Diego Fernández de Sande para niños
Diego Fernández de Sande fue un importante escultor del estilo barroco español. Nació en Noya a finales del siglo XVII y falleció en Celanova en 1731. Trabajó principalmente en Santiago de Compostela, donde fue uno de los maestros de obras de su famosa catedral, junto a Fernando de Casas Novoa.
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¿Quién fue Diego Fernández de Sande?
Diego Fernández de Sande fue un artista que vivió en una época donde el arte barroco era muy popular en España. Este estilo se caracteriza por ser muy detallado, emotivo y con mucho movimiento. Aunque no se sabe mucho sobre cómo aprendió a esculpir, sus obras demuestran su gran talento.
Sus Primeros Trabajos Importantes
En julio de 1721, Diego Fernández de Sande recibió un encargo muy importante. La cofradía de la capilla de la Concepción, también conocida como la Prima, en la catedral de Santiago de Compostela, le pidió que creara un relieve para el retablo de su capilla. Este relieve representaba el Descendimiento de la cruz.
El contrato especificaba que la escultura debía ser de madera de castaño. También se le pidió que las figuras en alto relieve siguieran el modelo de un grabado que aparecía en un libro. La obra debía estar lista en seis meses, aunque hubo algunos retrasos con los pagos.
Otras Obras Destacadas en Santiago
Por esos mismos años, Sande realizó otras esculturas para la catedral de Santiago. Para la capilla de la Virgen del Pilar, esculpió una imagen de Santiago peregrino arrodillado frente a la Virgen. También creó una estatua de mármol blanco del arzobispo Antonio de Monroy para su mausoleo. Esta estatua es conocida por su realismo sencillo, mostrando al arzobispo de una manera natural y sin exageraciones.
Competencias y Retablos Perdidos
Diego Fernández de Sande también compitió con otro arquitecto, Antonio Afonsín, por la creación del retablo de la parroquia de San Félix o San Fiz de Solovio. Aunque al principio se lo dieron a Afonsín, Sande se comprometió a hacerlo por el mismo precio. Finalmente, se le encargó a él debido a su gran habilidad. Lamentablemente, este retablo ya no existe.
Otros retablos que Sande creó y que tampoco se han conservado son el de San Ramón Nonato, que hizo en 1727 para un convento, y el de San Fernando de la catedral de Santiago, del cual solo queda la imagen principal.
Trabajos en la Iglesia de los Jesuitas
En 1728, Sande se encargó de la parte escultórica del retablo mayor de la iglesia de los jesuitas en Santiago de Compostela. También esculpió un relieve de la Visitación para la misma iglesia, que ahora se encuentra en la Universidad.
El Legado de Sande
Algunos historiadores, como Manuel Murguía, mencionan otras obras que se cree que son de Sande. Entre ellas están el Cristo a la columna de la iglesia de San Agustín, el Ecce Homo de la iglesia de la VOT y unos ángeles de marfil en la iglesia de Santo Domingo.
Diego Fernández de Sande falleció en 1731 en el monasterio de San Salvador de Celanova. En ese momento, estaba en plena actividad creativa, dejando un importante legado en el arte barroco español.