Beignet para niños
Un beignet (diminutivo de beigne, ‘buñuelo’ en francés) es un dulce que se elabora mojando una fruta o una verdura en una masa bastante líquida y friéndola en aceite.
Historia
La tradición de los beignets se remonta a las fiestas romanas de las calendas de marzo, que celebraban el despertar de la naturaleza por los ritos agrarios. Con este motivo, se infringían las prohibiciones y se autorizaban los disfraces.
Antes del período de ayuno de cuarenta días, era costumbre celebrar la fiesta y comer graso. De ahí viene el Mardi Gras (‘martes graso’), que precede a la Cuaresma y que corresponde al Martes de Carnaval español.
Como la fiesta reunía un gran número de personas, era necesario hacer dulces baratos y de preparación rápida. Se trataba también de agotar las reservas de mantequilla, aceite, huevos y demás antes de los cuarenta días de ayuno. De ahí la tradición de los beignets y también de los gofres y crepes.
Ingredientes habituales
Además de la harina, los huevos, el aceite y la mantequilla, la masa para beignets también lleva, desde el siglo XVIII, cerveza, según la región o receta considerada.
Tradiciones regionales
En Francia, los beignets se preparan en todo el territorio, pero tienen nombres diferentes. Según la región, se les llama bugnes, merveilles, oreillettes (‘orejuelas’), beignets de carnaval o bottereaux, tourtisseaux, corvechets, ganses, nouets, vautes (beignets de fruta), etcétera.
Existen muchas variantes regionales. Algunas consisten en freír la masa sola y salpicarla con azúcar, como las bugnes de Lyon y los chichis (equivalente de los churros españoles), otras mojan un trozo de fruta o de verdura en la masa antes de freírla, como los beignets aux pommes (‘buñuelos de manzana’) y los beignets de pomme de terre (‘buñuelos de patata’).
Véase también
En inglés: Beignet Facts for Kids