Antoni Canet para niños
Antoni Canet fue un importante arquitecto y escultor de la región de Cataluña. Se cree que nació en la ciudad de Barcelona. Su trabajo dejó una huella significativa en varias catedrales y edificios importantes de su época.
Los primeros pasos de Antoni Canet
Antoni Canet comenzó a destacar por su habilidad en la construcción y el arte. Se sabe que participó en las obras de la Catedral de Barcelona. Un antiguo documento llamado Llibre de l'Obra del cor (que significa "Libro de la obra del coro") menciona que Canet ya ganaba casi tanto como el maestro principal, Pere Sanglada. Esto nos dice que era un trabajador muy talentoso y con mucha experiencia.
Su primer periodo de trabajo en la Catedral de Barcelona duró solo medio año. Después de eso, se trasladó para trabajar en un proyecto importante en la Catedral de Mallorca, específicamente en el portal del Mirador, alrededor del año 1397.
Regreso a la Catedral de Barcelona
Al año siguiente, Antoni Canet regresó a Barcelona y continuó trabajando en la catedral de su ciudad natal. Allí, participó en la decoración de la capilla del Baptisterio y en la puerta que da acceso a la sala capitular desde el claustro.
Uno de sus encargos más notables en la Catedral de Barcelona fue la creación del sepulcro del obispo Ramon d'Escales. Este trabajo le fue encargado en 1409 y lo terminó en 1411.
La Catedral de Gerona y otros proyectos
Antoni Canet también tuvo un papel crucial en la construcción de la Catedral de Gerona. Él defendió la idea de construir una nave principal única, un diseño que era bastante innovador para la época. Sus argumentos convencieron a los responsables de la catedral, quienes lo contrataron para dirigir las obras junto con Guillem Bofill.
Canet trabajó en la Catedral de Gerona hasta el año 1426. Durante este tiempo, fue el encargado de crear dos de las claves de bóveda de la nave central, que son piezas fundamentales en la estructura de los techos abovedados.
Mientras trabajaba en Gerona, también aceptó otros encargos, como la construcción de un tabernáculo para la iglesia de Sant Domènec. Antoni Canet falleció en el año 1431, dejando un legado importante en la arquitectura y escultura de Cataluña.
