Estimulación cerebral profunda para niños
La Estimulación Cerebral Profunda (conocida como DBS por sus siglas en inglés) es un tipo de tratamiento médico que se realiza mediante una cirugía. Consiste en colocar un pequeño aparato dentro del cuerpo que envía impulsos eléctricos a zonas muy específicas del cerebro. Estos impulsos ayudan a mejorar los síntomas de algunas enfermedades que no responden bien a otros tratamientos, como la enfermedad de Parkinson, el temblor esencial (un tipo de temblor incontrolable) o la distonia (trastornos del movimiento).
Aunque esta técnica se ha usado por bastante tiempo, los científicos aún están investigando exactamente cómo funciona. Lo que sí se sabe es que logra cambiar la actividad del cerebro de una forma controlada y, lo más importante, sus efectos se pueden ajustar o incluso revertir.
Contenido
Estimulación Cerebral Profunda: Un Tratamiento para el Cerebro
¿Cómo Ayuda la Estimulación Cerebral Profunda?
La estimulación cerebral profunda utiliza un dispositivo médico que se implanta con cirugía. Este dispositivo funciona con una batería y se llama neuroestimulador. Es parecido a un marcapasos cardíaco y tiene un tamaño similar al de un reloj pequeño. Su función es enviar pequeñas señales eléctricas a áreas específicas del cerebro que controlan el movimiento. Al hacer esto, el neuroestimulador bloquea las señales nerviosas anormales que causan temblores y otros síntomas de algunas enfermedades.
¿Cómo se Prepara el Cerebro para la Estimulación?
Antes de la cirugía, los médicos usan técnicas especiales como la resonancia magnética (IRM) o la tomografía computarizada (TC). Estas herramientas les permiten ver el cerebro con mucho detalle para encontrar el punto exacto donde las señales eléctricas nerviosas están causando los problemas. Algunos cirujanos también pueden usar un método llamado registro con microelectrodos. Esto implica usar un cable muy pequeño que mide la actividad de las células nerviosas en la zona, para asegurarse de que el objetivo sea el más preciso posible. Generalmente, las áreas del cerebro que se buscan son el tálamo, el núcleo subtalámico y el globo pálido.
Las Partes del Sistema de Estimulación Cerebral
El sistema de estimulación cerebral profunda tiene tres partes principales:
- El electrodo: Es un cable muy delgado y aislado. Se introduce a través de una pequeña abertura en el cráneo y se implanta directamente en el cerebro. La punta de este electrodo se coloca justo en el área del cerebro que se quiere estimular.
- La extensión: Es otro cable aislado que se pasa por debajo de la piel, desde la cabeza, pasando por el cuello y el hombro. Este cable conecta el electrodo con el neuroestimulador.
- El neuroestimulador: También conocido como la "batería", es la tercera parte. Generalmente se implanta debajo de la piel, cerca de la clavícula. En algunos casos, puede colocarse más abajo en el pecho o en el abdomen.
Una vez que todo el sistema está en su lugar, el neuroestimulador envía impulsos eléctricos a través del cable de extensión y el electrodo hasta el cerebro. Estos impulsos actúan para interferir y bloquear las señales eléctricas que están causando los síntomas de la enfermedad.
¿Qué Ventajas Ofrece este Tratamiento?
Una gran ventaja de la estimulación cerebral profunda, a diferencia de otros tratamientos más antiguos, es que sus efectos son reversibles y se pueden ajustar. Esto significa que los médicos pueden modificar la estimulación si es necesario, y no se daña el tejido cerebral de forma permanente.
El éxito de este procedimiento depende de varios factores. Es muy importante que un equipo de médicos con experiencia trabaje en conjunto para obtener los mejores resultados. La colocación correcta del electrodo en el cerebro es el paso más importante. También es fundamental elegir bien al paciente, que tenga expectativas realistas y que neurólogos con experiencia manejen el estimulador y la enfermedad que se está tratando.
Véase también
En inglés: Deep brain stimulation Facts for Kids
- Neurocirugía
- Implante cerebral