV del Museo del Prado en su estado original, antes de la remodelación de 1628.
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Taller de Velázquez. Copia conservada en el Museo Isabella Stewart Gardner de Boston del retrato oficial de Felipe IV en su estado final.