Cadena trófica para niños
La cadena trófica, también conocida como cadena alimenticia o cadena alimentaria, describe cómo la energía y los nutrientes pasan de un ser vivo a otro en un ecosistema. Imagina que es como una fila donde cada ser vivo se alimenta del anterior y, a su vez, sirve de alimento para el siguiente. Es una forma de entender cómo la vida se conecta y cómo la energía fluye en la naturaleza.
Contenido
¿Cómo se transfiere la energía en la cadena alimentaria?
En una cadena alimentaria, cada parte, llamada eslabón o nivel trófico, obtiene la energía que necesita para vivir del eslabón que está justo antes. Los primeros en la cadena, los productores, consiguen su energía del sol. Lo hacen a través de un proceso llamado fotosíntesis, donde usan la luz solar, el agua y los minerales para crear su propio alimento. Así, la energía se mueve de forma ordenada y hacia arriba a través de la cadena.
Sin embargo, en cada paso de un eslabón a otro, se pierde una parte importante de esa energía. Por eso, un animal que está al final de la cadena (como un consumidor terciario) recibe menos energía que uno que está al principio (como un consumidor primario). Debido a esta pérdida de energía, las cadenas alimentarias no suelen tener más de cuatro o cinco eslabones.
¿Qué pasa si un eslabón desaparece?
Si un eslabón de la cadena alimentaria desaparece, puede causar problemas en el ecosistema:
- El nivel anterior a la especie desaparecida podría crecer demasiado, porque ya no tendría a sus depredadores naturales.
- Los niveles que están por debajo o al lado también podrían verse afectados, ya que se rompería el equilibrio natural.
¿Quiénes forman parte de la cadena alimentaria?
En cualquier comunidad de seres vivos, encontramos diferentes grupos que forman la cadena alimentaria:
Productores: Los que crean su propio alimento
Los productores primarios son seres vivos autótrofos. Esto significa que pueden fabricar su propio alimento. Usan la energía del sol (a través de la fotosíntesis) o de reacciones químicas con minerales (a través de la quimiosíntesis) para crear materia orgánica a partir de elementos simples como el aire y los minerales del suelo. Un ejemplo son las plantas.
Consumidores: Los que se alimentan de otros seres vivos
Los consumidores son seres vivos heterótrofos. Esto significa que necesitan alimentarse de otros seres vivos para obtener su energía. Hay varios tipos de consumidores:
Depredadores y carroñeros
Los depredadores son animales que cazan y se comen a otros animales, ya sea enteros o en parte. Los carroñeros son un tipo especial de consumidores que se alimentan de los restos de animales muertos.
Descomponedores: Los recicladores de la naturaleza
Los descomponedores son organismos como las bacterias y los hongos. Ellos se encargan de transformar la materia orgánica muerta (como hojas caídas o animales sin vida) en sustancias más simples que pueden ser reutilizadas por los productores. Son como los recicladores del ecosistema.
Parásitos: Los que viven a costa de otros
Los parásitos son organismos que se alimentan de otros seres vivos, llamados "huéspedes", sin matarlos de inmediato. Por ejemplo, algunos insectos pueden ser parásitos de animales más grandes.
Niveles de consumidores en la cadena
Podemos clasificar a los consumidores según de qué se alimentan:
- Consumidores primarios: Son los herbívoros. Se alimentan directamente de los productores (plantas o algas). Por ejemplo, una vaca que come hierba.
- Consumidores secundarios: Son los carnívoros que se alimentan de los consumidores primarios. Por ejemplo, un lobo que come un ciervo.
- Consumidores terciarios: Son los animales que se alimentan de consumidores secundarios. Suelen ser los depredadores más grandes en un ecosistema, como las aves de presa o los grandes felinos.
En realidad, puede haber hasta seis o siete niveles de consumidores, y no solo se basan en la caza, sino también en el parasitismo o la descomposición. Es interesante saber que un mismo animal puede tener diferentes formas de alimentarse a lo largo de su vida, lo que lo situaría en distintos niveles tróficos. Por ejemplo, los renacuajos (larvas de ranas) comen algas, pero las ranas adultas son carnívoras.
¿Qué son las pirámides tróficas?
Las pirámides tróficas o pirámides ecológicas son una forma visual de mostrar cómo se distribuye la energía y la cantidad de seres vivos en cada nivel de la cadena alimentaria. Se llaman pirámides porque siempre hay más energía y más seres vivos en los niveles más bajos.
- Pirámide de energía: Muestra cómo la energía disminuye en cada nivel. Solo alrededor del 10% de la energía de un nivel pasa al siguiente. El resto se usa para vivir (respirar, moverse) o se pierde como calor. Por ejemplo, si una planta capta mucha energía del sol, solo una pequeña parte de esa energía llegará a un animal que se coma a un herbívoro que comió esa planta.
- Pirámide de biomasa: Representa la cantidad total de materia viva (peso) en cada nivel trófico. Generalmente, hay mucha más biomasa en los productores que en los consumidores.
- Pirámides de números: Muestran la cantidad de organismos individuales en cada nivel. A veces, esta pirámide puede verse "invertida". Por ejemplo, en un bosque, puede haber un solo árbol grande (productor) que alimenta a muchos insectos (consumidores primarios).
La energía y los niveles de la cadena alimentaria
La energía fluye de un nivel a otro en la cadena alimentaria. Las plantas usan la energía del sol para crear su alimento. Gran parte de esa energía la usan para sus propias funciones vitales y otra parte se almacena en su cuerpo. Cuando un herbívoro come una planta, esa energía almacenada pasa al herbívoro.
De nuevo, el herbívoro usa gran parte de esa energía para vivir y el resto se almacena en su cuerpo. Este proceso se repite en cada nivel. Por eso, cuantos más pasos haya en la cadena, menos energía quedará disponible al final. Es raro que una cadena alimentaria tenga más de cuatro o cinco eslabones. Con el tiempo, toda la energía que pasa por la cadena se pierde en forma de calor.
Las plantas obtienen energía del sol, y los animales la obtienen de lo que comen. Tanto plantas como animales usan esa energía, pero siempre liberan una parte como calor al ambiente. Por eso, el flujo de energía en un ecosistema es siempre en una dirección.
Además, algunos microorganismos transforman la materia orgánica muerta en minerales. Estos minerales son usados por las plantas, que luego son comidas por los animales. Cuando plantas y animales mueren, sus restos son transformados de nuevo por los microorganismos, y el ciclo de la materia vuelve a empezar. Así, la materia se mueve en un ciclo constante en el ecosistema.
¿Qué tan larga es una cadena alimentaria?
La longitud de una cadena alimentaria nos dice cuántos pasos hay desde los productores hasta los consumidores finales. Es una forma de medir cómo se mueve la energía y cómo está organizado un ecosistema.
Las cadenas alimentarias son como caminos por donde la energía se mueve. Comienzan con los productores (como las plantas) o con la materia orgánica muerta, y terminan con los organismos que se alimentan de ellos.
Los científicos estudian las cadenas alimentarias para entender cómo funcionan los ecosistemas. Han propuesto ideas sobre por qué las cadenas son más largas en algunos lugares que en otros, por ejemplo, si el tamaño del ecosistema influye, si la energía disponible las limita, o si el tipo de hábitat es importante.
Los productores, como las plantas, son los que inician la cadena. En lugares muy profundos del océano, donde no llega la luz del sol, existen cadenas alimentarias especiales. Allí, bacterias y otros microorganismos usan sustancias químicas de la Tierra (como el sulfuro de hidrógeno) para producir su alimento, en lugar de la luz solar. Los consumidores son los organismos que se comen a otros.
La longitud de la cadena alimentaria es importante porque la cantidad de energía que se transfiere disminuye en cada paso. Como regla general, solo el diez por ciento de la energía de un nivel pasa al siguiente, ya que el resto se usa para las funciones vitales. Por eso, normalmente no hay más de cinco niveles en una cadena alimentaria. Los seres humanos pueden obtener más energía si comen alimentos que están más abajo en la cadena, como una ensalada en lugar de carne de un animal que comió lechuga.
La eficiencia de una cadena alimentaria depende de la energía que los productores primarios capturan al principio. El consumidor primario obtiene su energía del productor y la pasa a los consumidores secundarios y terciarios.
Estudiar las cadenas alimentarias es muy útil para entender cómo los contaminantes del ambiente pueden moverse y acumularse en los seres vivos.